DELICATE // HYUNIN.

1«Ojos angelicales»

Había deseado tanto que algo interesante pasara...
Y ahora que está ocurriendo no sé ni siquiera como reaccionar.

Normalmente iba de mi casa a la universidad, y así sucesivamente, los fines de semana prefería estar acostado viendo la tv que estar en alguna fiesta deseando estar en mi cama.

No sé por qué esta vez me deje convencer...

—¡Será divertido!.— Sigue repitiendo Changbin, mi mejor amigo. Acaba de pasar uno de sus brazos sobre mis hombros para darme un sacudón y probablemente darme ánimos, pero eso no sirve.

No quiero estar aquí.

Changbin suele ser el más fiestero de los dos, por si eso no ha quedado lo suficientemente claro. No puedo quejarme de su amistad, siempre ha estado ahí para mí, pero cuando se trata de fiestas ni siquiera lo piensa un segundo.

Sus ojos se clavan nuevamente en mí cuando cruzamos la puerta del lugar.

No recuerdo que me haya hablado de este... ¿Qué se supone que es esto?, ¿Un club nudista?.

El lugar estaba rodeado de minis escenarios redondos, donde un tubo se hallaba en medio y varias personas con ropa diminuta bailaban en él.

No puedo creer que Changbin me trajo aquí.

—¡Cambia esa cara, la vas a pasar bien!.—grita sobre la música e intento no sonar disgustado ante sus palabras.

¿Cómo se supone que iba a pasarla bien?.

—¿Debo dejar dinero en su ropa interior o cómo es esto?.—Pregunto sarcásticamente, realmente no es algo que me importe.

Sin embargo, Changbin parece no haber entendido lo que quise decir e igualmente responde:

—No es necesario que dejes dinero en sus cuerpos, puedes dejarlo en el escenario, también les gusta.

—¿Cuántas veces has venido a este sitio?, Parece que tienes experiencia.

—¡No te creas!, Apenas es mi tercera vez, solo estamos aquí porque quiero mostrarte algo.—Dice jalando de mi brazo. Me lleva hasta unas escaleras adornadas con algunas luces rojas.

¿Cuánto falta para irnos? Realmente esto me hace sentir incómodo.

Comprendo inmediatamente que el segundo piso se trata de un área VIP, no hay mucha gente pero me sorprende la cantidad de personas jóvenes y adineradas que se encuentran sentadas en el lugar.
Frente a ellos hay un enorme escenario repleto de luces, hay varios tubos en él y pronto comprendo que se trata de una función privada.

Al menos eso creo...

—¿Podemos estar aquí?.—Pregunto por lo bajo sentándome en uno de los sillones rojos, Changbin inmediatamente se deja caer a mi lado.

—Obvio, no pagué para no ver este show, créeme, lo vas a amar.

Bufo y casi al instante mi mejor amigo me mira, sabe que lo he hecho a propósito, bufo cada vez que me aburro y si, esto es jodidamente aburrido.

La música comienza a sonar y en mi campo de vista aparecen tres bailarinas con vestidos diminutos bailando en el tubo.  Changbin parece encantado por eso, pero realmente no puedo mirarlas mucho tiempo.

¿Esto debería llamar mi atención o cómo funciona el cuerpo masculino?.

Una cuarta persona se hace presente en el escenario, es un hombre y en cuanto aparece, los ojos de Changbin se clavan en mi.

—Te dije que te gustaría.

Bueno, no está mal... El sujeto baila bien.

Su cuerpo está cubierto por un traje completamente blanco, lo cual no tiene sentido dado que él parece ser la única persona vestida dando tal espectáculo, sin embargo, no puedo evitar contemplar las cuerdas estilo Bondage Crotch que envuelven su cuerpo.

No pregunten cómo es que sé eso...

—Es... Bueno.—Digo sin apartar la vista de él. Se mueve al ritmo de la música tan fantásticamente que me tiene hipnotizado.

Unos minutos después baja del escenario para caminar sensualmente por el público, claro, sin perder el ritmo de la música.

¿Quién carajo es esta persona?.

Cómo si hubiera leído mi mente, el chico clava sus ojos en mi y camina directamente a mi asiento. Todos los músculos de mi cuerpo se tensan cuando lo veo arrodillarse frente a mi.

Carajo...

Sus rostro está cubierto por un antifaz negro que apenas me deja ver sus ojos, me hubiera encantando poder descifrar aquel color de ojos entre tanta luces de colores, pero desgraciadamente no pude verlos.
Retengo la respiración cuando sus manos juegan con mis rodillas, subiendo lentamente hasta casi pasar mi muslo, sus ojos rasgados me miran a través de ese antifaz, ese par de ojos angelicales me estaban viendo.

¿Cómo se respiraba?.

Cualquiera de la puerta para afuera pensaría que se trata de un ángel...

Un ángel con un oscuro secreto al parecer...

Inclino mi cabeza para mirar más detalladamente aquel rostro, lo veo parpadear confundido y levantarse casi al instante en que se da cuenta de mis intenciones.

—¿Quién es?.

—Te dije que te la ibas a pasar bien.