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— Como todas saben ya desde hace un tiempo, el señor Kenichi Matsubara dará una fiesta en celebración por cerrar un importante negocio de su compañía — dijo la señora —, y nos ha pedido mandar a nuestras mejores 4 cortesanas.
Todas las jóvenes escuchábamos sentadas las palabras de mi madre, Warabihime y yo nos manteníamos un poco apartadas de las demás, mientras que de vez en cuando nos mirábamos con caras aburridas por el discurso que recibíamos.
Sin duda parecemos dos niñas berrinchudas — pensé.
— La fiesta de celebración será este 18 de febrero en la residencia Kobayashi. Lo bueno de todo esto es que la residencia solo está a unas 8 horas de aquí, así que usaran carretas de medio de transporte — dijo la señora volteando a nuestra dirección —. Warabihime, al ser nuestra Oiran serás una de las cortesanas que irán y (T/N) tú iras en la representación como la heredera de la casa Kyogoku. Tendrá que ver alguien que las mantenga en orden.
-— Si señora — ambas contestamos con una reverencia de cabeza.
— Esto es todo, pueden irse a descansar. (T/N), necesitamos hablar.
Y así como estaba presente, desapareció de mi vista por los pasillos de la casa.
— ¿Qué crees que te diga? — dijo Warabihime.
— De seguro me hablara de las reglas que debemos acatar en aquella residencia — conteste haciendo un berrinche —, yo ya quería dormirme, estoy cansada.
Warabihime rio —. Entre más rápido vayas mejor, no querrás envejecer rápido — dijo divertida.
— Ni lo digas, será mejor ir. Descansa Warabihime — dije despidiéndome.
— Descansa (T/N).
Sin dudas mis planes de dormir mis 8 horas estaban siendo solo un lindo sueño.
Warabihime/Daki
Por fin la reunión había finalizado. Una noche bastante atareada a mi parecer, pero con leves ratos de diversión.
Y un pacto que siempre cumpliré.
Caminaba con paso tranquilo por los techos de los edificios del distrito, solo uno que otro humano ebrio caminaba por la sola calle sin duda el distrito ya estaba a punto de dormir.
Ya en las afueras del distrito, solo el sonido de los animales nocturnos se escuchaba en su esplendor en lo profundo del bosque.
Fue hasta ese momento que mi caminar se detuvo. El sentir aquel brazo en mi cintura y las leves palmadas en mi cabeza hicieron que girara velozmente para correspondes gustosa con un abrazo.
— ¡Onii-chan! ¡Te extrañé! — dije sonriendo.
— Así, espero no hayas hecho berrinches en mi ausencia Daki — Gyutaro dijo con una leve sonrisa.
— ¡Yo nunca hago berrinches! — mencione indignada, siendo contestada por caricias en mi cabeza.
— Claro, claro Daki.
— ¡Por cierto, Onii-chan tengo mucho que contarte! — conteste finalizando el abrazo —. ¿Adivina qué?
— Hummm… que adivino.
Sonreí —. Tengo una amiga — revele emocionada, mientras la cara de confusión aparecía en el rostro de mi Onii-chan —. ¿Qué sucede? — pregunte confundida.
— Ese olor en ti… es tu amiga — dijo Gyutaro serio.
El olor, rayos. No recordaba la buena percepción en los olores que teníamos.
— No, solo es el olor de las humanas asquerosas de la casa donde resido — dije desviando el tema.
— ¡Ah!, un olor es más potente que los demás, hermanita — dijo mientras rascaba su cuello nervioso —, ese olor es de tu amiga hummm… es la humana, ah…
— Onii-chan…
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Hola queridos lectores, espero se encuentren bien, aquí el nuevo capitulo espero les guste.
Por fin, por fin apareció Gyutaro (gritito fangirl) pero parece que no esta muy de acuerdo con nuestra amistad con Daki ¿Gyutaro aceptara nuestra amistad? Vaya, vaya nos la deja difícil.
Espero poder captar bien lo que es la personalidad de Gyutaro de este capítulo a los demás, me esforzare en lograrlo.
Quiero agradecer porque a tan solo unos días la historia ya llego a 1.03k de vistas, les agradezco mucho de verdad, les mando un abrazo virtual, los quiero♡♡♡
