Mi pie ya estaba mejor, ya caminaba sin cojear tanto y podía hacer mi trabajo. Aquella fatídica mañana me encontraba fuera de la oficina de Sovieshu viendo algunos documentos.
—¡Merik!— maldita sea; suspiré mientras volteaba a ver a Rashta que me abrazó y de inmediato le di un pequeño empujoncito
—Tendremos una charla sobre el contacto físico Rashta; creo que sabes que no me gustan los abrazos
—Rashta solo quería saludarte, a Rashta le gustó mucho tu regalo a diferencia de la cruel de la emperatriz tu le diste buenos deseos a mi bebé
—Si, bueno nos vemos más tarde— abrí la puerta y entre a la oficina, Sovieshu no estaba había salido por una emergencia pero me encargo el papeleo de aquella mañana.Después de acabar el papeleo salí de la oficina y me dirigí al jardín donde me esperaba el duque Ergy con cartas a la mano.
—Dime que es lo que creo— mencioné emocionada
—Si, nueva carta para ti— la abrí con ansias, nuevamente sus recomendaciones y diciéndome que me cuide y claro que promete que me llevará con el pronto; es muy hermoso que diga eso.—Se ve que te quiere— menciono Ergy
—Y yo lo quiero a el— sonreí algo tonta, luego a lo lejos ví a la emperatriz y a su hermano caminando y oh; ahora presenciare el "empujón" de Kosair hacia Rashta.—Ya me voy señorita Daath, debo hacer unos trabajos
—Si, vete las tempestades están por entrar a este palacio— hizo una cara confundida y se fue.Lo ví, su pequeña conversación y luego como retienen a Kosair para no golpear a Rashta y Navier se aleja con el; Rashta se voltea y logra mirarme y se acerca corriendo a mi mientras llora.
—Agredio a Rashta, llévame con un doctor
—Eh, claro...— le ayude a caminar y llame a un médico; el cuál salió y me dijo que todo estaba bien, que le informará al emperador y que cualquier cosa lo llamaramos asentí y no pasó mucho para tener a su majestad en presencia.—Daath
—Su majestad— hize reverencia y me tomó por los hombros con algo de decesperación
—¿Cómo está mi hijo?
—El médico dijo que estaba todo en orden; que no había porque preocuparse— suspiro aliviado ante mis palabras y sonrió
—Siempre salvando el día y a los que amo; ¿eres alguna protectora acaso?
—Ja, ja vaya a ver a su amante voy a hacer el inventario que me pidió nos vemos más tarde— me soltó los hombros y volví a hacer una reverencia y me fuí... directo a ver a la emperatriz c:<.Entre después de que me permitieron la entrada y hize una reverencia; Navier arqueó una ceja y me indicó que me acercará a lo cuál obedecí.
—¿Qué la trae por aquí?
—Lo ví y escuché todo; se que esto le trae problemas a usted y su hermano así que si desea que testifique estoy dispuesta, su majestad cree en mí y seguro me escuchará yo— Alzó su mano y guarde silencio; me miró compasivamente sonrió de forma leve.
—Es noble tu intención; pero te recuerdo que tú eres de otro bando— me sorprendí ante sus palabras— Yo sé que no estás de ningún lado pero si desde el inicio quisiste evitar manchar mi nombre con mi supuesto odio hacia Rashta y que lo infundo en los demás; debes mantener esa posición. Le expliqué eso a Kosair está mañana, no te odia solo que para el si estás de lado de esa mujer eres malo..
—Siempre tan perspicaz
—En mi fiesta de té, no te invité porque sabía que los rumores comenzarían, se que cuidas tus pasos nadie con sus cinco sentidos funcionando haría cosas sin pensar; y te agradezco pero no puedes hacer algo a mi favor a la mitad de la jugada
—No se a que juego estamos jugando pero; espero gane usted— hize reverencia y me fuí.Si ella tenía razón; me fui del lado de Sovieshu desde el principio ya no puedo saltar y cambiar de bando cada que me conviene pero ¿qué haré entonces ahora? si no puedo hacer cosas a favor de la emperatriz; ¿hago cosas a favor de Sovieshu? o ¿me quedó esperando al divorcio?..
Fuí a ayudar al marqués Karl al papeleo junto con Sovieshu el cuál quiso romper la rutina.
—¿Les parece ir al jardín a merendar?— el Marqués y yo nos miramos y dijimos "¿por qué no?", momentos después fuimos al jardín y ya nos esperaba una mesa con tazas una tetera y bocadillos.
—Tomen asiento porfavor— ante la orden obedecimos y nos miramos un poco; esto era inusual que tendría tan de buenas a Sovieshu como para romper nuestra rutina
—¿Puedo saber el motivo de su buen humor?— pregunté algo ingenua y el solo rio
—No has asistido a ninguna fiesta de té, la emperatriz no te invito a la suya y detestas tanto a Rashta que no deseaste asistir a la de ella; se me hace algo injusto que mis dos mujeres tengan fiestas y tú no hayas tenido ni una cena que no conste de recalentado de la merienda mientras te sientas en una silla de la cocina— ¿Ah? y el cómo sabía eso? digo; me da pena ir a sentarme a la mesa pero no tiene nada de malo comer en la cocina es más, sabe más delicioso si lo comes en la cocina
—No era nescesario majestad, como sabe no soy buena socializando— el marqués me miró y sonrió
—Desde que llegaste, nuestro trabajos es menos y es más divertido si, hay altibajos con su majestad y su vida privada pero ahí estás tú para arreglar y facilitar nuestros problemas; te mereces algo digno de ti— Sonreí, era bueno sentirme apreciada pero sabía que no podría sentirme cómoda ahí algún día tendría que irme.—Muchísimas gracias
—No, gracias a ti por algo eres la inquilina favorita— reímos los tres juntos y empezamos a comer; al terminar nos levantamos y cada quién se fue a su habitación y ahí recostada en mi cama en lo más profundo de mi mente surgió la idea más loca de mi vida.—Tengo que causar el divorcio antes de que alguien más lo haga ...
He vuelto!!! ¿qué tal el capítulo? ¿les gusto? <( ̄︶ ̄)>
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Una mexicana en la emperatriz divorciada
Fanfiction¡deseo ser cualquier personaje menos Rashta! otra historia cliché pero siempre he querido hacer esto :')