𝒔𝒐𝒍𝒐 𝒖𝒏 𝒓𝒂𝒕𝒊𝒕𝒐 🌧️ 𝒋𝒂𝒚𝒘𝒐𝒏

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"¿Lo conoces?" Le pregunto la chica desde la otra línea. Él está arreglando su cama, cuando tiró de la sábana escuchó como suspiró "me llama la atención".

Bueno, quizás al momento que la pregunta paso en su cabeza arrugó su frente con disgusto ¿le disgustaba que ella le llamará la atención el chico alto ese qué conoció hace poco? Tiro la almohada que tenía en las manos con fuerza, tuerce sus labios y agarrar el teléfono "para eso me llamas" indagando en las palabras anteriores "¿qué quieres saber?"

"Ese chico dijo que ERES SU NOVIO" La chica alza la voz, molesta "quiero saber si es cierto o no"

"¡Tanto te importa un mendigo chico!" Exclamó agresivo "ve y pregúntale" cuelga. No le interesaba la vida de su hermana incluso sus mejillas se pusieron rojas por lo airado que se sentía. Tal vez, su hermana estaba enamorada de ese chico antes que todo comenzará, pero si fuera así ¿Jay no le intereso o algo? Se sentó en la cama y tiró su cuerpo en el colchón. Si contará una parte de su infancia, sería un molestar pensar en todas las cosas malas que sucedieron y como se entero que su hermana, la cual tenía un interminable odio-amor hacia ella fue cuándo su madre confeso haberle hecho infiel a su padre y que Yang Jungwon tuviera sangre de otro hombre.

Iba a la casa de su abuela a verla, alcanza verla en el pequeño jardín regando las flores. Su abuelita Kim nunca fue mala, lo trató como un nieto y lo adoró tanto que le dolió haberse separado de él y vivir lejos de la casa de Yang por problemas familiares su hermana se tuvo que ir. Lee Chae Young es bonita, una chica alta, le gusta la música y el rap es uno de sus cantos todavía no piensa ir a un agencia aunque no sea su hermana Chae Young la comprende, pueda que le irrita y salgan mal por no entenderse, igual sabe que ella es amable y honesta.

Jungwon salió temprano de casa, iba directo a disculparse con su hermana que compró lápices labiales ya qué Elizabeth amaba los cosméticos y con ello debería aceptar sus disculpas. No fue así, Jungwon amante de la lluvia se quedó sentado en la banqueta, observando cada carro que recorría y lo miraban extrañado ¿quién estaría a ese hora mojándose por la lluvia? Solo él. Claro, no falto sus panditas y un pequeño refresco pues aquello hace calmar sus nerviosismo y ansiedad que lo abrumaba.

—Te enfermeras —volteó a su costado para observar como ese alta se acomodaba a su lado—, no eres inmortal o algo así.

—No es importante —respondió tosco—, ¿tú no deberías entrar a tu casa? Tienes que cruzar.

—¿Ah? ¿Es malo que me acomodé a tu lado para hacerte compañía? —lo contradijo— no.... Es.... Tan malo.

—De acuerdo, —hizo que no le importaba y seguía masticando su gomita está vez sin ofrecerle nada a Jay.

Jay oteo la bolsa y tuerce sus labios.

—¿Es para la chica que vive con la abuela Kim? —Jay lo vio a los ojos dudando— acababa de verla... Y me saludo. La chica es amable.

Si se tratará de su novio, se pondría celoso. Jay no es nada de él para ponerse de esa manera, no movió ningún músculo y sentía que Jay no le quitaba los ojos encima.

—¿Lo estás haciendo para molestarme? —Dijo arrugando la frente con hastío, —Y ¿cómo conoces a la Señora Kim?

Jay le sonríe abiertamente sin importarle lo molesto que Jungwon se pusiera.

—Kim es buena, siempre me llevaba un pastel junto a la chica y quizás el día que me la tope no la reconocía porque se fue hace años de la casa y Kim me dijo que regreso y que ya no iba a sentirse sola —Jungwon sabía que Jay tenía algo en sus manos y cuándo terminó todo, le atino a solo asentir—. No sé porque no les hablas y solo te sientas aquí esperando que te vean o solo las observas.