Mitsuhakka

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Au: Hakkai fem!

Takashi Mitsuya es buen líder, hermano mayor, con una personalidad tranquila, amable, no se involucra en peleas.

Es sumamente celosos.

Desde su puesto en el club puede observar a Hakkai Shiba correr, sus pechos reboten con tranquilidad la ropa se centra en sus mejores puntos, esa cintura irreal. Precencia la convivencia de la chica que le gusta, aunque también puede romper tizas de sastre cuando la ve junto a otro hombre y este se toma la confianza de tocarla.
Solo eran idiotas lujuriosos detrás de su mujer, cómo Soya de la cuarta división.

—Si tanto te gusta por qué no te le declaras— Mitsuya observo al más alto, su dragón gemelo vino con el uniforme antiguo de Mikey para que lo arregle, le dé algunos puntos para la niña que le gusta, desearía ser Mikey y ser tan claro con lo que siente.

—Hakkai me ve como su hermano, no alberga sentimientos románticos hacia mí.

—¿Eres bobo o que? Takashi, se te a insinuado muchas veces, soltado comentarios, desde que se unió a la pandilla— Draken hizo memoria, riéndose por esas indirectas no tan delicadas.—Eres un ciego por no verlo.

—Mejor vete antes de que te pateé el culo

—uy que miedo— se burlo mientras esquiva la tiza que le lanzó.—bais ciego, ahg, sone como Mikey— se rió, viendo como se iba, al rato pudo escuchar pasos rápidos en su dirección. La puerta fue abierta dejando ver a Hakkai, la cual le sonrió cariñosa, con las mejillas rojas.

—Taka-chan, necesito tu ayuda— su falda estaba un poco más abajo de lo normal, tenía la casaca del uniforme a pesar de que era verano y hay demasiado calor.

—Claro ¿En que?— Con todo el sonrojo del mundo hakkai se quitó la casaca, dejando ver sus pecho un poco más grandes de lo normal, sin corpiño.—¿Se te olvidó tu sostén?— desvío sonrojado su mirada de eso pezones que se ven con claridad por la camisa traslúcida.

—Robaron mi ropa interior— sus lágrimas de vergüenza se muestran. Se aferro al peli-lila buscando algo de consuelo, por qué un loco acosador le quitó sus pertenencias íntimas a saber que hará con eso. “calmate Takashi, cálmate, CALMATE, no seas un aprovechador, que tu cara este entre sus senos, no significa que lo disfrutes„ intento respirar con algo de lentitud pero, el dulce aroma del perfume se filtro.
La tomo de los muslo alzandola para dejarla en el escritorio, miro hacia el piso intentando bajar toda su exitación.

—¿Taka-chan?— agarro entre sus manos la cinta métrica, buscando fuerzas y control.

—¿Quieres que te lo haga?—Hakkai detuvo su pensamiento caliente al escuchar eso, sintió algo en su vientre, tirando de ella exitada por malinterpretar las palabras— No tengo la tela de algodón pero, tengo algo de tela con bordado, ya sabes encajé.

—Si por favor— el ambiente estaba algo calurosos entre ambos.—¿No necesitas tomar mis medidas?— extendió los brazos permitiendo que el varón pasará su extremidades por su cintura subiendo la cinta para rodear su pechos avergonzado tubi que hacer que el dorso de su mano tocará los tibios pechos.

—hakkai

—¿Si?

—no puedo medirte bien el pecho si no dejas de abrazarme— la contraria había atrapado a su chico en un abrazo sin darse cuenta.

—Es que taka-chan es tan apuesto y caballeroso, solo me dan ganas de abrazarlo—sintio como el contrario también paso sus brazos por su cintura abrazándola, eso la hizo moverse con felicidad apegándose más al contrario.—mhn— dió un suave gemido al darse cuenta que en definitiva su abrazo se volvió una de panda para terminar con la piernas cruzadas en las caderas contrarias, pegada lo suficiente como para sentir el rose de la tela contraria, sobre su desprotegida zona íntima.—Lo siento taka-

Se sorprendió al sentir como estaba echada sobre la mesa principal ahora podía ver el rostro rojo del ojilila.

—Hakkai— gruñó su nombre exitado a más no poder, su mano en el muslo contrarió mientras la otra está al lado e la cabeza de la femina.—Tu estás siendo descuidada— Murmuró al mismo tiempo que su mano se deliza a la parte interna del muslo, debajo de la falda cerca a la zona íntima de la peliazul.

Hakkai sintió un escalofrío, toda su piel se puso de gallina, la faccion dominante del calmado Takashi Mitsuya, hace que su sangre se estremesca.

—Taka— puso su mano sobre su boca, sintiendo esa caricia sobre sus labios, antes de abrirse delicadamente para dejar que ese dedo se pose sobre su clítoris, estaba caliente.—Taka—gimio, sintiéndose como aplasta hacia arriba, luego abajo, sus piernas se tensan por esos movimientos sobre su emisor de placer.

humedo„ pensó encantado al sentir como sus caricias hacen que la contraria se exite lubricando, paso sus dedos por la entrada, detuvo con su mano que la piernas se cerrarán.“no, no, aquí es el mejor punto„ hundió unos de sus dedos previamente humedecido por el líquido que segrega. Luego dos, tres, hasta que los preciosos sonidos fueron altos.

—¡Taka!— sus ojos se encontraron, ella extendió un brazo al contrario para acercarlo al suyo y depositar un beso tímido. Takashi correpondio sin dejar de masturbarla, guiando el beso a uno mas pasional, dejando que su boca tome la tímida para dejar que sus músculos se encuentren en un rito pasional. Sintió como las manos de su mujer se aferran a su espalda, como su paredes hace movimiento contradictorios aprisionando sus dígitos, como gime en su boca, estaba muy cerca de su climax.

—¿Puedo?— la miro al rostro tras preguntar guardando esa imagen erótica, el avergonzado movimiento de cabeza le dió un si. Desabrochó su pantalón, su ropa interior lo bajo un poco lo suficiente como para dejarlo libre su miembro, lo guio con una mano, mientras que con la otra toma la de su pareja, afianza su agarre al sentir que se abre paso lentamente, siente su resistencia. El gemido adolorido lo hizo sentir culpable pero, la forma en la que las calidas paredes empezaron a chupar su miembro, nublaron esos pensamientos culpables.—Me movere— gimió, empujando sus caderas contra la pelvis contraria, el sonido del chapoteo hizo todo a un más erotico, fue inevitable que sus embestidas fueran rápidas, bruscas, moleindose contra la delicada vagina, tomar a Hakkai de las caderas, observando como su zona íntima lo toma con fuerza.

Quitó los brazos de la cara contraria para poder observar sus expresiones de placer, se hundió más observando la manera en la que esa boca forma una "o" soltando un gemido agudo apretó el borde la mesa entre sus manos, sosteniéndose mientras el placer que esta sobre su cuerpo hace que sus piernas se estiren, sus dedos se encojan. Se vino, jadeo en busca de aire pero, siguieron saliendo gemidos por qué su contrario todavía no se venía, la sobre estimula, frotándose su clítoris, desbariando en el orgasmo hasta que se vino nuavemen sintiendo el líquido caliente dentro de ella.—¡Taka!

—Hakkai, lo siento mucho — Murmuró acercando su frente a la contraria.—acabo de aporvecharme de la situación.

—Taka-chan— paso sus manos por los hombros contrarios para reclamar un beso.—Yo también quería, me gustas, te amó.

—Yo también te amo

(...)

—¿Que te hizo ese?

—le robó la ropa interior a mi Hakkai, obviamente tenía que hacer algo.

—¿Matarlo a golpes?

—¿me vas a ayudar o no, Draken?

—Si, tiremoslo al río.

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Ay que soft, bueno, puerko, pero, Sof, viva el amor. <3

Especial de San ValentínDonde viven las historias. Descúbrelo ahora