Capitulo 10

8.8K 743 86
                                    

Una semana después y sentada en el escritorio de mi despacho, tomé un sorbo del café que tenía a mi lado para seguir mirando los documentos que tenía frente a mí con interés

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Una semana después y sentada en el escritorio de mi despacho, tomé un sorbo del café que tenía a mi lado para seguir mirando los documentos que tenía frente a mí con interés.

Eran todos los informes que mi abogado había hecho sobre Jhon Kim y su situación, así como toda la información que había recopilado hasta ahora del caso. Desde reportes policiales, la declaración del señor Kim, su sentencia y los documentos del banco que probaban el supuesto fraude, Jackson había hecho muy bien su trabajo hasta ahora.

Así como Jennie.

Con una media sonrisa mientras leía los papeles, recordé la tarde en la que la trabajadora social nos había visitado en casa y como Jennie, como dulce esposa y ama de casa, había atendido a la mujer de las mil maravillas y se había comportado conmigo como la mujer enamorada y esposa joven, dócil y amable que tenía que aparentar.

Todo había ido de maravilla, y por supuesto la mujer se había tragado el cuento completo.

Sin poder evitarlo, recargué mi cabeza hacia atrás y sonreí mientras grababa lo ocurrido ese día.

-Flashback-

-Entonces…- frente a nosotros la serena mujer rubia levantó la vista de su tableta y nos miró de nuevo- ¿Dónde me dijeron que se conocieron?-

A mí lado y con su brazo enroscado en el mío, Jennie sonrió abiertamente y me dio un suave apretón en el antebrazo para empezar a hablar.

-En una fiesta de la empresa- dijo segura- Todos los jefes de departamento estuvimos ahí, y Lisa estuvo con nosotros junto a los demás accionistas de la empresa-

Ante esa simple respuesta la rubia mujer de ojos verdes asintió ligeramente como si esperara que dijéramos algo más y nos miró paciente. Tal como lo había hecho los últimos quince minutos de su casi interrogatorio.

A mí lado, Jennie sonrió y volvió a hablar.

-Y todo empezó a partir de ahí- me miró con cariño- Comenzamos a frecuentarnos y…nos hicimos novias-

Antes de poder decir algo, Jennie me miró con ternura y apretó mi mano entre la suya con delicadeza. Sin poder evitarlo y algo sorprendida por su excelente actuación, la miré maravillada hasta que la voz de la trabajadora social frente a nosotros me sacó de mi ensueño.

-Tengo entendido que nadie sabía de su relación ¿O me equivoco señora Manoban?-

Durante unos instantes miré a la mujer frente a mí sin saber que responder y sintiendo el amarre de Jennie sobre mí brazo tomé aire para contestar.

The Fire Deal | JENLISA G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora