M
e costaba quedarme dormida.
Por cuarta vez en los últimos quince minutos miré el reloj a mi lado y regresé mi mirada al techo. Exhalé profundamente. Eran las dos de la mañana.
Lo que quería decir que faltaban menos de siete horas para que todo terminara.
En menos de siete horas leerían el testamento de Yoo y toda la herencia quedaría en mis manos. Tendría lo que siempre había querido desde un inicio, por lo que había hecho todo lo que había hecho, por lo que me había casado con una completa desconocida.
Tendría mi dinero, mis acciones, mi libertad. Lo tendría todo menos a ella.
A Jennie.
Quien ahora se comportaba precisamente como una desconocida. Y los tres meses anteriores parecían borrados por completo. Las charlas, las peleas, los viajes, las fiestas, las risas, los besos y la infinidad de veces y lugares en los que habíamos hecho el amor parecían haberse esfumado de pronto, y la indiferencia que yo le había mostrado días atrás era la que ella me mostró ahora.
Igual me lo había ganado a pulso.
Solté el aire contenido. Aunque había pasado las últimas horas devanándome los sesos para averiguar porque había cambiado tan radicalmente de actitud pero seguía sin encontrar respuesta, y para entonces la desesperación se estaba convirtiendo en impotencia al darme cuenta que no había mucho que hacer.
Tal como yo se lo había pedido con mis acciones, ella se iría en cuanto se hiciera lectura del testamento y todo quedara en mis manos. Nada más la retenía a mi lado, y el arreglo que había hecho tres meses atrás estaba cumplido por su parte por lo que no había razón para que siguiera en mi casa.
Solo una, pero suponía que no importaba cuando con mi actitud le había dejado claro todo lo contrario.
La iba a perder sin remedio.
No importaba todo lo que me hubiera dicho, no importaba el tiempo que habíamos pasado juntas, no importaba que me amara. No importaba que yo no supiera que iba a ser de mi vida sin ella.
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The Fire Deal | JENLISA G!P
Fiksi Penggemar❝Desesperada por sacar de la cárcel a su padre inocente, Jennie acude a la única con el suficiente poder para hacerlo; Su multimillonaria jefa Lalisa Manoban, a quien jamás a tratado. Para cobrar una herencia importante, Lalisa necesita urgentemente...