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— ¡Tu cabello es rojo!

Esas cuatro palabras fueron lo que recibió Mihye, la ahora pelirroja, apenas abrió la puerta de su departamento. Ni un "Hola, Mihye" o un "¿Cómo estás?" No. Heeseung era así de repentino cuando se trataba de una reacción totalmente sincera. La chica mostró su hilera de dientes.

— Así es—Mihye dio una vuelta en su lugar, logrando hacer que su vestido floreado se mueva al compás de su giro. Heeseung la miró encantado. — Decidí cambiarlo un poco.

— ¿Un poco solamente?

Él se le acercó a Mihye, adentrandose unos pasos al departamento, tomó un mechón del rojo cabello entre sus finos dedos y lo miró con atención. Ella no tenía idea si le había gustado o no. Trato de buscar su mirada para poder adivinar pero se le fue algo imposible.

— ¿Te gusta?—la chica tuvo un poco de miedo al preguntarle. Aunque llevara varios días hablando con Heeseung, una semana entera yendo a la tienda cada tarde para ser exactos, él seguía siendo indescifrable para Mihye.

Inclusive aunque lo conociera hace años y ya hasta sienta una cierta confianza en el medio, a veces dudaba en decir o hacer algunas cosas con Heeseung. Después de todo era el chico que le gustaba, y la mayoría de mujeres se habrán sentido avergonzadas de preguntar bobadas a la persona que las atraía por miedo a una respuesta inesperada.

Heeseung la miró y asintió sonriente.

— Me encanta—él no tenía problema en verla fijamente, no se solía poner nervioso. Sin embargo ella sí, asi que la famosa ola de nervios tomó por completo su cuerpo y tuvo que apartar la mirada hacia su costado. El chico lo notó, así que para romper con esos notorios nervios decidió tomar la iniciativa. — ¿Vamos ya?

— Sí—Mihye tomó su pequeño bolso y cerró con llave antes de salir junto a Heeseung hasta el elevador. — ¿A donde iremos?

El lugar era un misterio, pero Heeseung estaba mas que satisfecho. En alguna de las tantas charlas que fueron haciendo estos dias pasados Mihye le confesó que amaba la naturaleza, y también que las sorpresas la hacían sentir demasiado feliz. Por lo que el pelinegro decidió llevarla a un lugar fresco y con mucho verde como sorpresa, gracias a que recordó aquellos pequeños detalles que la pelirroja le dijo previamente.

— Sopresa—Heeseung elevó sus cejas repetidas veces y rápidamente cambió de tema antes de que Mihye empiece a cuestionar. Así que charló sobre lo primero que se le vino a la mente: el clima.

En el camino no solo hablaron sobre el clima, también se contaron qué hicieron ayer a la noche luego de despedirse al Heeseung cerrar la tienda e incluso surgió una mini charla barra discusión sobre el final de un show que a ambos les gustaba y se acababan de enterar.

Las horas pasando y el día de hoy estaba siendo uno muy lindo. No solo para Mihye, que la sorpresa le había encantado, sino que también para Heeseung. Estaban frente a un bello lago, rodeado de vegetacion, árboles, algunos pajaros haciendo melodía, el sol sobre ellos sin picar tan fuerte y tomando un helado. Era una cita preciosa.

— Me gusta aquí—dijo él mirando a su al rededor. Ambos se apoyaron sobre el barandal frente al lago, el atardecer decoraba el reflejo del agua y la brisa primaveral hacía de la escena mas hermosa.

Mihye se sentía en una escena de novela juvenil que en sus cortos años de vida jamás había tenido. Esta era la primera vez que salía con alguien que le gustaba. La chica en momentos sentía que el que mas hablaba era él, lo cual no le molesta en absoluto, pero sus palabras no salían fácilmente a como acostumbraba estando en la tienda y eso la frustraba, pareciera como si algo la frenara.

FEELINGS ━━ lee heeseungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora