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Jeongin sentía su carita hinchada, lograba sentir sus lágrimas secas en la parte de sus mejillas, sus ojitos dolían un poco por tanto llanto. ¿Pero saben que le alegro la mañana? Ver qué seguía abrazado de Hyunjin. El mayor estaba profundamente dormido, con un brazo en su cintura y el otro sobre su cabello, recordó que lo durmió con mimos en su cabecita, lo amaba tanto. Con mucho cuidado, se levantó hacía el baño para lavarse la carita, se veía muy mal, al verse al espejo quería llorar otra vez, pero no, debía ser fuerte.

Volvió a la habitación y Hyunjin ya estaba despierto, recargado en el respaldo de la cama mientras tallaba sus ojos. El rubio sonrió, le hizo ademán de que se acostara con él, ¿y quién era Jeongin para negarse? El menor fue, se acostó entre sus piernas boca abajo, con su cabecita recargada en su regazo y sus brazos abrazando la cintura de Hyunjin, el mayor le comenzó a acariciar su cabellito, había descubierto que a Jeongin le gustaban los mimos en su cabellera.

- ¿Cómo estás, pequeño? —Jeongin suspiro antes de responder.

- Mejor. Gracias por quedarte conmigo.

- Siempre me quedaré contigo. ¿Quieres comer? ¿Tienes hambre?

- Un poco, ayer no comí nada, solo el desayuno.

- ¿Quieres que te traiga la comida acá? ¿O vamos al comedor?

- Vamos al comedor, creo que ya fue mucha tristeza.

- Está bien, Innie. Cómo tú quieras. —Se agachó y le dió un besito a su cabecita.

- Hyun...

- Dime, bebé.

- ¿No vas a preguntar qué fue lo que pasó?

Jeongin volteo a mirarlo, con su barbilla en el estómago de Hyunjin, el rubio acunó su rostro y dió caricias con sus pulgares en las mejillas, le dió un casto beso antes de responder.

- Tú eres más importante que lo que diga aquel cuaderno. Yo sé que cuando estés mejor me contarás, por ahora solo me preocupas tú.

Dios, Jeongin se había enamorado de la persona correcta.

— Gracias, gracias en verdad.

Después de varios mimos por parte de Hyunjin, se vistieron y salieron al comedor. Yeji estaba en la cocina, terminando de preparar algo, Niki terminaba de poner la mesa.

— Jeongin-ah, alguien me dijo que tu comida favorita es la italiana, ¿verdad? —Preguntó Yeji y Jeongin asintió.— Preparé algunas pastas de ese tipo, más soda italiana, espero te guste.

— Gracias, Noona. Se que me encantará.
—Sonrió.

— Jeongin, Sunoo ayer me trajo un videojuego nuevo, ¿quieres jugarlo conmigo? —Hablo Niki entusiasmado.

El pelinegro sonrió en grande, ahora comprendía la tierna situación. Todos estaban tratando de hacerlo sentir mejor, su corazón sentía que le ponían curitas a esas grietas, se sentía feliz y amado.

— Claro que quiero, Niki. Jugaremos al terminar de comer.

— Perfecto, comamos de una vez entonces.

La familia comía felizmente, tanto a Hyunjin como a Yeji y Niki les tranquilizaba ver qué Jeongin estaba mejor, su carita de tristeza se había ido, en cambio estaba felíz, como siempre debió ser. Al terminar, Jeongin ayudo a Yeji a limpiar, después fue a jugar con Niki, Hyunjin se les unió y Yeji también jugó un poco.

Jeongin se sintió un poco triste luego, más que nada decepcionado, la familia que el pensaba que tenía antes, que también lo amo y lo hizo feliz, que siempre se encargó de darle todo lo que quería, era la misma familia que lo utilizo para una sustancia que les daría dinero, era la misma familia que lo dejaron abandonado después de su estupidez. No podía creer que una familia que no era de su sangre biológica, lo cuidará más que sus propios padres. Se sentía mal hijo.

— ¿Estás bien, Innie?

Hyunjin se acercó a él, Jeongin estaba en el patio, acostado en el verde pasto viendo lo bonito que era el cielo. El rubio no lo pensó y se acostó junto a él.

— Estoy bien, Hyun. Solo estaba pensando.

— ¿Que pensabas, pequeño?

— Lo bonito que es el cielo.

— Mmh, concuerdo. ¿Pero sabes que es más bonito?

— ¿Vas a decir que soy yo?

— Ay, me arruinas mi cursilería. —Jeongin río.

— Yo creo que el cielo eres tú, eres igual o hasta más bonito.

Hyunjin se puso en sus codos y sonrió, dió un beso en su frente y acomodo sus cabellos que estaban sobre su carita.

— Hyun, ¿recuerdas que te dije que no estaba enfermo? Yo lo decía porque mis padres lo decían, pero ahora se que era una realidad.

— ¿Por qué, amor? ¿Que leíste?

— Mis padres al parecer eran unos científicos, crearon una sustancia para alguien que les daría dinero. Esa sustancia la usaron en mí, fuí el sujeto de prueba, creo que ese líquido les jugó una mala racha. Las voces fueron un efecto secundario, es por eso que me guiaban al sótano, pero me caí y los doctores interfirieron.

— ¿Y la sustancia que era? ¿Algo tóxico?

— Los dictados decían experimento de control de emociones.

— ¿Querían controlar tus emociones?

— ¿O tal vez yo controlo emociones?

Ambos se miraron confundidos. Tenían respuestas pero ahora una pregunta más complicada.

— Todo es muy confuso, Hyun.

— Tranquilo, corazón. Te prometo que lo vamos a descubrir. —Jeongin soltó un suspiro.

— Quiero ver a mis padres, quiero saber dónde están, quiero preguntarles sobre todo.

— ¿Estás seguro de eso, Innie?

— Sí, pero quiero que vengas conmigo... sí puedes claro.

— Te acompañaría hasta el fin del mundo. Yo me encargo, veré los boletos y debo hablar con Yeji.

— ¿Y si Yeji y Niki nos acompañan?

— ¿Estarías bien con eso?

— Creo que es hora de que también estén con nosotros, no lo sé, nos sirve como viaje ¿familiar? —Hyunjin sonrió y volvió a darle un beso en la frente.

— Así es, Innie. Viaje familiar.

Jeongin debía preparse mentalmente para lo que venía, porque siendo sinceros, no estaba listo del todo.

- 🐺

Vengan, les debo terapia a todos por el capítulo anterior jdkajs, abrazo grupal.

No está de más agradecerles una vez más, somos 1.32K, 252 votos, más de 500 comentarios, que bonito en verdad. Gracias 💞

𝖤𝗌𝗊𝗎𝗂𝗓𝗈𝖿𝗋𝖾𝗇𝗂𝖺 - 𝖧𝗒𝗎𝗇𝗂𝗇 [✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora