-Por favor pará, sueltame -Grite con desesperación.
-¡Callate! mereces que te haga mil cosas por las estupideces que me haz hecho pasar. -dijo el hombre tomándome de la mandíbula fuertemente.
El mayor me tomo con fuerza de las manos y las ató con unas vendas que estaban cerca. Yo trataba de liberarme, 0ero era casi imposible, la fuerza que ejercía en mi cuerpo era inhumana, al menos para mí.
-Por favor-dije llorando
-¿A caso quieres que yo te calle? -habló fuerte.
Negué con la cabeza mientras trataba de no hacer ningún ruido. Aquel hombre aún seguía encima de mí, estaba entre mis piernas.
Repentinamente sono el timbre del departamento. Ambos nos pusimos alerta.
-Ire a abrir, cuidado de ti si haces algo -habló el peli negro
Se levante y camino unos pasos, pero se regresó, me tomo del cuerpo y me hizo sentar en la cama, me estaba arando los pies, me tomo de la cara y con la misma venda me amordazo. Nuevamente me empujó a la cama, estaba completamente amarrada de pies a cabeza.
El hombre salió de la habitación y la cerró con llave. pocos segundos después se escucho que la puerta principal se abrió.
Al parecer era una mujer, esta llegó gritandole a Aizawa, se escuchaba muy alterada.
-¡¿Que te pasa?! -grito aquella mujer. -Mic llegó muy mal a mi departamento, ¡se que fuiste tu!
-¿Por qué dices que fui yo? -ahora era Aizawa quién hablaba.
-Tienes sangre en los nudillos y la camisa salpicada de sangre, ademas escuche como discutidas con el desde mi departamento -habló rápidamente aquella mujer.
-¿Y que si yo lo hice? -habló con ironía.
-¡Es tu mejor amigo! ¿Eres estúpido? -habló aquella mujer algo alterada.
-Tengo mis razones, el estúpido es el y esa estúpida mocosa...-ahora era el peli negro quien se quejaba.
-¿Que mierda dices?
Un silencio abundó por todo el lugar, este era el momento de llamar la atención de aquella mujer. Di vuelta sobre la cama para poder caer y hacer algo de ruido, no tuvo mucho éxito ya que caí en la alfombra. Traté de levantarme pero no lo logre, así que comenzé a patear la mesa de noche que estaba al lado mío.
-Si solo vienes a traer problemas largaté -Habló Aizawa quien ya había escuchado el ruido que hice.
-¿Por qué? Me estas ocultando algo, se que lo haces, ¿Que es ese ruido? -dijo la mujer.
-No es nada, largaté.
Comencé a tratar de gritar pero como tenía la mordaza era casi imposible solo salían quejidos de mi boca.
-¡Shota dejame pasar! ¿Que te sucede?-habló aquella mujer algo alterada.
-¿Qué te sucede a ti? Largaté de mi casa, esto no es tu asunto.
Al parecer Aizawa saco a la mujer a empujones ya que se escuchaban los forcejeos de ambos.
-Te conozco desde hace años y se que algo ocultas, hablaré con Hizashi y ambos te sacaremos de aquí -grito la mujer detrás de la puerta.
A los pocos segundos escuche los pasos del mayor acercandoce poco a poco hasta llegar a la puerta y abrirla lentamente.
El hombre entró y me miró, estaba tirada en el suelo en poción fetal, tenía mucho miedo.
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𝐋𝐚 𝐝𝐨𝐛𝐥𝐞 𝐜𝐚𝐫𝐚 𝐝𝐞𝐥 𝐚𝐦𝐨𝐫
Fiksi PenggemarNo todas las relaciones terminan bien, a veces no podemos salir de una relación en la que sabemos que estamos perdiendo todo, desde nuestra dignidad hasta nuestro amor propio. Por ningún motivo estoy tratando de romantizar este tipo de actitudes, si...