" 14 años después "
Esta historia está alejada de lo que pasa en la película, será distinto, como por ejemplo aquí la familia es más unida, bruno sí está con ellos, y la gente de Encanto puede salir.
Luisa carga unos ladrillos para construir una casa mientras es observada por niños, adultos y ancianos, alcanza a oír lo fuerte que es y que tan bella es, sacude su cabeza nerviosa por sus palabras.
Termina sus tareas así que regresa a su casa, llega muy cansada pero los demás llegaron más tarde, se dirige a su habitación para estar sola, mientras entrena la puerta es tocada, escucha que la cena está lista, sin esperar baja, todos la esperan.
—Llegó una carta de una vieja amiga mía—Habló la abuela alma—Quisiera ir a visitarla, pero no puedo ir sola, nos invitó a todos.
—Madre, Claro que iremos contigo—Contestó Julieta, los demás los apoyaron—Le avisaré al pueblo de nuestro viaje.
—Gracias a todos—Dijo la Abuela Alma, al día siguiente, reunieron al pueblo, la gente está nerviosa tienen miedo de quedarse solo.
—¿Cuanto van a tardar?—Preguntó uno—Es que nos aterra quedarnos solos.
—No hay por qué temer, serán como unas vacaciones para nosotros, las merecemos ¿No?—Contestó bruno.
—Además es para visitar a una amiga de la abuela, les contaremos su conmovedora reunión—Dijo pepa, la gente susurro entre ellas temorosos, la familia espero una respuesta.
—Tienen razón, no podemos atarlos a nosotros, diviertanse, nosotros podemos, no somos tan tontos—Hablo una señora, los demas le dieron la razón, la familia regresó y empacaron sus cosas.
Llevan 3 carretas, en ellas ropa, comida, regalos para obsequiar a la visita, finalmente se despiden del pueblo Encanto, entre lágrimas se fueron pasan por la brecha en las montañas mientras la abuela lleva el mapa, pues ella va a dirigir la caravana.
Camilo, isabella, Mirabel, y luisa están despiertos, mientras los otros duermen profundo, se turnaran para cuidar la carrera.
—Es la primera vez que salgo de encanto—Dijo Mirabel.
—Es la primera vez para todos, pero nunca habías viajado tanto ¿Cuanto tiempo nos tomará llegar?—Contestó Camilo nervioso.
—Mientras estemos todos, no pasará nada—Hablo isabella, luisa se levantó y fue hacia la abuela.
—Bruno deja a luisa manejar, ve a descansar—Ordenó la abuela, bruno le sonrió a luisa—Sientate luisa, y ayúdame.
—Iremos tan lejos, los chicos están nerviosos—Tomo las riendas de la carreta, la abuela dijo que no hay nada que temer, la noche apareció luego de unas horas, bruno nuevamente se levanto—Iré a dormir un rato abuela.
Luisa se acomoda junto a Mirabel, quien la abrazo dormida, reprimió una risa al escuchar roncar a isabella, cerró los ojos y intentó dormir, los rayos de luz le hizo abrir los ojos.
Vio a Camilo mirar entre las cortinas aterrado, su respiración está tensa, la carreta seguía su curso, él se giro hacia ella, la llamo con la mano.
—¿Qué paso?—Camilo señaló hacia los arboles, camino hacia atrás y movio a los demás con miedo, él les hizo una señal para guardar silencio, luisa camino hacia enfrente—Abuela, Camilo vio algo entre los arboles—Le susurro, ella detuvo la caravana, los otras 2 también.
—Luisa ten cuidado—Ordenó la abuela, luisa camino hacia el lugar, una sonido de risa la hizo retroceder con miedo, corrió hacia la carrera al ver moverse algo—Vámonos, luisa sube rápido—Un sonido se volvió más fuerte, las 3 carretas con los caballos huian del lugar, a lo lejos un puente los salvara—Ahí es, más rapido.
Atravesaron el puente, por las ramas vieron un movimiento muy fuerte, los caballos siguieron corriendo hasta llegar a una enorme raiz de color blanco, la cual se levantó y dio a conocer una puerta.
—Las indicaciones dicen que es aquí atravesando esa puerta—Las carretas siguieron una carretera con piedras los recibió una puerta de acero, alrededor de ella hay muchos árboles de color blanco sin contar los peculiares frutos—Vamos bien—Una entrada hecha de piedra que decía.
" Pueblo del árbol
Viviente"El lugar tenía tantas casas, muchas de 3 pisos, la gente se acercó curiosa hacia ellos, no los dejaron seguir su curso, por los balcones mucha personas los observa susurrando entre ellos.
—Tranquilos, yo me encargo—Un señor con saco de papas se acerco—Si vienen a robar algo, les aviso que nos sabemos defender.
—No, no, no, no, nos llegó una invitación con la dirección de aquí—La abuela les entregó la carta, ellos suavisaron el rostro.
—Disculpemos, es como el dueño esta dormido, pudo dejarlos pasar sin que se diera cuenta, que bueno que son ustedes y no otros—Explicó el señor ya relajado—Amigos míos, son conocidos de la abuela—Como llegaron se fueron de lo que parece ser la plaza, la familia Madrigal quedó sola.
—¿Nadie puede entrar aqui sin permiso?—Preguntó bruno a la abuela, ella le dio la razón—¿Dónde está tu amiga madre?
—Bajemos y preguntemos por ella, de seguro saben donde ella vive—Los adultos siguieron a la abuela miéntras los jóvenes se quedaron adentro, isabella asomo la cabeza cuando alguien toco en su hombro.
—Mirabel basta, no estoy para tus juegos—Farfullo molesta, él toque seguía—Te lo advierto, no juegos conmigo—Dio un manotazo, el golpe se le regreso, giro su cabeza, para encontrar una raíz con un ojo—¡¡Ah!!¡¡Ayudenme!!
—¡¡Isabella!!—Luisa la abrazo protegiendola, la raíz la vio a ella—Si te acercas te haré polvo—El ojo se acercó más.
—¿Qué es esa cosa?—Preguntó Antonio llorando, dolores lo tenía abrazado—¡¡MAMI!!
—Hey, tranquilo—Una piedra voló y le dio—Son invitados, tonto árbol pobre de ti si les haces algo—Una señora con bastón habló, la raíz se fue llorando—¿Están bien?
—Mis nietos—La abuela escucho el grito, los padres llegaron después por el ruido.
—Pero si es mi vieja amiga, ellos son tus nietos, esa tonta raíz los asusto, si mi nieto no lo ordena, no les hará daño—Contestó la señora, la abuela alma la abrazo—Perdonenme.
—Esta bien, solo nos asustamos un poco—Dijo isabella acomodando su cabello, Antonio, dolores y Camilo están detrás de sus padres—¿Dónde esta Mirabel?
—Detrás de ti, es que me asusto tu grito—Respondió saliendo—Es un placer señora...
—Mi nombre es Isabel, un gusto a todos, y perdón otra vez—La señora sonrió feliz—Vamos a mi casa, ahí es mas tranquilo, no hay ruido.
—Lo que tu digas isa—Las señoras charlanban rumbo a la casa, los demás los siguieron.
—¿Quieres ver un truco?—La abuela tocó el suelo 5 veces, una rama las tomó—A la casa—La rama las llevó, los hijos y nietos también fueron agarrados.
La rama bajo con cuidado a cada uno, todos gritaron al estar en el suelo, las señoras rieron al ver sus caras asustadas, una casa enorme, con bordes dorados, ventanas de 2 metros de alto mientras unos niños juegan con la raiz y los adultos los observan.
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Luisa Madrigal y tu (Encanto)
Fiksi Penggemar*Luisa Madrigal no me pertenece. *El personaje es un hombre, ya les advertí. *Eviten odio a esta historia, si no es su agrado le pido se vaya. *Esta historia tendrá temas fuerte y situaciones que a algunos le molestara. * Las imágenes que veremos en...