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Violeta
Estaba en una posición difícil, pero no tengo opción. Fue lo que decidí, no puedo cambiarlo. Desde el día que firme ese contrato, renuncie a todo, incluyendo mi relación con Kook. Aunque las cosas cambiaron respecto a August, kook no está incluido en mis decisiones y mi vida. Lo solté con el dolor de mi alma, lo dejé ir, otros labraron mi destino; es lo que me toca, obligada o a voluntad. Jeon
Ho-seok los aborda: —Lo siento, chicos, recojan sus cosas, no tengo que decir nada, sus intenciones quedaron en evidencia.
Jeon enfrenta a Hoseok: —No me voy a ir sin ella.
Taehyung lo agarra—No hagas las cosas difíciles, Kook. Vamos, estás exponiéndote, también a Jimin y a mí.
—Recojan sus cosas por las buenas, no ha pasado nada, es la orden.
Jimin sube al escenario, empieza a toma sus cosas, se ve molesto: —No voy a exponerme, al parecer no le importa.
—Quiero hablar con ella.
—Deja de jugar al valiente, niño, no va a funcionar.
August llama a Ho-seok: —Dile a Jungkook que se quede, los demas pueden irse.
—¿Por qué quieres eso?
—Después te explico.
Hoseok le habla a Taehyung y Jimin—Ustedes pueden irse—Mira a Jungkook—Te quedas.
—Perdón por defraudar tu confianza, Ho-seok
—No digas nada y lárgate Eso sí, no vuelvas a poner un pie en este lugar, me engañaste.
—No pienso dejar a mi amigo.
—No hagas las cosas difíciles, fue el riesgo que tomaron al venir con su showsito inventado. No tengo idea qué es lo que quiere August.
Violeta trae puesta la chaqueta que Kook le dio. El día sé que fue.
—¿Cómo te sientes?
—Perfecta, ven conmigo.
Jeon está confundido. —¿A dónde?
—No preguntes y ven. —Le habla a Jimin y Taehyung. —Recojan sus cosas, no vuelvan más. Acompáñame Ho-seok.
Jeon
No hice preguntas, fui con ella. Caminamos por un atajo; no era el mismo que tomamos cuando llegamos.
Violeta estaba callada, no decía nada, no entendía qué estaba pasando. Llegamos a un garaje; había muchos autos de lujo en él. Violeta enciende las luces de uno de los autos; las puertas de este se abren automáticamente. —Sube.
Jeon
Ho-seok tocó un botón, se abrió una puerta; ésta daba a una autopista, nos marchamos de aquel lugar.
—¿Qué está pasando, Violeta? ¿Qué pasó contigo? ¿Por qué tienes esa actitud? ¿Qué estás haciendo? Rompe en llanto: —¿Qué paso? ¿Por qué estás en ese lugar?
—Te daré una explicación Responderé tus ¿Por qué? Aunque no a todos.
Jeon
Dos años buscando una respuesta, entre miles de sentimientos, entre estar con Yun-Geom y olvidarla, o seguir esperando. La llevaba al lado, no decía nada, no podía quitarle los ojos, se veía distinta, no tenía expresiones de ningún tipo en su rostro. Trae puesta la chaqueta; esa que le deje como recuerdo, me la devolvería cuando regresara de Canadá.
—¿Podemos ir a tu apartamento?
Lo piensa por un momento. —¿Está bien, pero no estoy solo? Han pasado cosas en mi vida; tome algunas decisiones.
—¿Cuáles?— Baja la cabeza—¿No me digas que vives con Yun-Geom?
—No, pero casi siempre está en mi apartamento.
—Si tienes una vida con ella, prácticamente viven juntos. ¿Por qué tomaste el riesgo de ir al club y exponer el pellejo?
—Porque te amo, Violeta. No me importó absolutamente nada cuando Taehyung contó lo que sabía de ti.
Ríe con ironía—¿Me amas? Mala decisión de tu parte. Pongámosle fin a esto.
Llegamos a mi apartamento; ni siquiera me importó Yun-Geom.
Violeta camina de un lado a otro, estudia el espacio. —Parece otro lugar, se nota que ella ha cambiado todo.
Jeon baja la cabeza. —También cometí errores en mi desespero, quería olvidarte, necesitaba salir del hueco en donde me dejaste.
—No estoy cuestionandote, tienes derecho de rehacer tu vida.
—Pero por ti estoy dispuesto a olvidarlo, dispuesto a comenzar de cero, dejar todo en su lugar, incluyendo a Yun-Geom. ¿Ahora dime que pasó? ¿Cómo llegaste a ese sitio? ¿Qué haces con ese hombre? ¿Quién es August Dipont?
—No puedo responder a todo; únicamente diré que estoy a voluntad; nadie me obligó; decidí darle un giro a mi vida. Elegí lo que mi padre quiso. Él me puso en ese lugar, en esa posición antes de morir. Lo que estoy viviendo, lo que está pasando, se lo debo a él, a mi padre.
—No entiendo nada, Violeta, sé más clara.
—¿Qué más clara quieres que sea? Todo lo que estoy viviendo lo decidió mi padre; no estoy obligada, ni secuestrada; si así fuese, no estuviera aquí. Es lo que quiero dejar claro.
—¿Cómo te enamoraste de ese hombre? ¿Por qué Violeta? Estábamos bien. Horas antes hablamos de nuestros planes, de nuestra boda.
Se pone de espalda, trata de contener las lágrimas. —Puse en una balanza entre decidirme por ti o por él, lo que me ofrecía cada uno Decidí quedarme con él. Es un hombre que no le da miedo amar, dice lo que siente sin rodeos; es lo que necesito en mi vida. Un hombre igual que yo, que no esconde sus sentimientos, como tú. Que no sienta vergüenza de amar, ser cursi, o ridículo.
Que tema perderme; no me tenga como una segunda opción, alguien que pone sus intereses por encima de lo que supuestamente siente por la persona que tiene al lado.
También quiero que papá este tranquilo en donde este.
—No creo nada de lo que dices.
—Es tu problema Fue mi decisión, mi vida, lo que escogí. ¿Querías una explicación? La tienes. No quiero que vuelvas a buscarme.
La tumbá en el sillón, se va sobre ella. —Dilo mirándome a los ojos, dime que no amas. —La besa, Violeta lo empuja—¿Dime que no sientes nada?
—No hagas las cosas difíciles, no vuelvas a buscarme nunca más, olvidame, no te amo, no siento nada por ti…
La calla aferrandose en sus labios; la toma por el rostro. —No te creo.
—No hagas las cosas difíciles, estoy dandote la respuesta que has buscado.
—No voy a aceptar esa explicación absurda y barata —vuelve a besarla, se deja llevar —Quédate conmigo, te necesito, amo.
Violeta
Es la decisión mas difícil. Volver a sentirlo, sentir sus besos, el olor de su aliento, de su cuerpo, hizo que olvidara todo. Empecé a dejarme llevar, mis sentimientos se dividieron. . . .
Mientras tanto, en el club
Taehyung y Jimin se marcharon.
August está plena crisis existencial; camina de un lado a otro con desespero. Mira la pantalla del celular de cada quince segundos—Llámame, llámame Violeta, hace dos horas se fue con él, debería estar de regreso.
—Si ibas a ponerte así ¿Por qué la dejaste ir?
—Necesito estar seguro de sus sentimientos.
—¿Y si no regresa? ¿Si se queda con él? ¿Vas a cumplir tu palabra? ¿No la buscarás?
—Más le vale que regrese, si no lo hace, no la buscaré, no voy a obligarla a estar conmigo. El amor no se trata de eso, he aprendido. No tiene sentido que alguien te ame a la fuerza, que se quede a tu lado porque no tiene opción.
Me sentí horrible cuando dijo que no tuvo opción. No quiero un amor obligado, si es lo que siente, que se quede con su novio.
Desde que estoy con ella he cambiado la forma de ver la vida. Amarla transformó todo en mí. He cambiado tanto que no quiero seguir en este mundo, quiero ser mejor para ella, darle lo que merece.
Por tal razón, le propuse que fuésemos a mi casa. Quiero darle una vida normal, que vivamos como cualquier pareja.
Me sentí mal cuando dijo que no tuvo opción, que se resignó. Por tal razón la dejé ir. No sé qué está pasando, me mata la idea; estoy confiando en sus sentimientos, en sus palabras.
—¿Y si no regresa? Si la convenció. ¿Si decidió quedarse, ese encuentro removió sus sentimientos, al tenerlo cerca otra vez?
—No quiero pensar en eso, solamente fue a terminar con él, es lo que voy a creer o voy a volverme loco.
—¿Mi pregunta es? ¿Si regresa seguirás ocultando la verdad? Sabes de lo que hablo. Si regresa, esta demostrando que en realidad te ama, que sus sentimientos son genuinos. ¿Es justo que le ocultes el verdadero motivo por el cual llegó a este club?
—Respecto a aquel suceso, no ha pasó nada; si regresa no se lo diré.
El teléfono de August suena; es Violeta.
Contesta con miedo; teme a la respuesta que ésta le dará.
