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Violeta
Después de aquel efusivo encuentro hablamos por mucho tiempo.
Mamá le contó muchas cosas a August respecto a sus padres; reía y lloraba a la vez. Duele, llena de impotencia, la injusticia que cometieron con él, esa manera vil y desalmada de acabar con la vida de personas buenas e inocentes. La manera en que ese viejo miserable acabó con su hermosa familia.
—Tu desaparición fue extraña, jamás se supo nada de ti, no hubo un cuerpo, ningún rastro; decían que habías quedado reducido a cenizas, el auto explotó, pero los cuerpos de tus padres quedaron intactos, ellos salieron expulsados.
Jamás sospechamos de Hyunwo; aún cuando todo lo señalaba, no lo creíamos capaz de tal atrocidad; mi esposo lo defendió a capa y espada.
Ellos tres fueron mejores amigos; Hyunwo se vio tan afectado por la muerte de tu padre. No sabes cómo me afecta saber que es un moustro, que Namjoon es cómplice de lo sucedido con Violeta; mi esposo lo adoraba, lo veía igual a un hijo; saber esto me destroza el alma, lo que le hizo Chow.
Violeta
Mamá lloró por mucho tiempo; al igual que mis hermanos, la abrazamos tratando de darle un poco de consuelo.
La verdad trás la muerte de mi padre iba a destrozarla.
Después de un tiempo logro tranquilizarme un poco.
Empezó a contar anécdotas de del padre de August. Este era un hombre bromista, con buen sentido del humor. Su madre era una mujer alegre y entusiasta; amaba ayudar a los más necesitados; fue su mejor amiga.
También estuvo presente en el nacimiento de Yoon-Gi, y su madre estuvo en el nacimiento de Sha-Yeon.
Son recuerdos que llenan el alma de emociones, combinadas entre alegría y tristeza.
Sha-Yeon ríe: —No te casaron conmigo, pero el destino te unió a mi hermana.
Ga-ul le toma la mano a Violeta y a August: —Violeta nació dos meses antes del fatídico hecho; conservo algunas fotografías tuyas y de ellos; éramos unidos. Te cuidé en muchas ocasiones.
Hay una fotografía en particular, donde están Yoon-Gi y Sha-Yeon sentados en el sofá con Violeta recién nacida en medio. Recuerdo esto en particular; aquel día Yoon-Gi no quería soltar a Violeta; estabas aferrado a ella; decías que era tuya; lloraste cuando te la quitamos. Tu madre te consolaba diciendo que pronto tendrías un hermanito a quien cuidar.
Augusto rie y llora a la vez; le toma el rostro a Violeta. — No es casualidad que el destino te haya puesto en mi camino. Te quise desde que era un niño, te conocí cuando no tenías memoria para recordarme; al tiempo perdí mis recuerdos, olvidé quién soy, de donde vengo. Escuchar esto me hace amarte más. Quizás si nada hubiese sucedido, si mis papás no hubieran muerto, nunca nos hubiesemos separado, te hubiese visto crecer, hubiese sido tu mejor amigo, tu cómplice. —La Besa —También me arrebataron momentos que pude vivir a tu lado.
—Las cosas pasan por alguna razón. Quizás hubiera pasado lo contrario. —Ríe: —Te hubieses convertido en el esposo de Sha-Yeon —todos ríen. — O quizás te hubieras ido del país, alejado de nosotros, y estarías viviendo cosas distintas en tu vida.
Ga-ul abraza a August: —La vida está encargándose de poner las cosas en su lugar. En mí tienes a tu madre; aún más que nunca eres especial; Yoon-Gi.
Violeta sacude la cabeza. —Tengo una duda y una pregunta. ¿Por qué el día del supuesto funeral no notaste que la tumba de sus papás era la misma de tus amigos?
August se encoge de hombros; siente pena. —Tengo una explicación, le pido perdón, señora. Cuando se llevaron esas exequias fueron puestas en otra tumba; la otra fue llevada a la de mis padres, con el fin de que Violeta creyera que estaba muerto… No era conveniente en ese momento que tu madre descubriera quienes eran mis padres. Al ser tu padre el mejor amigo del mío, tu mamá iba a saber quién soy, de donde provengo.
—Hace tiempo no lo hago, pero soy la única que les lleva flores todos los años, igual a tu abuelo. Desde que mi esposo murió he tratado de evitar ir al cementerio, así que pago un servicio para que lo hagan. A parte, estaba dolida por las cosas que supuestamente sucedieron. Ahora sé la verdad. —Llora — Aparte de asesinar a mi esposo, al hombre que amo, también mancharon su memoria.
August se pone de rodillas: —Le pido perdón, señora, únicamente recibí órdene. Aunque no lo crea, cuando empecé a enamorarme de Violeta, muchas veces estuve a punto de contarle la verdadera razón que la trajo a este lugar; nunca conocí a su padre; fue una mentira, un montaje para retenerla en el club. Les pido perdón por manchar el nombre y la memoria del señor Chow.
Ga-ul lo levanta—No te preocupes, hijo, no te guardamos rencor, todo lo contrario—. Lo abraza—Estoy feliz, por lo menos pudiste sobrevivir; quedo una parte de mis grandes amigos; es alentador.
Violeta
Después de un tiempo fuimos a descansar.
—Qué paradójicas son nuestras vidas.
La Besa —Fuiste mía desde pequeña, no te quería soltar, Violeta. Desde el día que llegaste a mi vida no quiero soltarte; te quiero únicamente para mí, te necesito; eres una parte de ella, de mi ser; siento que nada tiene sentido sino estás a mi lado.
No creo en el destino, ni en las casualidades, pero lo que contó tu madre hace que empiece a creer. La vida te devolvió a mí. Eres mi destino, mi casualidad. Te amo más que mi propia vida.
—También te amo. Jamás imaginé vivir esto contigo; saber que de alguna manera tus papás y tú hicieron parte de mi familia me llena de sentimientos contrarios. Duele saber que te arrebataron la felicidad, tu hogar, las cosas hermosas que había en tu vida. Duele saber que del mismo modo me quitaron a mi padre. Lee Chow era un hombre maravilloso, bueno, amoroso, nos amaba sobre todas las cosas, amaba a mamá con locura, era un hombre correcto en lo que hacía y decía.
Quiero ver a Kim Hyunwo colgado. ¡Quiero su cabeza!
—También la quiero. La justicia no sirve, pero la mano justiciera le cobrará lo que hizo. Ese miserable no se saldrá con la suya —la Besa—. Lo prometo, vamos a jugar con su destino y decisiones. ¡Vamos a hacer que él mismo se lance al vacío!
Violeta
Entre besos y caricias hicimos el amor; esta vez nos amamos lento; no hubo nada pervertido.
. . .
Despertamos tarde, casi a medio día. Los golpes de la puerta nos despertaron. Es ho-seok. — Perdón por interrumpir su sueño. Acabamos de traer tu encargo. Yoon-Gi mira a Violeta—Llegaron mis comodines.
—¿De qué se trata?
Le habla a Hoseok: —Puedes sacar a la familia de Violeta del club; llévalos de vuelta a Pekín.
—¿No es arriesgado, mi amor?
—Ni Kim Hyunwo, ni Kim Namjoon se atreverán a ponerle un dedo a tu familia. Tengo en mis manos a sus dos hijos menores; Kim Kang‐Dae y Kim Ja-Yeon.
—A pesar de todo, aprecio a Kang-Dae y Ja-Yeon. Esos niños no tienen idea de quién es su padre, e incluso, estoy segura de que Da-Mi, esposa de ese miserable, no sabe quién es su marido. — Mira a Ho-seok: —Si posiblemente eres hijo de Kim Hyunwo, esos niños son tus hermanos.
—Lo sé, no pienso hacerles daño, mucho menos voy a permitir que otro se lo haga. Es una manera de presionar a ese miserable. Ya sabe que sus hijos fueron secuestrados.
La noticia empezará a circular en los medios, si es que ya está circulando. —Prende el televisor; efectivamente, la noticia de un supuesto secuestro de los hijos menores de Kim Hyunwo empieza a rodar en todos los canales nacionales.
—Lo más seguro es que sabe que los tienes; en cualquier momento, Namjoon o ese viejo miserable te llamarán para negociar.
Violeta
Fuimos a la oficina, estábamos todos.
Un elegante y apuesto hombre se va sobre August en un efusivo abrazo. —Hasta que por fin te veo, August Dipont. Traje tus encargos, como me lo pediste.
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Kai (alias Bad Boy)
Expulsado de las policía por corrupción; Experto en manejo de todo tipo de arma y rescate de rehén Estuvo en la cárcel por estafar a mujeres solitarias y vulnerables.
August se lo presenta a Violeta —Él es Kai. Hace parte de la banda de Jackson; fue el encargado de traer a tu familia y la mente maestra tras el secuestro de los hijos de Kim Hyunwo.
Violeta le extiende la mano—¡Mucho gusto!
Kai le besa la mano, al tiempo le guiña el ojo. — El placer el mío, preciosa.
August lo empuja: —Ni se te ocurra coquetear con mi mujer.
—Me meto con cualquier cosa menos con las de August Dipont, si quiero conservar la cabeza sobre el cuello.
—Me alegra que lo tengas claro.
Jackson le habla a Violeta: —En cualquier momento harán la llamada para negociar. Estamos seguros de que será Namjoon; tienes que ser cuidadosa con lo que dices.
Bang Chan le enseña el equipo de grabación: —Vamos a grabar y monitorear las llamadas, lo más seguro es que esa gente no acuda a las autoridades para negociar, saben que tienes su información. Es aquí donde vas a manipularlos. Tiene que jugar con sus mentes y emociones.
—¿Qué tengo que decir? No quiero cometer errores. Estoy muy nerviosa.
—Si es Namjoon quien llama, tienes que negociar la cabeza de su padre a cambio de la vida de sus hermanos. Si es Kim Hyunwo quien llama para negociar, vas a jugar con sus sentimientos; le dices que le darás a sus hijos a cambio de que confieses sus crímenes. No vamos a dejarle opciones; sabemos que no lo hará, pero lo pondremos entre la espada y la pared.
La diabla llama a Violeta. —Me está llamando la diabla.
—Lo más seguro es que sabe del secuestro de Kang‐Dae. Imagino que quiere saber si tienes que ver. Contéstale y ponlo en alta voz.
—Hola
《¿Lo tiene, Chanell?》
—¿De qué hablas?
《De mi hijo, de Kang‐Dae. Está circulado en todos los medios que los dos hijos menores de Kim Hyunwo fueron secuestrados. ¿Tienes a mi hijo? ¿Tienes algo que ver en eso?》
August le asiente con la cabeza.
—Sí, tengo a tu hijo
《Llora—¿Lo tienes en el club?》
—Sí, está aqui.
《Por favor, déjame verlo, prometo que no haré una estupidez, quiero verlo de cerca.
Voy de regreso a Seúl.》
—Ahora no puedo, hablamos después —cuelga.—¿Qué vamos a hacer con ella? ¿Por qué quieres que sepa que su hijo está aquí?
—Usaremos a la Diabla para manipular los sentimientos de esa basura, aunque estoy seguro de que ese maldito miserable prefiere mil veces a sus hijos muertos que ir en contra de sus intereses.
El celular de Violeta vuelve a sonar —Cómo lo imaginamos; Es Namjoon
Ríe — Sé cuidadosa con lo que vas a decir.
Es hora de jugar con los sentimientos de ese miserable.
