Kita se recostó en su cama después de darse una ducha, miró el techo por un rato y soltó un suspiro pensando. Su mente no dejaba de dar vueltas y vueltas a lo que había dicho Suna esa tarde en el entrenamiento ¿cómo osaba decirlo delante de él sabiendo lo mucho que le molestaba? No parecía importarle si le molestaba o no, igual que cuando los habían atrapado, en ningún momento aflojó su agarre por defenderla. Kita soltó un suspiro nuevamente.
Qué pasa si realmente me gusta.
Que era una muy mala idea, eso era lo que pasaba. Había visto reiteradas veces como Suna era perseguido por chicas y como se peleaban entre ellas por él, no quería que su hermana fuera una de ellas. Miró la foto en su mesita de noche con todo el equipo reunido. Suna era un buen sujeto, pero le aterraba en cierto modo.
Si lo que quieres es cuidarla y asegurarte de que está bien y feliz, ella lo está.
Lo sabía, lo tenía más que claro, ella no le habría hecho chocolates de almendra si no estuviera realmente feliz con él. Incluso salieron juntos en San Valentín. Kita se levantó de su cama y fue a la cocina a servirse un vaso de leche, y en el sofá, asomándose del bolso de su hermana, quien estaba encerrada en su pieza, sobresalía una tira de fotografías. Él se acercó y la tomó en sus manos.
Eso no podía ser solo una actuación.
Kita tomó la fotografía y se aproximó a la puerta de su hermana, y escuchó desde afuera a la chica tararear una canción, estaba contenta. Kita miró la cinta de fotos nuevamente y soltó un suspiro devolviendo la cita a donde estaba y la quedó mirando un par de segundos más. Fue demasiado, solo estaba alejándola cada vez más. El chico volvió a caminar hacia la habitación de su hermana y tocó la puerta un par de veces. Mayu se sentó en la cama sorprendida.
-Mafuyu ¿podemos hablar? – dijo el chico desde afuera y ella solo se quedó mirando la puerta un par de segundos, se levantó abrió la puerta lentamente, confundida. Kita pasó una mano por su cuello y soltó un suspiro frustrado. – Bueno ¿puedo pasar?
-Ah, si. – dijo ella abriendo la puerta y sentándose en su cama, Kita se sentó en la silla del escritorio de la chica y ella lo miró fijamente. El chico entonces volvió a suspirar.
-Bueno, creo que ya hemos estado distanciados un tiempo... - dijo él y ella asintió con la cabeza en silencio. Kita miró nuevamente a su hermana y ella estaba mirando sus rodillas, sin saber qué hacer. – Vengo a disculparme.
-¿A disculparte?
-Si, es que... bueno, supongo que he sido un poco... sobreprotector. – dijo él y ella solo lo miró sorprendida, no se esperaba una disculpa de su parte. Él miró sus rodillas también. – Y bueno... yo sé que el tema de Suna fue un escándalo, lamento eso también, estaba molesto. Y bueno... en realidad sigue sin gustarme la idea, pero supongo que no... tengo que meter la nariz en donde no me corresponde y si tu... si tú estás bien con eso, supongo que está bien.
-¿Hablas enserio? – dijo ella y Kita asintió con la cabeza, ella soltó entonces una sonrisa, haciendo a su hermano también soltar una sonrisa tímida. – Gracias.
-Ah, por cierto. – dijo el chico y ella solo continuó mirándola. – Um... me siento mal preguntándote esto justo ahora que dejamos de estar enojados, pero te pido que, por favor me digas la verdad... Mafuyu a ti... ¿te gusta Suna?
-Ah... bueno... - dijo ella haciendo al chico suspirar, ella miró culpable a su hermano. – Pero no es lo que crees, realmente nuestra relación de novios es una actuación, no es real. Dijimos la verdad, te lo prometo.
-Si lo sé, es solo que... - dijo el chico poniendo las manos sobre su cara, frustrado, ella miró a su hermano confundida. – Es que... Suna es... es que no me da suficiente confianza.
-¿No?
-No es que no me de confianza... - dijo el chico intentando explicarse y ella lo miró confundida un par de segundos. – Es que él es... popular ¿sabes? Veo chicas pelearse por él cuando él ni siquiera las mira y hay muchas chicas buscándolo, me da miedo que eso te haga... no lo sé, que algo por el estilo pueda lastimarte. A demás Suna es... se rinde muy fácilmente o se confía demasiado y no lo sé... siento que no sería el mejor novio.
-Pero él es muy lindo conmigo. – dijo ella y Kita miró a su hermana esperando que siguiera hablando, ella sonrió con el rostro un poco sonrojada. – Suna siempre está cuidándome de tipos molestos y me lleva a todos los lugares a los que quiero ir. Me cumple todos mis caprichos todo el tiempo y él... bueno, él me trata muy bien, no creo que sea un mal novio. Es decir, desde mi experiencia como novia actuada, él me trata muy bien y bueno... me hace sentirme feliz.
-Lo sé.
-¿Lo sabes?
-Suna me dijo, ese día que los atrapé que no me preocupara, porque tu estabas feliz y bien protegida. Así que no debería meterme. – dijo Kita soltando un suspiro y ella no pudo evitar soltar una media sonrisa. – Y yo sé que es verdad, Suna no es un mal tipo, pero ese es el gran miedo que tengo. Y bueno... supongo que, si realmente te gusta y bueno, te hace feliz estar a su lado, no debería meterme en medio y alejarte más.
-Gracias. – dijo ella levantándose y dándole un abrazo a su hermano con una sonrisa. El la recibió con una sonrisa casi forzada, aún no podía aceptarlo del todo, pero ¿qué más podría hacer al respecto? – Te prometo que, si algún día me siento mal, serás el primero en saber.
-Gracias, me quedo tranquilo con eso. – dijo el chico y ella lo miró con una sonrisa. Al día siguiente ambos se fueron juntos a la escuela, como nunca, llegando con una gran sonrisa. Suna los vio llegar desde el jardín y los miró confundido. Kita se acercó a él dejando a Mafuyu allí y el capitán pasó junto al castaño, hablando así cerca de su oído. – Lastímale y te juro que no vuelves a ser titular.
-No lo haré. – dijo Suna empujándolo un poco mientras sonreía de lado y se dirigía a la chica, revolviendo su cabello y dedicándole una sonrisa. Kita los miró sonriendo un par de segundos antes de irse caminando hasta donde estaba Aran mirándolo con una sonrisa. – Qué paso ¿por qué tu hermano está de buen humor?
-Anoche hablamos y arreglamos las cosas. – dijo ella sonriendo y Suna acarició un segundo su cabello, ella no dejaba de sonreír, él puso su mano en la espalda de la chica y comenzó a guiarla hacia el edificio. – ¿Vas a ir a dejarme a mi aula?
-Si, así que camina antes de que me arrepienta.
-Qué pasó. – dijo Aran mirando como ambos se iban caminando juntos y a Kita no le molestaba en absoluto, el chico solo soltó un suspiro mientras el moreno lo miraba. – Qué es este cambio drástico de actitud.
-Se gustan ¿qué más puedo hacer metiéndome en el medio? – dijo el chico soltando un suspiro agotado y el más alto le sonrió alzando las cejas. – Él me dio a entender ayer que le gustaba Mafuyu y ella anoche me dijo que le gustaba Suna también, supongo que solo es cosa de tiempo para que terminen juntos, ahora es como... obvio.
-Siempre fue obvio. – dijo el moreno mirando a su amigo mientras caminaban. – Siempre se miraron diferente.
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Overprotected Player Girl {Suna Rintarou}
FanfictionKita _______, la hermana pequeña del capitan, protegida por básicamente todo el club de Voleibol, a excepción de cierto sujeto que quiere cuidarla a su propia manera y traspasar los límites que su protector hermano ha puesto sobre ellos. 🪄Suna, el...