Capítulo 18

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-Oi, oi, a donde vas tan serio. – dijo Atsumu saltando básicamente sobre Suna y atrapando el cuello del chico entre su brazo, Suna lo miró confundido y este le dedicó una amplia sonrisa. – Tengo unas preguntas que hacerte.

-No, ya basta de preguntas. – dijo Suna agotado y aún molesto por el suceso de ayer. Atsumu no lo escuchó y lo llevó con él hasta donde estaba su hermano, quién, al verlo llegar junto a Suna lo miró confundido y dejó de comer lo que estaba comiendo. – No puede ser... déjame ir.

-Traje a Suna para hacerle preguntas. – dijo el rubio ante la mirada de su hermano y Suna miró perezosamente a Osamu. – No creo que se quede mucho tiempo, así que preguntémosle de inmediato.

-Cuáles son tus intenciones. – dijo Osamu inmediatamente y Suna alzó una ceja, confundido. – Supongo que tienes más que claro que no puedes hacerla sufrir ni nada por el estilo ¿verdad?

-No tengo planeado hacerla sufrir o llorar. – dijo Suna soltando un suspiro y pasando una mano por su cuello, él buscó a Mayu a su alrededor para ser salvado, pero ella no estaba por allí. – Por qué todo el mundo piensa eso... ¿tan malo me veo?

-Eres popular, no es extraño pensarlo. – dijo Atsumu y Suna solo se mantuvo en silencio. Finalmente, Atsumu volvió a formar una sonrisa en su rostro al mirarlo. – Y qué ¿te gusta?

-De qué hablas.

-Sabemos que no fue parte de una actuación lo del casi beso, era obvio. – dijo el chico rubio y Suna se sorprendió al escucharlo, recordando en qué momento los habían atrapado. Si no los hubieran interrumpido... el chico se sonrojó por completo sorprendiendo a los dos chicos presentes. – Oi, qué es esto ¡Entonces si...!

-Yo no dije que si. – dijo el chico levantándose de donde estaba y Atsumu intentó atraparlo, pero él solo lo esquivó. – Adiós.

-Tampoco dijiste que no. – dijo Osamu y Suna solo lo miró de reojo antes de irse caminando por el pasillo, Atsumu miró a su hermano con una gran sonrisa en el rostro y moviendo sus piernas, impaciente por decírselo a Mayu. – No se lo vamos a decir.

-¿Qué? Por qué no. – dijo Atsumu y Osamu señaló a Kita mirando mal a Suna, asesinamente mientras se lo topaba por el pasillo, Suna ni siquiera le prestó atención y solo siguió caminando. – Ah, es verdad, lo detesta.

Suna siguió caminando por los pasillos en busca de Mafuyu, hasta que, finalmente la encontró en la sala de música tocando el piano y practicando para su siguiente exhibición. Él se paró en el umbral de la puerta para verla silenciosamente y luego cerró la puerta a sus espaldas, ella no lo escuchó con lo fuerte que sonaba el instrumento, estaba de espaldas a él.

-Bravo. – dijo el chico cuando ella finalmente terminó de tocar el piano, sorprendiéndola, pero en cuanto ella vio que era Suna, se relajó y lo miró con una sonrisa en el rostro. El chico se acercó al largo taburete en el que ella estaba sentada y la miró un par de segundos, ella lo miró también. - Me dijiste que pronto debes ir a tocar en una exhibición ¿estás practicando?

-Un poco, no he tocado mucho últimamente. - dijo ella con una sonrisa mirando el piano y soltando un suspiro. - Con el club de tenis no me queda tiempo para muchas cosas, y ahora viene temporada de exámenes, estoy saturada.

-Enséñame. - dijo el chico y ella lo miró con una ceja alzada, el chico levantó sus mangas para mejorar la movilidad de sus manos. Ella comenzó a explicarle algunas cosas básicas para que tocaran juntos una canción sencilla, el chico cuando entendió y practicó un poco, puso su celular a grabar cómo tocaban. - Vale, entonces a la cuenta de tres.

-Tres, dos, uno, ya. - dijo ella entonces y ambos comenzaron a tocar, cada uno por su parte del piano, él estaba increíblemente concentrado y ella estaba tranquila, porque era una canción realmente básica. Mayu lo miraba con una sonrisa, si ya era lindo por naturaleza, tocando el piano era impresionantemente apuesto. La canción terminó y él la miró, orgulloso de si mismo por haber aprendido un poco. - Nada mal para un principiante.

Overprotected Player Girl {Suna Rintarou}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora