CAPÍTULO 19

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A lejos escuchaba sonidos, pequeños pitidos algo molestos y otros sonidos relajantes que lo trajeron devuelta. 

Era un jodido hospital, estaba en un hospital. 

Harry cerró los ojos de nuevo cuando la luz de la habitación le incomodó. Intentó incorporarse, pero eso solo hizo que ciertas partes de su cuerpo ardieran. 

—Mierda, eso dolió. —siseó quejumbroso. 

—Señor Styles, intente no moverse o se podrá lastimar, no hace mucho salió de una operación. —Le ordenó una de las enfermeras que estaba a cargo de verificar los avances en ellos. 

—Necesito hacer una llamada y si no es tanta molestia quisiera saber cómo se encuentran mis compañeros, mi hermana y los omegas. —habló aún con los ojos cerrados. 

—Todo está bien, no se preocupe, llamaré a su hermana para que venga. 

—Muchas gracias, ¿podría bajar la intensidad de las luces? En realidad me molestan. 

La enfermera se dirigió a los apagadores para hacer una luz tenue y que no le irritara al alfa. 

Harry deseó arrancarse las intravenosas cuando notó la camilla junto a él con una figura que reconocería donde fuera. 

—¿Louis? ¿Qué le sucedió? ¿Por qué se encuentra aquí? ¿Él está bien? 

—Señor, necesito que guarde la calma, ahora mismo iré en búsqueda de alguien para que responda todas sus preguntas. 

Al salir la enfermera, Harry quitó de su nariz el oxígeno que le estaban administrando. 

Su lobo alzó la nariz al percibir algo nuevo en el ambiente, el alfa ronroneó y se acurrucó en su pecho por el olor en la habitación. Harry estaba sorprendido. ¿Será posible o es solo su imaginación?

Se levantó para ir hacia donde se encontraba Louis, realmente parecía un ángel durmiendo, estar cerca de él parecía un buen analgésico para sus males, pareciera que todo se mejoraba al estar cerca de su omega. 

—Lo lograste cariño, sabía que lo harías porque eres la persona más fuerte que he conocido en la vida. —Harry susurra emocional besando su frente, delineando su delicado perfil con la mirada, empapándose de aquello que sería su marca personal de medicina. 

La puerta fue abierta y Niall entró corriendo con Gemma tras él, ambos venían llorando, pero se detuvieron al instante. 

—No es posible, no es posible, no es posible, son unos malditos suertudos. ¿Cómo es que esto sucedió? —lloró el omega acercándose al alfa. 

—Hermanito, no sabes lo preocupada que estaba… —La alfa se detuvo de pronto, desconcertada se acercó curiosa—. ¡Harry por la luna! ¿Fue posible? —Gemma habló mirando a Louis que dormía plácidamente. 

Niall sorbía su nariz llorando. —Regresó Harry, él ha regresado. 

—Lo sé chicos, ¿perciben su olor, lo sienten? 

—Fue lo primero que notamos cuando entramos idiota, se complementan tan bien, nosotros lo sabíamos, Louis lo lograría. —Niall era muy sentimental.

—Sus aromas son especiales, es como una mañana lluviosa mientras lees un libro. —habla Gemma—. No puedo creerlo.

—Louis es excepcional, su olor es de cómo estar en una biblioteca, huele a libros y también a caramelo, me encanta su olor, nunca imaginé que tendría ese aroma. —Niall habló emocional.

—Amor a primera vista Niall desde que lo vi supe que seriamos uno solo. —Harry sonríe.

—¿Crees que tarde en despertar? Magy dijo que esas caídas son muy peligrosas, pero ahora pensándolo bien, todo esto fue porque tú estabas mal, Lou lo sintió y por eso cayó en el profundo sueño. 

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