Our little trip.

21. Solo si quieres.

-Has apretado mucho el vaso, deja que vaya a por zapatillas para tus pies y te llevo a urgencias.

En todo el camino en coche de Dai, no puedo dejar de pensar en que me molesta imaginarme a Clay tratando bien a otra persona, y solo en ese momento me doy cuenta de la actitud tan mala que tenia él con Daisuke.

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Miro la pantalla de mi teléfono, es un mensaje de Clay.

Me levanto, son las once de la mañana, apenas hace una hora que me desperté, pero no tenia ganas de levantarme de la cama, así que no lo hice. Daisuke se ilusiona cuando me ve caminar por el pasillo.

-Buenos días, bichito- dice con su sonrisa más bonita.

-Hola- me acerco a él y le dejo un beso corto en los labios.

-Iba ha hacerme algo de desayuno, ¿quieres algo?- pregunta mientras me alejo hacia el sofá.

-No, no tengo mucha hambre- me siento-. He hablado con Clay, dice que puedo ir a por mi libro hoy mismo.

-¿Quieres que te acompañe?

-No hace falta, solo quería que lo supieses.  

Después del desayuno, Daisuke se va a su paseo mañanero. Vuelvo al cuarto y comienzo a prepararme, aprovecho para hacer la cama y ventilar el cuarto. Decido no ponerme nada muy complicado e intento no pensar mucho, pero acabo cambiándome de ropa unas veinte veces antes de salir de casa hacia la de Clay, pero acabo con una camiseta que tiene un dibujo de unas setas muy bonitas en color crema y unos pantalones vaqueros.

Agarro las llaves y mi cartera, aspiro fuerte antes de salir de casa, preparándome mentalmente para todo lo que podría pasar.

Durante todo el camino voy pensando en que podría pasar y en si debería preguntarle sobre su "novio", decido dejar de pensarlo y dejar que las cosas fluyan. Ya en la puerta de su edificio, me arrepiento de haber venido, ni siquiera me atrevo a tocar el timbre. Las ultimas veces que le vi fueron de sorpresa así que no me dio tiempo a pensar en nada realmente, pero ahora es muy distinto, ahora la decisión de si entro o no es mía y no sé que hacer. 

-Perdona,- dice alguien detrás de mi, me giro y le reconozco al segundo- eres George, ¿no? 

-Sí- sé de sobra que es Alan.

-¿Tu también has venido a ver a Clay? - me aparto un poco, él saca una llaves de su riñonera y abre la puerta del edificio.

-Bueno, sí, venia a por un libro que dejé- le sigo por el pasillo, hasta el ascensor, el cual me hace recordar en día que me fui de aquí, se me encoje el corazón de solo pensarlo. 

Charlamos mientras el ascensor sube, él llama a la puerta sin miedo. Clay abre, Alan entra sin siquiera esperar a que su amigo se aparte por completo, entro y voy directo al que era mi cuarto, les escucho hablar en el salón, pero no me centro en lo que dicen.

Observo mi cuarto, esta tal cual lo deje, excepto por la cama que esta ligueramente deshecha, me acerco a la mesilla de noche de la izquierda, abro el pequeño cajón de esta y saco el libro, el cual realmente no me interesa porque es un libro que pensaba tirar, pero quería la excusa de ver a Clay y asegurarme de que esta bien. Observo a mi alrededor con cuidado hasta que algo me distrae, veo una cola llena de pelo grisáceo asomándose desde debajo de la cama, decido no molestar más lo que sea que hay debajo de mi antigua cama y salir del cuarto. 

Al salir casi me choco con Clay justo en la puerta.

-Venia a ver si lo encontrabas- informa.

-Ah, sí lo encontré, es que me distraje con... - de repente se oye un maullido, me giro ligueramente y puedo ver un gato gris sobre la cama.

-Así que ahí estabas- se ríe él. 

-¿Desde cuando tienes ese gato?- pregunto curioso, él se rasca la nuca.

-Desde hace un buen tiempo, - camina hasta el gato y lo levanta con su mano en el vientre del felino- normalmente no dejo que entre aquí, porque si no lo llena de pelos y luego tengo que limpiar, pero debe de haberse colado. 

Mi corazón se acelera al ver a Clay sujetando esa bolita de pelo que solo maúlla y ronronea entre sus brazos, por unos segundos quiero ser yo el que esta entre ellos. Intento calmarlo. Al momento me doy cuenta de que ese gato es el mismo que el de la veterinaria de Daisuke, pero no digo nada. 

-Bueno, gracias por dejarme recuperar mi libro- él se pone serio al segundo, mientras yo salgo al pasillo, para volver a casa.

-De nada, supongo- dice, me sigue hasta la puerta dejando al gato en el sofá de camino.

-Adiós- Clay cierra la puerta sin responderme y por unos segundos me quedo quieto mirando el manilla de esta, trago saliva, me doy la vuelta y comienzo mi camino hasta la casa de Daisuke.

Minutos después me llega un mensaje de Clay, "Otro día podríamos vernos en algún bar o algo", seguido de otro, "Solo si quieres". Paro en seco en mitad de la acera, pienso por segundos y acabo respondiendo, "Claro, ¿tienes libre mañana?".

Seguimos hablando por un rato para concretar el sitio y la hora, al final quedamos en mañana a las diez de la noche en un bar de copas que él conoce y Alan acaba apuntándose al plan, así que no va a ser tan incómodo. 

Al llegar a casa paso el resto del día volviéndome a ver "Lo que paso en realidad" solo para morirme de vergüenza cada vez que aparece Clay en la pantalla, pero sin que Daisuke, quien me abraza todo el rato, lo note. 

No estoy segura de si añadir contenido +18 o no, ¿vosotros que pensáis? Os leo :D