Cap. 45 Aferrados a la vida

755 84 10
                                    

3 semanas después

Macarena

- Amor porque te fuiste, no sabes el vacío que dejaste en mí, porque me haces venir a este lugar tan desolado, tan triste, no puedo dejar de amarte, nunca me superaré de este dolor, mi pequeña Elizabeth.

Bárbara: Hey amor despierta, amor, tienes una pesadilla.

Barbie me da besos y me despierta, porque todos estos días sucede lo mismo. El mismo sueño.

Gracias a Barbie Desperté de mi horrible sueño, aún el recuerdo de mi pequeña me aflige, y todo lo que hemos estado viviendo, la casi desesperación que viví hace tres semanas no me deja tener paz, gracias a Dios mi esposa está conmigo. Recuerdo como si fuera ayer lo que vivimos ese día.

FLASHBACK

No puede ser tener que volver a vivir la misma escena de hace un año cuando mi suegro casi pierde la vida, escuchar impactos de balas por todo el lugar y escuchar los gritos de mi esposa, observo hacia atrás y mi esposa cae tendida en el suelo, en un charco de sangre alrededor de su cabeza, NOooooooooooooooooooooooo, mi esposa, BARBIEeeee, no podía correr porque los policías me tenían sujeta, Roberto venía, Pero Barbie sigue tendida en el suelo, los minutos parecieron horas, los policías no podían conmigo, necesitaba volver con Barbie, Amorrrr despierta, ya no tenía voz de tanto gritar, no, no puede ser. Amor. Mi amor, no me dejes tú también. Vi que un policía corrió donde ella estaba y la cargo, ya no se escuchaban detonaciones, el policía que estaba colocando sus manos en el cuello de mi Barbie, y su cabeza en su pecho grito; "paramédicos, está viva, está viva" un gran aliento entro de nuevo en mí, el otro policía quien sus manos me tenían sujeta, me soltó y corrí donde mi esposa. Ella un no reaccionaba, mientras los paramédicos gritaban, "oxigeno, oxigeno", y yo le grite; "Barbie amor despierta, amor despierta". Ella reacciono en ese momento y abrió sus ojos, sentí que el alma había regresado a mi cuerpo. Mi esposa respiro, abrió sus ojos, sus ojos color café, la colocaron en la camilla y me dijeron que podía ir con la policía hasta el hospital.

Me llevaron al hospital, tenía mucho miedo que cuando llegara me dieran malas noticias, pero mi esposa estaba fuera de peligro, cuando llegue me indicaron donde estaba mi esposa, estaba despierta solo tenía unas vendas en su cabeza y en su hombro, dos balas una rozo su cabeza y una le dio en el hombro pero está fuera de peligro, no sé nada más de lo sucedido con Gonzalo, necesito ver a mi Barbie, la necesito en mi vida. Me hicieron pasar por unas habitaciones por mi seguridad y llegamos a dónde ella se encontraba estaba sentada en una camilla, discutiendo con las enfermeras.

Bárbara: yo no quiero que me vuelvan a inyectar más primero esperen a que mi esposa llegué, la necesito ver.

Entre a la habitación y lo único que pude decir fue gracias Dios, universo, por dejarme a mi esposa viva, corrí y sin poder decir una palabra abrace a mi esposa la cual se quejó del dolor

Macarena: perdón amor, perdón

Bárbara: hey aquí estoy no me fui, no llores mi Maquita

Macarena: me moría si lo hacías

Le di un beso en sus labios, la acaricie con mis manos su rostro, verla toda vendada, me la quería llevar a casa, no la quería dejar allí, entro el doctor

Doctor: Bárbara déjame decirte que estás muy bien, pero debes tener absoluto reposo por dos meses más o menos, cualquier dolor de cabeza fuerte debes llamarme, agradecería a tu esposa que tenga el mayor cuidado contigo, debes tomar el tratamiento que te recete y cuidarte de cualquier peso. Tienes un brazo que cuidar.

No puedo estar sin ti! 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora