🐈04🐈

802 110 60
                                    

Ambos chicos terminaron de desayunar rápidamente, Raptor preparó licuados de fresa para ambos.

-¿Quieres que te acompañe a la veterinaria por Doos?-Preguntó Sparta.

-Sí, por favor, Sparta.-Le sonrió, el menor le devolvió la sonrisa, lo que causó un pequeño sonrojo al mayor.-Vamos... Entonces.

Después de arreglarse un poco salieron del departamento del heterocromático, con la canasta de picnics en mano, y se subieron al auto del mayor para poder ir a la veterinaria.

🐈💜...💜🐈

-Doos tiene una pata lastimada, a descansado pero necesita más reposo.-Habló la mujer amable.

-Gracias doctora. Nos retiramos.

La veterinaria sonrió y asintió con su cabeza. Después de salir del veterinario ambos chicos emprendieron camino hacia su edificio.

Cuando llegaron al edificio y entraron el recepcionista los miró extrañado.-Chicos, chicos. Llevan saliendo mucho tiempo, no me quisiera entrometer y no es por faltarles el respeto, pero, ¿ustedes son pareja?

-... No lo somos, Sam... Salimos como amigos, nos estamos conociendo.-Dijo Raptor.

-Vale, vale, gracias por aclarar la duda.

Seguido de la aclaración, ambos protagonistas subieron las escaleras hasta llegar al departamento del mayor, ambos entraron y Sparta cerró la puerta para poder sacar a Doos de aquella canasta de picnics.

-¡Bienvenida de nuevo, Doos!-Dijo el dueño de la gata.

Sparta rió un poco por el infantilismo del mayor. La gata ronroneaba y se restregaba en las piernas de su dueño, una escena bastante adorable para ambos chicos. El mayor de ambos revisó la hora en su celular.

-Oh, Sparta, tengo que ir a trabajar.-Dijo dirigiéndose a su habitación.

-Vale, puedo cuidar a Doos si gustas, no tengo nada que hacer.-Sonrió. Raptor regresó de su habitación con una ropa diferente y más presentable, Sparta notó este cambió de vestimenta y cómo de bien le quedaba a su amigo, cosa que no había considerado cuando lo conoció.

-Si tú quieres, la puedes cuidar, regresaré a las cuatro de la tarde, puedes comer aquí, ¿quieres que te compre algo?

-¿Podrías comprar una bebida de chocolate?

-Claro.-Tomó sus llaves.-Oh, bueno, te las dejo por si necesitas salir, tocaré la puerta.-Lanzó las llaves al menor.-¡Hasta luego, Spartita!-Salió de su departamento y cerró la puerta.

-Adiós... ¿Dijo mi nombre en diminutivo?

🐈💜...💜🐈

-¡Raptor!-Llamó una compañera de trabajo de Raptor.

-Dime, Lya.

-Quería preguntarte algo...-La chica jugaba discretamente con sus dedos.

-Puedes hacerlo.-Puso atención.

-Tú... ¿Quisieras ir conmigo a una cita mañana?-La chica estaba nerviosa, sus mejillas estaban levemente rojas y sus ojos lagrimeaban un poco, estaba esperanzada.

-¿Eso sería  una cita de amigos?-Preguntó Raptor, nunca le a gustado la idea de rechazar chicas que sólo buscan el amor, siempre se aleja de ellas antes de que haya cierta atracción por parte de las señoritas.

-Amm... No, Raptor. Me gustas... Quiero que seas mi pareja.-Los labios de la chica se apretaron un poco, tenía pena pero se sentía bien no ocultar sus sentimientos.

-... Lo lamento, Lya, no puedo corresponder tus sentimientos. Ahora estoy confundido, hay una persona que me atrae, pero no estoy seguro.-Dijo Raptor. La chica se decepcionó, se notaba cierta tristeza en sus ojos, temblaba un poco, pero era fuerte. 

-Está bien, no te preocupes, Raptor... Pero... ¿Podría saber el nombre de esa chica?

La mejillas de Raptor se ruborizaron, pensó en Sparta y luego imaginó como éste le sonreía.

-Su nombre es Sparta~-Suspiró.-Me tengo que ir, Lya, él me espera.-Estaba por irse, pero se detuvo un segundo.-Espero que te atraiga otra persona, y que te corresponda.-Se fue de ahí con una sonrisa en sus labios.

"¿Él, Sparta? ¿Es un chico?" Pensó Lya sorprendida. Raptor se veía feliz, aunque no fuera por ella, eso le alegraba y ponía feliz. "Está bien." Pensó finalmente, y sonrió.

🐈💜...💜🐈

-¡Sparta!-Gritó Raptor mientras golpeaba la puerta.

Se escucharon pasos al otro lado de la puerta, la puerta se abrió dejando ver a Sparta parado al otro lado. Raptor entró a su departamento y Sparta cerró la puerta.

-Hola.-Dijo el menor.

-Hola, toma, traje tu bebida de chocolate.-Extendió dicha bebida hacia su amigo.

-Gracias, Raptor.-Agradeció.

-No hay de qué, emm... ¿Ya comiste?-Preguntó Raptor.

-Sí, preparé rollos primavera, ¿quieres comer?

-Sí, está bien.

Ambos chicos se dirigieron a la cocina, Raptor sacó su plato y Sparta los rollos primavera.

Poco después el mayor de ambos empezó a comer lo que el menor había preparado.

-Están deliciosos.-Dijo raptor, en verdad lo estaban, no eran demasiado dulces ni demasiado salados, era un punto entre ambos, un punto perfecto.

-Gracias.-Sonrió con ternura.-Tengo que volver a mi departamento, Raptor.

-Está bien, no hay problema.-Respondió mientras seguía comiendo. Seguía encantado con la deliciosa comida del menor.

-Mañana temprano te llamaré, como siempre.-Rió un poco.-Chau.-Se despidió.

-Adiós.-Devolvió Raptor.

Sparta salió del departamento de su amigo cerrando la puerta detrás de él.

Raptor siguió comiendo, terminó cinco rollos primavera y guardó el resto para después. Se puso a jugar con su mascota hasta la hora de la cena. Durante ese lapso, en el cual también había comido de los rollos primavera que Sparta preparó, se puso a pensar en lo que en verdad pensaba de Sparta. A él le parecía muy lindo, muy atractivo. Le parecían tiernas sus expresiones y sin duda era muy amigable con él, a pesar del poco tiempo que se conocían, parecía que se conociera desde hace años, había un muy fuerte grado de confianza, misma que creció cuando ambos durmieron juntos sin la intención. 

Raptor sabía lo que estaba pasando y no lo podía detener ni aunque se alejara de Sparta, se estaba enamorando. Antes le había pasado y sabía muy bien los síntomas de esta enfermedad incurable llamada "amor".

🐈❤💙Continuará💙❤🐈

🐈Doos🐈[Spartor]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora