11. Frío destino

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El sigma besó suavemente los labios del delta, pero fue tanta la pasión, que incluso le mordió el labio inferior sonriente. Derick solo podía quedarse quieto y desesperarse por la lujuria que le despertó.

—-Tienes un poco de fiebre, no sé si sea una buena idea que te sobre esfuerces tanto—- Le habló Enok travieso.

—-Vamos...—- Le agarró las caderas suplicante.

-—Está bien, una ronda, pero te quedas quieto.-— Lo destapó y el sigma se encargó de hacer todo el trabajo.

Montó a Derick con gran habilidad. En realidad Enok solía hacerlo mucho así con él en los viejos tiempos. —-Ahh~ Se siente bien—- Sonrió el sigma al delta.

-—Ahg... Mierda, En...—- Apretó los dientes, resultaba que Enok se movía tan bien que quería gemir también. Jadeaba observando al grandioso vaquero.

-—¿Te gusta, Derick?-— Sus caderas reducieron el ritmo. -—Te siento justo aquí-— Indicó bajo su vientre. -—Si te vienes, quizás quede embarazado-—

-—Ah... ¿Puedo?—- Le preguntó el delta.

-—¿El qué?-—

-—Venirme dentro, quiero... Joder, en serio quiero embarazarte—- Tomó las nalgas del sigma de manera suplicante.

-—Mhm... ¿Debería tener a tus hijos?-—

-—Enok, por favor... Sé que no soy digno, pero yo en serio te amo—- Habló afligido. -—Déjame venirme dentro... Por favor-— Le agarró la mano. -—Se la madre de mis hijos—- Enok le miró curioso.

-—Bien, entonces vente mucho—- Sonrió sosteniéndose de los hombros del delta y así ejercer la suficiente fuerza para provocar una estocada profunda. -—¡AH~!—- Gritó repitiendo la acción. —-¡Sí, ahm! ¡Ahhh! Está tan profundo-— Le sonrió a Derick de cerca y este lo agarró para besarlo y abrazarlo incrementando las embestidas. —-Mhm... ¡Mhmp!-— Sintió que se venía pronto.

Disfrutaban un beso profundo con sus lenguas. —-¡Ahg! ¡Ah! Se siente rico... Derick, penetrame más-— Se movió con rapidez. —-¡AHH! ¡AHH!—- Gimió en cuanto sintió como se metía más adentro el miembro de Derick, ya que él lo agarró por la cintura, podía entrar más fácilmente.

Cuando Derick eyaculó, Enok sonrió con perversión y se separó de él. —-Ahm... Tu leche se está esparciendo dentro y fuera de mí—- Vió como el semen de su amado se derramaba.

—-Y voy a hacer que se introduzca bien adentro de tí en un futuro-— Contestó de forma lasciva.

-—¡Derick!-— Le saltó encima y lo abrazó frotándose a un lado de él. -—¡Te amo!-—

-—Tú solo amas el sexo...-— Mencionó al ver como olvidó rápidamente su pelea. Realmente los sigmas aman el sexo.

-—Es porque tú me haces el amor, Derick-— Le sonrió sonrojando al nombrado.

-—No tienes vergüenza...-— Se rió del comportamiento de Enok.

-—Admito que no-— Cubrió a ambos con las mantas. -—Bien, debes descansar, buenas noches—- Derick no podía creer que Enok se fuera a dormir inocentemente luego de cometer tal acto.

-—Tú no tienes remedio-—.

Al día siguiente, Zack volvió a despertar en la cama de su jefe. Miró al guapo moreno por unos segundos.

—-Kody-— Lo movió, pero solo recibió un gruñido. -—Ya sonó la alarma...-—

—-¿Qué alarma...?-—

-—El despertador—- Kody volvió a cubrirse con las sábanas. —-¡Capitán!-— Tiró de él, pero solo consiguió que el Enigma lo abrazara.

-—Solo un poco más...-—

Perfumes Extintos [Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora