Perfumes Extintos [Omegaverse]

5. Nieve Roja

A la mañana siguiente el escuadrón estaba en sus posiciones. Listos para lo que viniera.

—Ya estoy aquí, detendré al objetivo— Kody estaba en la dirección que le dieron a Noah.

—Tenga mucho cuidado, capitán—

—Preocúpate por tí y salva a ese gamma, Zack—
La nariz de Kody captó el olor de los arándanos podridos. En el segundo que se dió la vuelta se encontró a Noah, a punto de apuñalarlo.

El moreno alcanzó a esquivarlo, acción que hizo enfurecer a Noah. Ahora que podía observarle, no entendía cómo Zack no sintió miedo al tratar con aquél tipo. Era un monstruo, o eso percibía Kody. Unos ojos tan agudos como los de un tigre, una estructura corporal tan grande como la de él y unas feromonas densas.

—No trates de pelear— Habló con voz fría el rubio. —Puedes correr, pero nunca esconderte de la muerte una vez te atrape—

El ruido de unas sirenas los alertó a los dos. El delta salió corriendo y Kody tuvo que seguirlo. —¡Alisa!— Contactó por el micrófono. —¿Puedes detener a la policía?—

—Cerraré las calles de los laterales y los detendré en la principal, no puedo hacer nada con el callejón— Justamente Noah prefirió huir por ahí.

Kody se escondió en una esquina a esperar que el delta se devuelva, porque lo tratarían de detener en el callejón. Tal cual intuyó pasó. El capitán colocó su pie para botarlo.

Noah iba a caer en la nieve, pero dió una voltereta que lo ayudaría a seguir corriendo. Kody tuvo que ir tras él.

—¡Alto!— Le gritó. —¡Noah, la policía tiene el área rodeada!— El nombrado se detuvo.

—¿¡Eres policía!?— En seguida fue contra Kody, pero con su gran fuerza como Enigma logró desviar el brazo del agresor y dejarlo contra la nieve.

—No te muevas— Ordenó dejándole de piedra. —Escucha, no tenemos mucho tiempo— Lo esposó. —Soy de la Brigada Especial para Extintos. Mi deber es encontrar y proteger a gente como tú— Explicó. —No pongas fuerzas—

—¡No puedo ir con ustedes!— Se sacudió.

—No seas terco...—

—¡No lo entiendes! Sí no vuelvo a casa él se enfermará...—

—¿Quién?— Preguntó, sin embargo se vió interrumpido por la comunicación de Zack.

—Ehm, capitán, tenemos un problema...—

—¿Qué es? Habla—

Zack había entrado al departamento de Noah, encontrándose al gamma en un estado que ellos no imaginaban. —Tenemos un R-3— El chiquillo que encontró estaba embarazado y sostenía un cuchillo temblando.

—¿Qué...?— Se asombró notablemente Kody por la noticia. —¡Uhg, tú sí que sabes complicar mi vida!— Le gritó al delta y brutalmente lo levantó. —¡Camina!—

—¿Qué va a pasar con Issac?—

—Los protegeremos a ambos, ese es nuestro trabajo— Lo dirigió al auto de la Brigada.

Alisa alejaba a los indecisos policías, que no querían dejar en mano de la brigada al sicario, no obstante no tenían la suficiente autoridad para detener a la brigada.

En la base científica jamás habían estado tan felices en toda su vida. No solo les habían traído a Noah, también a un gamma embarazado de él.

—Tal cual prometí, tío— Le habló al director. —No obstante, sí quieren al gamma van a tener que cambiar absolutamente todas sus anticuadas políticas— Dijo Kody.

—Al final eres un Rosset también... Puedes hacer lo que quieras— Le dió una llave con acceso al sistema completo. —Eres tan astuto como tu madre e inteligente como tu padre ¿Cómo podría decirte que no?—

—Gracias, tío— Kody sonrió, yéndose por la puerta de la oficina.

—¡No!— Chilló Abigail. —¿Qué acaba de hacer? ¡Le dió absolutamente todo el poder de la base científica! ¿¡Cómo un jovencito como él podría lograr manejarlo!?—

—Abigail— Nombró gelidamente el tío de Kody. —¿Te das cuenta que él es el único Enigma en todo el mundo? Solo un Enigma puede decidir por el mundo entero— Sonrió sadico. —¡Y necesito presenciar la destrucción del mundo!— Rió malévolo.

—Creía que iba a darle el máximo poder a su hijo...—

—Él no es un Enigma, Abigail— Le dió una mala mirada.

—Pronto lo será...— Cyer tiró furiosamente todos los objetos del escritorio.

—¿¡Por qué no hay resultados todavía!?—

—E-está en proceso...—

—¡Muévete!— Ella en seguida salió corriendo del lugar, chocando con alguien entre medio.

—¿Aún tienes problemas controlando tu ira?— Se rió desde la puerta su marido. Que como siempre aparece repentinamente delante de Cyer.

—¿Jack, cuándo llegaste?— Trató de calmarse el director.

—Hace unas horas, estaba viendo a nuestro hijo, el cual descuidas bastante— Se movió recogiendo algunas cosas.

—¿¡Vas a echarme la culpa a mí!? ¡Tú me obligaste a tenerle!—

—¿Te obligué?— Se acercó. —Tú eres el único que decidió quedarse con un alpha para variar— Movió burlesco sus brazos. —Te dejé cuidar a nuestro hijo y así te quejas... Lo usas como rata de laboratorio y yo no te reprocho nada— Se sentó sobre el escritorio. —Te doy tu espacio, y todo lo que necesites— Agarró al alpha de la camisa. —¿Y así es cómo me tratas?— Usó su voz de alpha.

—N-no, Jack, solo estaba fuera de sí... Esa doctora me hizo enojar— Jack juntó sus labios con los del alpha.

—Me gusta cuando eres obediente— Le sonrió.

El escuadrón 1 entró a la biblioteca donde estaba toda la información de la base científica. Aunque en realidad habían pocos estantes con archivos, lo que parecía tener todo era una computadora de máxima tecnología.

—Zack, encárgate de la computadora— Él enseguida se dispuso a encenderla. Mientras Elisa y Kody buscaban entre los libros.

—Experimentos fallidos...— Kody vió con rabia y tristeza las múltiples muertes que ocurrieron. —Averigüen si los derechos de estas personas se cumplen ¿Qué es lo que falta? ¿Cómo los controlan? Y sobre todo piensen en soluciones.— Les dejó el papeleo a sus compañeros.

Kody no estaba nada contento por cómo trabajaba la base científica ¿Serían todas iguales?

Ficha de Issac