•Dulce Alfa•|| Yoonmin || Omegaverse

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Narrador Omnisciente

Park JiMin estaba llegando a su trabajo algo asustado, ¿Cómo hablaría con su jefe acerca de esa posibilidad de estar embarazado?.

En esos momentos solo podía ver a Min YoonGi como su jefe, no como un joven que lo trataba con mucho cariño y lo ayudo en su celo.

Subió hasta el piso donde él trabajaba y paro en frente de la puerta, cerró los ojos e inhaló y exhaló en un intento de calmar sus nervios y a su corazón el cual latía desenfrenadamente.

Iba a tomar la manecilla pero justamente en ese momento la puerta se abrió, dejando a ver a su jefe, a el único e inigualable Min YoonGi.

— Oh, buenos días JiMin, estaba por ir a preguntar por ti — Le sonrió y se hizo a un lado dejándolo pasar.

Park estaba con sus mejillas completamente rojas. "¿Por qué YoonGi tiene que ser tan caballeroso y amable? Solo hace que mis sentimientos sean aún más confusos" pensó el Omega mientras le agradecía a Min en voz baja.

— ¿Cómo has estado? — Pregunto el Alfa a penas entro el de baja estatura.

— Bien, ¿Y usted señor Min? — Respondió.

— Me alegro, yo he estado bien — Le regalo una bella Gummy Smile.

Ah, JiMin podía jurar que su corazón iba a estallar.

El de cabellera rosada estaba por decirle su sospecha pero mejor decidió que no, ¿Qué tal si no resultaba embarazado? Que vergüenza haberle dicho a YoonGi que estaba en cinta cuando probablemente no era así.

— Bien JiMinnie, a trabajar que tengo el presentimiento de que hoy será un día lleno de trabajo. — Miro a ese pequeño Omega y volvió a regalarle una de sus típicas sonrisas.

— De acuerdo señor Min — Asintió y se dirigió a su puesto.

El mayor tomo asiento en su respectivo lugar y permaneció unos momentos inmóvil.

YoonGi pensaba que JiMin estaba muy serio ese día, parecía como si tuviera una pelea interna y quería guardarlo para el mismo, y enserio a Min le preocupaba el estado de su menor pues este siempre sonreía y se mantenía tranquilo, nunca lo había visto como en esos momentos.

Después de pensarlo durante varios minutos el Alfa decidió que sería mejor preguntarle en la hora de la comida, lo llevaría a un lugar calmado y seguro para poder hablar con tranquilidad y sin que ningún chismoso escuchará la conversación.

Ambos empezaron a trabajar, dejando a atrás el tema de el comportamiento extraño de JiMin.

Los dos estaban metidos completamente en sus cosas ya que, tal y como lo había predicho YoonGi, ese día tenían mucho trabajo.

La puerta fue abierta sin ningún aviso.

Park y Min voltearon a ver a la persona que había entrado a la oficina sin ningún aviso.

JiMin se sonrojo al ver a esa persona y el entrecejo de YoonGi se frunció.

Ahí, en la entrada de la puerta se encontraba la mismísima JiEun.

— Buenos días YoonGi-ah — Saludo junto con una leve reverencia.

— JiEun, debes tocar antes de entrar, no puedes hacerlo así — Reclamo.

JiMin se sorprendió al escuchar que aquella bella chica ya no llamaba a YoonGi "Oppa". Al parecer la chica logro superar el rechazo de el señor Min un poco por lo menos.

— Lo siento, solo venía a despedirme — Dijo eso para después mirar por unos segundos a Park.

— ¿Despedirte? ¿A dónde te vas? — Preguntó el único Alfa en la habitación con una clara curiosidad.

— Voy a... ¡Italia! Si, eso, voy a Italia — Respondió con algo de duda en su voz.

— Me alegro por ti JiEun, espero que vivas bien allá — Hablo el azabache con amabilidad.

El pequeño Omega Park solo escuchaba, el no era parte de esa conversación y no debía meterse.

— Espero que tú también vivas una vida buena al lado de... Tu pareja — Miro fijamente al Omega logrando intimidarlo.

YoonGi noto eso y decidió interrumpir.

— ¿Cuándo te vas? — Interrogó llamando la atención de la chica.

— Oh, mi vuelo sale... — Se quedó en silencio unos minutos. — Mañana, si, sale mañana en la tarde.

A él Alfa le pareció curioso el hecho de que JiEun dudara tanto en sus respuestas pero no pregunto nada al respecto.

— Te deseo un buen viaje.

— Gracias, es hora de que me retire, tengo mucho por empacar — Dijo retrocediendo. — YoonGi-ah, espero volver a verte, a ti y a... Tu bella pareja — Dijo eso y salió de la oficina cerrando la puerta un tanto fuerte.

A la vista de YoonGi el comportamiento de la prima de HoSeok era extraño pero no sé mucha importancia, o eso pensaba el.

Bien, JiMin empezaba a tener miedo de esa chica, ¿Debería tenerlo?.

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¡Actualice después de un mes!.

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