Estrellas Colapsando

CAPÍTULO 8

Esta había sido una de las noches más largas que he pasado. En un par de horas saldría el sol. La temperatura que hace unos momentos era normal comenzó a cambiar a un frío muy fuerte e inesperado, de hecho algunos de mis músculos se estaban congelando y me resultaba difícil moverlos. El viento combinado con el aire muy helado comenzó a golpear todo, comencé a caminar muy rápido, casi estaba corriendo, y el viento golpeaba muy fuerte me golpeaba directamente en la cara, esto lograba que mi cabello se despeinara, que mis ojos se secaran, y que mis músculos se tensaran, lo cual impedía me moviera como yo quería. Quería llegar rápidamente a mi apartamento, olvidar lo que acaba de pasar hace unos momentos, pero no podía, literalmente el pasado me perseguía.
-¡Pat, no te vayas! Entiende que yo no lo quería hacer. No quería que fuera así. Y entiendo que es enojado. Bueno si es que... Pat, ¿estás enojado?-dijo casi a gritos Mary Lynn, ya que si no gritaba yo no podría oírla. Estábamos como a cinco metros de distancia.
¿Cómo pregunta si estoy enojado? Es obvio que estoy enojado, y ella debería saberlo más que nadie. Después de lo que hizo, después de la promesa que rompió. Después de haberme herido y abandonado se atreve a preguntarme si estoy enojado.
-¡No! No no no, para nada-dije con un muy obvio sarcasmo en mi tono de voz.-¿Cómo podría estar enojado contigo?
Quería irme ya. Dejarla ahí en medio, yo sin ella y ella sin mi, así deberían ser las cosas. Estaba enojado con ella por muchas cosas, pero las había olvidado por completo cuando la vi en el callejón. Lo que avivó la llama de mi furia fue cuando me llamó con el apodo que no había oído en un par de años. No podía creer la osadía de esta mujer al llamarme de este modo después de todo lo que había pasado. Simplemente no creía justo que ocurrieran ciertas cosas, la mayoría me afectaba a mi, y que de repente llegue como si nada tratando de convencerme de...¿de que me quiere convencer? No me había tratado de convencer de nada, tal vez sea por que desde que mencionó el apodo me eleve de ella y no le dirigí la palabra.
Estábamos a unos siete metros de distancia frente a una joyería instalada en un edificio. Yo frente a ella. Ella frente a mi. Su cabello marrón oscuro caía ondulado sobre sus hombros cubiertos por parte de la tela del vestido rosa pastel que traía puesto. Ese vestido le llegaba un par de centímetros por arriba de la rodilla. Traía en una de sus manos, la derecha, una pequeña bolsa de piel color azul marino, este bolso tenía pasado por en medio un cierre dorado. Estaba maquillada, tenía los párpados negros. Labial rosa oscuro sobre el labio inferior y superior. Y su piel lucia más pálida debido al polvo que seguramente traía puesto. Estaba muy bonita. ¿Porqué portaba un vestido? ¿Porqué estaba tan formal? ¿De dónde viene? O, más importante, ¿porqué me buscó a mi? Tenía muchas preguntas pero no quería dirigirle la palabra. Quería que todo esto desapareciera ya, quería dejar pasar todo.
-Pat, tu mas que nadie debes saber que las cosas pasan por una razón. Tal vez no nos favorezca pero si algo ocurrió no podemos olvidarlo, porque en nuestro interior siempre recordaremos el pasado-dijo con algo de seriedad.
Era como si hubiera estado leyendo mi mente. Esta chica siempre me sorprendía. No importaba cuanto la conocieras, si creías que sabias todo de ella cada día te sorprendía mas. Y este era uno de esos días, pero por primera vez quiero negarle la entrada a mi vida. Hubo varias ocasiones en las que pensé sacarla de mi vida. Dirigirla al olvido de mi mente, sin embargo al acercarme a ella, al verla o al escucharla se me olvidaba que tenía que olvidarla.
Ella, sin la intención, había roto mi corazón, me había herido emocionalmente. Sin embargo siempre me decía a mi mismo que no era su intención, que ella no sabía lo que hacia, pero poco a poco en ciertas ocasiones comencé a dudar, comencé a dudar de la opinión de todas diciendo que Mary Lynn era la persona mas bondadosa, buena y dulce de todo el mundo. Comencé a sentir que me había quitado la venda de los ojos, que estaba viendo a la verdadera persona detrás de la dulce, buena y bondadosa mascara. No podía hacer nada para sacarla de mi cabeza porque estaba enamorado de ella. Y en este momento seguía completamente enamorado de ella. Cuando estaba enamorado de ella desde la secundaria creí que con el tiempo dejaría de amarla, pero estaba pasando todo lo contrario, cada vez la amaba mas. Lamentablemente. Lo único que no sabia era si ella sabia que aun la amaba. Era una duda que jamás sería respondida, ya que sin preguntas no hay respuestas.
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-¿Adivina lo que hizo Elliot?-preguntó Melanny mientras se subía al auto de mi mamá.
La escuela estaba algo alejada de donde actualmente vivíamos, así que como Melanny y yo vivíamos a menos de dos kilómetros de distancia nuestras madres se pusieron de acuerdo para que la mamá de Melanny nos llevará a la escuela y que mi mamá nos recogiera y nos llevara a nuestras respectivas casas.
¿Qué habría hecho Elliot? Había pasado un día desde que Mary Lynn terminó la relación entre ella y el. Me molestó que Elliot se quedará callado, pero siento que Mary Lynn EXAGERÓ mucho al llorar por algo que ella hizo y veía "obvio". También me extrañó y me enojé con Mary Lynn por que terminó la relación con Elliot en un mes exacto sin darle una oportunidad. O sea me parte el corazón en mil pedazos y conmigo no fue suficiente, ¡¿que le pasa?! Claro, ella no sabia que me estaba destrozando porque se supone que no sabia que yo tenía sentimientos fuertes hacia ella. Tan siquiera le hubiera dado una semana mas. Tal vez su "orgullo" pudo mas con ella.
-¿Que hizo?-pregunté al fin. Yo me había sentado junto a ella, y mi hermano y el suyo estaban a su lado. Yo estaba junto a la puerta y mi hermano menor estaba en el asiento del copiloto.
-Me entregó todo lo que le había dado Mary Lynn. Me lo dio cuando sonó el timbre, dijo que no quería saber nada mas de ella-dijo Melanny con un tono decepcionado.
Al parecer Melanny no se esperaba aquello de él, yo tampoco. Después de decirme esto Melanny sacó algo de su chaqueta. Eran un montón de cartas, las cartas que Mary Lynn le había dado a Elliot, mucho antes, poco antes y durante su relación. Me puse algo triste debido a que yo le hice una carta de Navidad antes de salir de vacaciones de invierno, y en esos momentos me preguntaba ¿que habrá hecho con la carta que le di? ¿La conservó? ¿La quemo? ¿La desecho? No sabia que esperar de ella en esos momentos. También le hice una en su cumpleaños, ¿qué le habrá hecho?
Melanny comenzó a leer las cartas camino a su casa. De vez en cuando bufaba. Estaba decepcionada de su amigo, igual que yo. Es obvio que no iba a poder olvidarla, porque no tienen que negar algo que pasó. Si algo pasó y fue un error o no les gustó pues que se hagan cargo de ello, pero que no sean tan tontos como para fingir que su relación nunca existió. Melanny también comentó que Mary Lynn hizo lo mismo pero que le dio las cartas a Valerie, Donna y a Mellanie.