□Capítulo 5□

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Me encontraba paseando por la biblioteca, admirando cada libro de aquellas grandes estanterías.

-¿Te gusta leer, Cinco? - dijo aquella linda voz.

Volteé y la miré. Aún no olvidaba su escena con Diego de aquella mañana, pero no podía hacer más que resignarme y tratar de entender y aceptar su relación. Al fin y al cabo, yo acababa de llegar allí, era el nuevo y mi presencia no alteraría su relación.

-Sí - dije admirando una gran estantería.

Vi como ella pasaba su mano por una silla para quitar la capa de polvo que se había acumulado allí y se sentó en ella.

-Este lugar da asco, parece que se olvidan de limpiarlo. - dije quitando el polvo de la cubierta de un libro.

-Supongo que gracias - dijo ella algo más seria.

-¿Por qué? - dije volteando a mirarla.

La miré a esos hermosos ojos que tenía, y tratando de no sonrojarme, esperé su respuesta.

-Yo soy quien limpia la biblioteca - respondió.

Mierda... ni un día llevaba aquí y ya había hecho sentir mal a aquella chica.

-L-lo siento... - dije bajando la mirada muy avergonzado.

-No te preocupes... limpiar este lugar es difícil, es demasiado grande. Aún así llevo tiempo sin limpiarlo, últimamente hay demasiadas misiones y entrenamientos, estoy demasiado cansada para limpiar.

Al escuchar esas palabras, recordé que en la serie era Grace quien se ocupaba de aquellas tareas de la casa, por lo que decidí preguntar.

-¿Y Grace?

-Ella limpia toda la academia menos este lugar. Papá se lo prohibió...

-¿Por qué? - dije con mucha curiosidad.

Ella bajó la mirada y pude notar como su cara cambiaba a una de tristeza.

-Papá.... quiere derribar la biblioteca... dice que no sirve para nada, que leer me distrae de las misiones y entrenamientos....dejó de limpiarla hace meses.

Me quedé en shock con sus palabras. Me senté a su lado y la miré.

-La semana que viene... esto será una sala de entrenamiento... - dijo con la voz entrecortada.

Levantó la mirada para encontrarse con la mía.

-Este... es el único lugar que me hace desconectar de la realidad. Siempre estoy aquí. Los entrenamientos son agotadores y las misiones duras, pero me consolaba pensar que cuando llegase a casa podría venir aquí, leer y despejar mi mente... pero ya no será así.

Bajé la mirada pensando, no podía dejar que aquel lugar se destruyera. Sé que acababa de llegar, pero eso no importaba, haría lo que fuera porque ese lugar siguiera en pie.

-Todo estará bien ___ - dije mirándola a los ojos.

Ella me miró y me dedicó una pequeña sonrisa con la que traté de no sonrojarme.

-Gracias Cinco.... me caíste muy bien, espero que seamos buenos hermanos. Bienvenido a la familia - dijo sonriendo un poco.

Le devolví la sonrisa, y segundos después alguien entró a la biblioteca interrumpiendo aquel momento.

-Sabía que estarías aquí.... lo que no esperaba era que estuvieras con el nuevo - dijo Diego.

-¿Tiene algo de malo? - dijo ella mirándolo.

-Ven conmigo ___, quiero enseñarte algo.

-¿Puedo ir después? Estoy hablando con Cinco.

-No, ahora - dijo agarrando su brazo.

Ella rodó los ojos y volvió a mirarme.

-Nos vemos luego Cinco.

Me sonrojé al escuchar mi nombre en su voz, pero sorprendentemente, nadie se dio cuenta.

Diego siguió agarrando el brazo de ___ hasta que ambos salieron de la biblioteca.

Un cuento que nunca pasó {Cinco y tú}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora