- JENNIE! - es lo primero que puedo decir al despertar cuando escucho la alarma y me levanto de golpe
- Leo, no puedo llegar tarde - tomo mi toalla y me meto al baño
Realizo mi rutina de limpieza mañanera más profunda de lo habitual, duplico la intensidad de mis actividades de aseo personal, increíblemente hoy hace un poco de calor, estas son señales de que la vida me sonríe hoy. Espero que Jennie también me sonría de la misma forma.
Nunca le había dedicado tanto tiempo a mi fleco, necesito verme bien
- Te parece bien así? - me observo en el espejo de cuerpo completo de mi cuarto una vez ya vestida
-....- no obtengo ninguna respuesta por parte del gato
- Yo tampoco creo que estos zapatos me queden - mejor me coloco otros
Una vez realizado el cambio de zapatos me despido de Leo y salgo de casa viviendo la vida como si fuera un musical. Siento que el mundo hoy se despertó a mi favor y nada ni nadie podrá arruinarl...
De repente alguien me llama interrumpiendo mis pensamientos y contesto.
- Lisa, te necesito ahora, es importante - escucho la voz de Petra
- P-pero se supone que debía ir a las 2:00 p.m -
- Lo se, discúlpame, pero es urgente, te lo recompensaré -
- Es que y-yo.... - suspiro - Ya voy en camino... - digo desanimada
- Te espero - cuelga
- AAH! - doy un pequeño grito de odio para mi misma
Por qué hoy?! por qué justamente hoy y ahora?! odio que las cosas no salgan como quiero, odio que me arruinen los planes, odio los cambios repentinos... excepto Jennie, ella no cuenta.
Tomo un taxi para cambiar mi destino, espero no volver demasiado tarde, no me lo perdonaría nunca
Por fin logro llegar para realizar algunas cosas con Petra, creo que ella notó el mal humor en mi rostro, ni siquiera he podido hablar con nadie del equipo lo cual es raro porque siempre suelo llevarme bien con todos, solo quiero concentrarme en mi trabajo para terminar rápido, se que Petra puede parecer la persona más intimidante del mundo y mucho más como jefa, pero en realidad es una muy buena persona y he aprendido mucho de ella en este medio.
La conozco desde hace varios meses, estaba en una plaza cuando vi a una niña muy linda y le pedí permiso a sus padres para fotografiarla, de ahí su madre vio el resultado y le gustó mucho. Me pidió mi número y me llamaba para unos que otros trabajos. Desde ese entonces gracias a ella es que ahora trabajo aquí, un día solo me llamó y me dijo que me había recomendado y ahora estoy a su lado trabajando mano a mano; es buena jefa aunque a no lo aparente. No establecimos un vínculo más allá de lo profesional, pero aún así puedo decir que su relación con su hija es dulce y cercana, fuera de su oficina es muy buena madre y esposa.
Ya perdí la cuenta de las horas, no creo que sean más de las 4:00 p.m y lo más probable es que Jennie ya se haya ido...
Se que mi conciencia me dice que ya no va a estar ahí pero mi corazón me dice que pase por la biblioteca una vez más, igual no voy a perder nada.
Camino hasta llegar al lugar, lo observo con duda de arriba a abajo. Ya me quité la necesidad de venir hasta acá, pero no creo que sea necesario entrar cuando la respuesta es algo obvia, así que solo sigo caminando derecho tratando de no pensar en el tema. Pero no puedo resistir contra mis sentimientos y me doy la vuelta justamente para encontrarla saliendo de ahí.
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Siempre fuiste tú
RomanceLisa, una fotógrafa y editora de New York, inconsciente de su ansiedad y déficit de atencion vive huyendo de lo caótico sin darse cuenta de sus problemas. Un día cualquiera como cualquier otro dentro de su rutina conoce a Jennie, una chica de la que...