A veces siento que mi vida no es real, es decir, de verdad estoy aquí o solo aparento estarlo? pero la pregunta más grande es: dónde prefiero estar? , digo, físicamente estoy aquí sentada con los brazos cruzados sobre la mesa observando la lámpara de lava decorativa sobre la misma. Pero por momentos efímeros pierdo el orden de los pensamientos, como si el mundo se volviera irrelevante y solo subsistiera esa parte inconsciente de mi cuerpo que actúa por instinto, que vive el ahora sin importar las consecuencias del mañana y que se lanza al vacío sin paracaídas. Pero si no existe un final en el vacío, por qué ocurre por instantes y no por siempre?
- Señorita, aquí tiene su orden - siento que me tocan el hombro y levanto la cabeza para recibir mi pedido
-Gracias - recibo el americano con crema y azúcar y le doy un sorbo
Se supone que debo estar en el museo en dos horas, y aún no tengo idea de qué hacer, no se como aplicar el concepto en la publicidad de este evento, no se absolutamente nada del tema, no puedo tomar unas simples fotos del museo y ya?. Ayer estuve viendo si podía realizar algo en edición pero no se puede hacer mucho que digamos, no se porqué me metí en esto. Podría buscar algo en internet pero no hay nada que ya esté reutilizado o muy visto, debería ir a la biblioteca estatal a buscar lo que necesito.
Con el mismo café en las manos me levanto y dejo la propina debajo de la lámpara de lava, salgo con un poco de prisa del café Roma y camino unas cuantas cuadras; cuando digo unas cuantas me refiero a unas ocho. Cualquiera que no esté en buen estado físico se moriría yendo a pie, pero como estoy acostumbrada a recorrer esta ciudad por mi misma es fácil aguantar el trayecto hasta llegar a la biblioteca.
Entro de maneja muy objetiva buscando lo que necesito, me dirijo de una vez al área de libros de diseño y busco lo que necesito, reviso unos cuántos más y al final opto por llevarme uno potencialmente útil. Me acerco a la bibliotecaria para pedir el libro prestado y una vez obtenido el libro sellado por la misma, lo guardo y doy un paso hacia la salida pero me detengo repentinamente.
Hoy es lunes, y es temprano, significa que.... Jennie debería estar aquí.
Lo pienso dos veces antes de decidir si seguir con mi camino o devolverme a ver si está en la biblioteca, pero algo me dice que debería buscarla y escojo seguir mi corazonada.
Busco por encima de los pasillos mientras camino hacia el área de lectura, pero ni siquiera al llegar allá la encuentro, así que me doy media vuelta para ir al área de trabajo que es el ultimo lugar al que me faltaría buscar y efectivamente se encuentra casi al fondo muy enfocada en lo que sea que esté haciendo en esa tableta.
Podría quedarme a verla desde aquí todo el día si es necesario, la luz traspasa los vidrios de sus lentes traslúcidos e iluminan toda su cara, se me hace tierna esa manía en la que siempre aprieta sus labios de manera inconsciente cuando se concentra. Lleva su cabello castaño suelto del lado derecho, tal vez tratando de tapar el sol, siempre se pone en las partes con más claridad.... dejo todos mis pensamientos a un lado y me acerco a su lado sentándome al frente de ella.
- Linda vista - mira hacia mi para reconocerme y luego hacia la ventana
- Si... por eso me senté aquí - cómo le digo que lo que estoy viendo no es precisamente la ventana?
- Está bastante iluminado aquí -
- Pues como verás necesito ver bien - señala los lentes
- Tienes razón... y en qué estás trabajando? -
- Solo dibujo los árboles antes de que se queden sin hojas - explica apoyando sus antebrazos en el borde de la mesa jugando con el lápiz en su mano derecha, miro hacia la ventana para grabar la imagen de los árboles en mi cabeza y luego miro su dibujo.
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Siempre fuiste tú
RomanceLisa, una fotógrafa y editora de New York, inconsciente de su ansiedad y déficit de atencion vive huyendo de lo caótico sin darse cuenta de sus problemas. Un día cualquiera como cualquier otro dentro de su rutina conoce a Jennie, una chica de la que...