Siempre fuiste tú

Capítulo 30

"Siempre me hicieron creer en el "la vie en rose". Decían que el rosa es el verdadero color de la vida, todo este tiempo estuve buscando el sentido de esa frase hasta que sus hilos castaños se posaron a la luz del sol. Algunos se tornaban dorados de tanto resplandor y otros se escondían en la parte de atrás de su oreja... ahí comprendí que no es necesario que la vida sea únicamente rosa, tal vez tiene varios colores, o tal vez solo el de sus ojos..."

De fondo escucho a Roseanne cantar mientras toca su guitarra en mi cama

- Qué escribes? - pregunta mientras continua tocando el instrumento

- Nada... solo escribo el blog de hoy - miento

- Que mala mentirosa eres, hoy es domingo - qué tan mala suerte debo tener para no atinarle ni a una? - Es el libro? - se detiene

- Ajá - digo manteniendo mi concentración en el dispositivo

- Nunca te había visto tan comprometida en algo, eso es bueno - continúa cantando

- Y eso que te trajiste la guitarra? - me separo de la laptop y me volteo en la silla giratoria hacia ella

- Necesito practicar para mi papel en "The last sunset" - me levanto y me tiro en la cama

- No me has contado mucho de esa obra -

- Estamos casi a la mitad de los ensayos, ni siquiera he leído el guion del final - se ríe sin dejar de rasgar la guitarra

- Sabes? tengo un buen presentimiento, digo, siempre te has esforzado, pero últimamente te siento muchísimo más entregada en este proyecto -

- Yo también lo tengo... a veces recuerdo cuando solíamos tener este tipo de tardes al salir de la universidad y hablábamos de nuestros sueños... creo que vamos por buen camino -

- Si... - respiro profundo y dejo que Roseanne siga en lo suyo durante unos segundos más - Sabes quién más sabe cantar lindo? -

- Jennie - dice con un suspiro tirándose a la cama con los brazos extendidos como si estuviera enamorada

- Qué te hace pensar eso? -

- A caso estoy mintiendo? -

- Pues no pero -

- Ahí está - me interrumpe

- Es que enserio tienes que escucharla, una vez fuimos al karaoke y... -

- De repente el cielo se abrió a su llamado y escuchaste a miles de ángeles cantándote en un solo coro - me interrumpe para burlarse

- Ahg ya no te cuento más nada - se ríe

- Eres tan tierna cuando te enamoras - me aprieta la mejilla y hago una mueca de disgusto - Honestamente cuando me hablaste por primera vez de ella pensé que solo te duraría una semana, pero para mi sorpresa no fue así -

- Es que con ella todo es diferente -

- Y si piensas que tienes oportunidad con ella? -

- No te conté, pero el viernes me quedé a dormir en su casa - se sienta rápidamente

- El segundo round llegó más rápido de lo que pensé - dice entusiasmada - Seguro te tienen de pasiva - me da pequeños empujones en el brazo riéndose

- Qué?! no! Claro que... no estoy hablando de eso! - no coordino mis palabras para hablar y me siento para detenerla - No pasó nada, de hecho mi intención ni siquiera era quedarme a dormir... solo nos sentamos, conversamos y nos quedamos dormidas en el sillón, y por la mañana temprano debía irse así que aproveché para regresar -