-9

982 83 12
                                    

-mitsuki de verdad gogo me preocupa, el no era ni un poco de lo que es ahora, hasta hace poco que compro una casa para el y yami, gogo se a comportado muy raro.-
Masaru hablo mientras acomodaba su ropa para meterla a la maleta.

-sin duda no era así, ayer se comportó muy horrible con nosotros.- Mitsuki se encontraba sentada en la cama, con una cara preocupada por el comportamiento de gogo.

-deberiamos ir hoy por yami a la escuela te parece? Para que asi ya no estes tan preocupada.- dejo aun lado sus maletas y empezo a sobarle los hombros a su querida esposa con tal de relajarla

Mitsuki solo sonrio y asintió, quería pasar un dia con yami despues de todo, lo dejo de hacer desde que su empresa empezo a crecer dejandolo "casi" a cargo con su otro hijo mayor para que lo cuidara en lo que ellos no estaban.

Yami también tenía que pasar un rato aunque sea con sus padres adoptivos.

- - -

Un chico de cabello morado y entre negro se acercaba hacía su salon con una sonrisa en su rostro, estaba feliz de que iba aver a su amigo shoto y poder explicarle el porque no pudo encontrarse con el.

Ya al llegar a su salon se encontró a shoto pero al parecer no estaba solo a lado había una chica, la chica era mas baja que shoto, pelo corto y algo cafe su cuerpo era algo delgado y tenía una sonrisa muy linda.

Shoto al ver que yami se encontraba en la puerta viendolos a los dos, rapido se levanto de su asiento para ir a abrazar al menor.

Casi cae por la impresión y por la necesidad que le mostraba shoto, el abrazo era calido y sentía la preocupación de shoto quien yami solo dejo abrazarse aunque nunca le a gustado.

-yami.- porfin hablo el chico de dos colores- estuve muy preocupado por ti.

Tenía una expresión de querer saber porque no contestaba todo, pero tenía que callar ¿no es asi? Hermano?.

-veras.- rasco su cabeza algo nervioso, no sabia que mamada le iba a sacar ahora- bueno, es que estaba algo triste y no quería salir.- una muestra de confusión mostro su amigo.-

-como?.-

-bueno, si, y-yo.. ¡estaba triste!.- sin darse cuenta había gritado haciendo que shoto diera un pequeño salto y retrocedíera
Lo había jodido de nuevo.

-ohhh....- el silencio fue muy incómodo.
De nuevo ese maldito silencio, estaba hartó, agacho la mirada algo apenado.

-. Lo siento.- nunca pedía disculpas a menos que sea su hermano, pero sentia la necesidad de hacerlo ahora.

-esta bien no te preocupes, pero aun así, si estas triste por favor no dudes en decirmelo.- shoto mostro una sonrisa algo pequeña, pero aunque parecía tranquilo el miedo estaba adentro de el pensado que a mejor yami ya se a enterado de que no tiene una vida tan lujosa como el.

Sus miradas se conectaron, una arrepentida y una triste.

Una voz se hizo presente.

-hola yamikumo, shoto me a contado mucho sobre ti.- la otra chica que había visto recientemente le estaba hablando.

-oh hola, quieres eres?.- se mostraba confundido, no conocía a esa chica pero tenía algo que ver con shoto.

NO TE ALEJESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora