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Por segunda vez, todos se fueron a dormir. Draken dejó a Emma dormir abajo, pero ella quiso en la litera de arriba. Draken se conformó con la de abajo.
Para segunda sorpresa que tuvo, fue que alguien llamó a la puerta diez minutos después.
Mikey: No puedo dormir... Estoy solo en mi cuarto...
Draken: Ahhh... Mikey. Pregunta a Smiley si quiere dormir contigo, que está solo.
Mikey: ¡Jo!
Emma: ¡Déjate de Jo, Mikey! Estábamos durmiendo.
Mikey: ¡Perdón! Ya me voy. ¡Adiós!
No le contestaron. Volvieron a echarse en sus camas y a dormir, para que ni media hora después se tuvieran que volver a levantar. Alguien gritó.
Draken: Ahh, ya empezamos de nuevo. Emma, vamos.
Ayudó a bajar a Emma y bajaron los dos las escaleras corriendo. Allí también estaban Baji, Kazutora, Hina, Yuzuha, Smiley y Mikey. Todos frente a la puerta de Chifuyu. Baji intentando abrir la puerta con el hombro.
Baji: ¡Es un caso perdido! No puede dormir solo.
Draken: Pero, ¿qué ha pasado?
Hina: Nos hemos despertado todos y hemos intentado abrir la puerta pero la tiene cerrada.
Emma: ¿Ya estais curados de las heridas?
Kazutora: No... Ni siquiera han cicatrizado.
Baji: ¿Puedo utilizar la fuerza bruta?
Todos: ¡No!
Baji: Vale...
Entonces, el cerrojo del cuarto se abrió y Baji se cayó dentro. Él mismo volvió a levantarse como si nada, para ver a Chifuyu sentado en una esquina.
Baji: ¡¿Pero a ti que te pasa?! ¡No me dejas entrar y ahora estás ahí con miedo y todo!
Chifuyu: Baji-san... ¡Huye!
Baji entonces miró arriba. Todas las sustancias que había estado mezclando Chifuyu durante el día, habían cobrado vida y ahora era una masa pegajosa y azul que tenía una grandisima boca con colmillos, pero no tenía cuerpo. Atacó a Baji, pero él salió del cuarto con la ayuda de Draken y Smiley. La puerta volvió a cerrarse.
Baji: ¿Qué demonios...?
Hina: ¡Oh, no! ¡Chifuyu sigue dentro!
Mikey: Agradecedme que ya he ido a por el bate, otra vez. ¿Qué ha pasado mientras?
Draken ni respondió. Le daba igual que la casa no fuera suya y echó la puerta abajo rompiendo el manillar. Chifuyu al verlo intentó escapar gateando, pero la masa viscosa, lo cogió del pie y lo levantó hasta el techo. Draken no llegaba a darle con el bate y eso que él era el más alto de todos. Ni Mikey podría llegar saltando.
Draken: ¡Chifuyu, agárrate a mi!
Chifuyu miró desconfiado pero le intentó dar la mano a Draken. Él saltó pero la mezcla azulada de Chifuyu tiró más fuerte de él hasta el punto de taparle la boca y no poder respirar.
Mikey: ¡Déjame a mi!
Mikey saltó sobre la espalda de Draken para hacer más efectivo su salto y se agarró de la mano a Chifuyu. Eso sí, se quedó colgado de su único brazo disponible agarrando a Chifuyu.
Draken: ¡Mikey, voy a tirar de ti! Si te hago daño me da igual.
Mikey: ¡Si me haces daño, me voy a enfadar!
Pero no había otra manera. Draken tiró todo lo fuerte que pudo de Mikey y él agarrado de Chifuyu. No consiguió nada. La mezcla hacía mucha más fuerza sobre Chifuyu que no podía ni defenderse. La boca y la nariz la tenía completamente tapadas y el resto del cuerpo lo tenía agarrado del techo por su propia creación. Mikey se estaba enfadando ya que encima que había hecho algo para ayudarlo, no conseguía nada.
Mikey: ¡Venga! ¡Sueltale ya!
Mikey pegó varias patadas al techo para que lo liberase, pero la cosa hizo más fuerza por cada patada que daba y Chifuyu se quedaba sin respiración.
Draken: ¡Mikey, basta! Si Chifuyu se queda inconsciente, no tendrás fuerza para agarrarlo de la mano.
Mikey: Ahh... ¡Chifuyu, si te quedas sin aire te voy a pegar!
Draken: ¡Pero no le digas eso, que se pone nervios! Si se queda sin poder respirar, te soltará y nos caeremos los dos.
Smiley: ¡O todos nos caeremos!
En ese momento, Baji cogió a Smiley a caballito y Smiley con el bate empezó a darle al experimento viscoso de Chifuyu. Él en cambio solo les miraba a todos aterrorizado.
Smiley: ¡Toma esta! ¡Bicho sin cerebro!
Baji: Como tu hermano...
Smiley: ¡Baji! ¡¿A qué te doy a ti con el bate?!
Baji: La prioridad es Chifuyu. Luego si quieres, me puedes pegar.
Draken: ¡No os peleéis ahora!
Mikey: ¡Idiotas!
Draken: Mikey, los insultos...
Con Mikey y Smiley pegando al techo, Kazutora, ayudado por Hina y Yuzuha, y Emma le empezaron a tirar todo lo que había en el cuarto para ayudar con algo.
Baji: ¡Emma! ¡Has tirado una de mis figuritas de gato!
Emma: Que lástima. Se la ha comido.
Baji: ¡¿Qué se la ha qué?! ¡Smiley, o le das más fuerte o te pego yo a ti!
Smiley obedeció y empezó a dar con el bate a todos los lados dando o no a la cosa. Le daba con todas sus fuerzas aunque la mayoría se iban desviados. Chifuyu se había terminado de quedar sin aire y se le habían quedado los ojos completamente en blanco por la falta de aire. Mikey hacía lo que podía por seguir agarrado de su mano ya que él no podía poner de su parte. Y de pronto...
Smiley: ¡Ups...! ¡La he liado!
Todos miraron a Smiley. Había pegado tan fuerte a una dirección desviada, la cual era el techo, que se había partido en varios trozos. Las baldosas del techo se iban a caer encima de sus cabezas.
Draken: ¡Salid todos! ¡Vamos!
Lo dijo un poco tarde, ya que él techo se derrumbó. Por suerte, esa habitación justa no tenía nada encima del segundo piso. Todos se quedaron en el suelo un momento, pintados de blanco por el polvo. Mikey fue el primero en hablar y empezó a reírse como un loco.
Mikey: ¡La hemos liado! ¡Ja, ja, ja!
Koko: ¡No dejáis dormir! ¡Ah! ¡¿Qué ha pasado?!
Draken: Koko, no has venido en la ayuda de Chifuyu por tus heridas, y ahora vas a ser el único que nos va a curar. ¡Porque yo no pienso ayudaros más! ¡Se me ha caído el canijo de Mikey encima y pesa mucho!
Mikey: Admitelo, Ken-Chin, ha sido divertido. Bueno, no para todos, ¿verdad, Chifuyu?
Baji: ¡Chifuyu! ¿Estás vivo?
Chifuyu a un lado de la habitación, estaba tosiendo todo lo que podía. Estaba intentando recuperar el aire pero el polvo se lo impedía. Baji lo vio y se acercó para darle golpes en la espalda.
Chifuyu: Casi me muero...
Baji: Tú y todos, Chifuyu. Tú y todos...
Mikey: Oh. Smiley, te has cargado el techo.
Draken: Ay, que lio...
Yuzuha: ¿Y la mezcla? ¿Qué ha pasado con ella?
La mezcla había desaparecido. Ahora era un líquido en el suelo y humo azul que se les había pegado a todos en la cara y el cuerpo. Chifuyu se puso abrazando el suelo y la expandió más.
Chifuyu: ¡No! ¡Mi experimento!
Baji: ¡Chifuyu, ya no más juegos de científicos! ¡Casi te mueres por eso!
Koko: Casi morís todos menos yo. ¡Sería un superviviente!
Draken: Anda cállate, Koko. Ayúdanos.
Todos con pinta de haber tenido una pelea de pintura blanca y azul, se fueron levantando. Todos tenían algún corte, por pequeño que fuese, pero alguno. Koko ayudó a levantarse a todos. Antes de ponerse a curar las heridas, tuvieron que ducharse y eso que solo había dos baños. Dos horas o más después, ya pudieron irse a dormir.

Pueblo encantado (Tr)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora