El Amor En Un Compás

Capítulo XX

"Un corazón roto es como tener las costillas rotas, nadie puede verlo, pero duele cada vez que se respira." (Anónimo).

— ¿Lena? — escuchó William correr para entrar en el backstage — ¿Estás bien, Lena? — se acercó apresurado corriendo.

William la encontró ida mirándose a través del espejo y con el maquillaje ligeramente corrido, no necesitaba mucho para darse cuenta que algo había pasado entre la rubia y ella. Se acercó con cuidado y se puso de cuclillas para mirarla tomar sus manos caídas con delicadeza.

— ¿Qué sucedió? — le preguntó con suavidad.

— Kara me mintió, William — sonrió con amargura de medio lado — Sabía que soy una Luthor de hace mucho tiempo y no me dijo — suspiró con algunas lágrimas desbordadas y él británico no sabía qué decirle — Fue Lex quien me dijo, ni siquiera fue ella.

— ¿Lex?, ¿Lex estuvo aquí? — le preguntó algo asustado — ¿Te hizo daño?

— No, William — cerró los ojos deslizando sus manos hacia su propio rostro — Solo quería que le diera mi médula osea, ya sabes que tiene cáncer.

— Ese tipo no tiene límites — se levantó un tanto enfadado dando vueltas por su eje — Kara solo intentaba protegerte, Lena, no tenía ninguna otra intención — Lena iba a preguntar cómo lo sabía, pero se vieron interrumpidos.

— ¡Chicos, es su turno! — se asomó una emocionada Andrea con una sonrisa — ¿Qué están esperando?

— No, nada — le regaló una sonrisa fingida Lena mirando a William para que no dijera nada — Estamos listos, ¿verdad, William?

— Claro — también le regaló una sonrisa fingida a Andrea que se las creyó haciéndoles señas para que salieran.

— Qué raro, afuera no está Kara, ¿no estaba aquí contigo, Lena? — preguntó mientras salían y Lena no sabía qué contestar.

— Seguro anda comprando bebidas, ya sabemos como pasa consintiendo a Lena — recalcó William mirándola de reojo, por supuesto que estaba molesto.

— Tienen razón — asintió la mujer comenzando a darles unas cuantas instrucciones.

— Escucha, Lena — aprovechó que Andrea fue a saludar a una antigua amiga — No voy a mentirte, no me gusta lo que está pasando. Sin embargo, no quiero que esos sentimientos perturben nuestra participación — Lena asintió sin poder creer lo que escuchaba — Más tarde hablaremos, no solo yo contigo, sino todos.

— ¡La siguiente pareja que llegará a la pista de baile es Lena Walsh y William Dey! — se escucharon las ovaciones de sus amigos, o ¿ex amigos? — Provienen de la gran academia de baile, Red Queen al mando de Andrea Rojas y Kara Zorel.

A penas escuchó el nombre de Kara su corazón comenzó a latir dolorosamente, miró a través del telón como si tuviera una subconsciente esperanza de que estuviera ahí sentada, por supuesto, no estaba. El asiento estaba vacío en medio de Alex y Elizabeth que se veían confundidas, en verdad se había ido. Sintió como William le tomaba la mano con suavidad, estaba guiándola hacia el centro, le pidió con su mirada que se enfocara en el baile, nada más. Lena respiró profundo y recordó, sintiéndose hipócrita, las palabras que Kara le pidió repetir, miró unos breves segundos a su pecho, ahí estaba la cadena resplandeciente y suspiró dejando escapar una lágrima.

Miró a William haciéndole un pequeño asintamiento para que diera la señal y la canción comenzó a sonar, su cuerpo comenzó a tener vida propia, estaba bailando con tanto sentimiento aquél género musical que ni siquiera recordaba el nombre, no quería pensar en nada. Miró varias veces al jurado para regalarles una mirada arrasadora, como si fuera una bailarina profesional. Escuchaba las ovaciones del público ante cada cargada, era como si le inyectaran una adrenalina extra, su compañero estaba igual de entregado, las razones no necesitaba decirlas, su esposo estaba en primera fila con su hijo.