CAPITULO 12: SAMUEL.

4 0 0
                                    

Samuel estaba en su pieza acostado, solo escuchaba el silencio de su habitación y en eso alguien tocó la puerta, Samuel se sentó en su cama y era Agustín que había ido a saludarlo:

- Te di tres días para que descansaras, espero que haya sido suficiente.- Expresó riéndose.

Samuel sonrió y le dijo que estaba bien, Agustín se le quedó viendo y le pidió que se pusiera de pie y se vistiera que van a salir.

Samuel se puso de pie y fue a buscar ropa, mientras que Agustín salió y fue a saludar a los padres de Samuel.

En eso que conversaban, salió Samuel quien fue recibido por su sobrino que se fue directo a saludarlo.

Samuel dio los buenos días y salió con Agustín. Samuel no sabía a donde lo llevaba, mientras que Agustín iba escuchando a Anuel, su cantante favorito.

Mientras conducía Agustín, Samuel miraba lo que en su momento eran las calles que el recorría día a día y en una de las curvas pasaron muy cerca del parque en donde dio su primer beso con Vic, algo que hizo recordarla.

Agustín siguió conduciendo y ahí fue donde llegaron al cementerio, Samuel odiaba ese lugar, pero Agustín solo condujo y estacionó el auto. Agustín se quedó viendo a Samuel y le dijo:

- La única forma de que sanes, es enfrentando lo que tanto temes.

Ambos se bajaron del auto y Agustín quien abrazaba a su amigo, se fueron hacia el memorial de su hermano. Samuel estaba muy sensible y Agustín le dio su espacio, Samuel se arrodilló en señal de querer conversar con su hermano, y le dijo:

- Si estuvieras acá verías que los sueños si se cumplen, no te imaginas cuanta falta me haces, ahora serías un adolescente y quizás te aconsejaría que no cometas los mismos errores que yo cometí, y del cual me arrepiento tanto. No sé como sanar, no se como hacerlo.- Terminó llorando y Agustín se le acercó y lo abrazó.

Ambos se pusieron de pie y Samuel se fijó en que estaba decorado el memorial con flores y Agustín le dijo que siempre que podía iba a dejar flores.

Ambos subieron al auto y consideraron que ya era momento de divertirse, por lo que se fueron al cine a ver una película y así finalizar el día de la mejor manera cenando en el restaurant favorito de Samuel.

Samuel se sentía bien, aliviado, le hizo bien ir a ver a su hermano, el salir a despejarse, el estar en sus tierras y con su amigo, y ahí Samuel le preguntó a Agustín sobre su vida:

- Me iré al Flamengo posiblemente, estoy con una chica, su nombre es Isidora, es muy linda y se podría decir que estoy feliz y enamorado.

Samuel al escuchar a su amigo se puso muy feliz por él, y recordó cuando eran chicos, Samuel siempre más agrandado, y Agustín siempre yendo poco a poco, más reservado, más tranquilo. Y quien lo diría, aquello le trajo orden a su vida y se le ve feliz.

Llegó finalmente el fin de semana, Agustín y Samuel se irían a pasar el fin de semana a una cabaña con piscina, Agustín sabía que a su amigo le haría bien apartarse de la ciudad e irse a un lugar con paisajes muy lindos y relajantes.

Luego de un largo viaje, hablando de futbol, recordando momentos memorables de su amistad y demás. Llegaron al lugar, era un lugar muy lindo, se podía escuchar la cascada que estaba muy cerca de ahí.

Entraron en la cabaña y era muy linda, de madera, con una excelente vista y una vez que almorzaron se fueron a tomar un té a la terraza, ahí fue donde Agustín le preguntó por Allison, a quien no tuvo la fortuna de conocerla.

Samuel recordó su sonrisa y le dijo muy sonriente:

- Era una chica directa, muy especial, buen corazón y muy buena compañera, amiga, tenía un humor muy particular.

The BrokenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora