El Tutor 【Jos Canela】

U n o

LA MUÑEQUITA Y EL NERD.

_______(TN).

Dicen que del odio al amor, solo hay un paso.

Dicen.

Pero yo creo que el odio, un sentimiento tan grande y fuerte hacía una persona no puede cambiar por algo tan vulnerable como el amor.

O al menos eso creí.

Desperté por la alarma de mi celular, mis ánimos no eran los mejores a estas horas de la mañana, me levanté decidida para tomar una ducha, eso siempre me levantaba el ánimo y me hacía sentir fabulosa. Salí y continúe con mi rutina, unos shorts adornaban mis muslos y en la parte superior una blusa color rosa. Ahora me sentía muy bien, hermosa como siempre.

Usualmente tengo un autoestima alta, realmente no sé si es autoestima o el ego que abunda mi cuerpo, pero siempre dicen que el amor propio es el más importante y es bueno que yo tenga demasiado.

¡Oh, pero que descortés!
Me presento, mi nombre es _______ Carbonell ,tengo 18 años de edad, soy hija unica de grandes empresarios y futura heredera de las mas grandes empresas, la chica popular que tiene el mundo a sus pies, una chica que no se preocupa por los demás sino que solo por sí misma; disfruto mi juventud sin preocupaciones.

Baje a la cocina, no tenía hambre así que solo agarre una manzana y salí de mi casa directo al instituto.

«Hola, sol. Llegó _______ Carbonel para opacarte».

J O S

Un molesto sonido me despertó, solté un pequeño grito de frustración, ni siquiera quería abrir los ojos. Hoy era de esos días en los que la escuela dejaba de ser mi prioridad y la cama y yo nos volviamos uno solo.

Después de un gran debate con mi madre, decidí levantarme e iniciar mi rutina mañanera: un buen baño, una ropa decente, un poco -mucha- cera sobre mi rebelde cabello y por último, mis compañeros de toda la vida: los lentes.

Miré el reloj que descansaba en mi muñeca, aún tenía tiempo para desayunar y tomar el autobús justo en el momento de debe ser.

Usualmente sigo un horario, separo las actividades de mi día por minutos y mi reloj siempre me recuerda lo que debo hacer, me siento a gusto con ese sistema, si mi horario está en orden, mi vida está en orden.

«Otro día, misma rutina. Nada puede salir mal».

Llegue a la escuela, varias bolas de papel golpeaban levemente mi cuerpo, ni quiera dolía pero era molesto al igual que sus pequeñas risas burlonas, rodaba los ojos por sus típicos insultos, al parecer no tenían suficiente cerebro como para inventar algunos mejores. En ocasiones pensaba que le prestaban más atención al nerd del instituto que a sus propias vidas.

También creo que es una fiesta verme llegar.

Jos:— ¡Hola! —saludé con una sonrisa a mis dos grandes amigos. Jetza y Alonso.

JyA:— ¡Hola! —dijeron al unísono con una sonrisa.

Jos:— ¿Listos para un nuevo día?.

Jetza:— No tiene ninguna diferencia con los demás, siempre es la rutina de siempre —y así era ella, la nerd negativa.

Jos:— ¡Oh vamos! Jetz, lo monótono no es aburrido, es como si vieras el futuro y nada sale mal, Alonso, apoyame —le animé al pelirrojo.

Alonso:— Pues siempre trato de ser feliz —se alzó de hombros, él era nuestro chico inseguro y de pocas palabras.