Elite 5: Vuelve

-CAPITULO 12-

CARLA

Estaba complicando mi vida por completo, me volví adicta de Samuel, de su piel, de sus besos, de absolutamente todo que tenga que ver con él. Llevamos una relación pasional que realmente aún no es relación, ni siquiera habíamos hablado sobre todas las cosas que ocurrieron antes.

No podía controlar lo que siento por él, pero me da miedo que lo que él quiera es seguir con relación de amigos-enemigos-exnovios y ahora folla amigos o lo que sea.

La llegada de mi mamá en el salón me saca de mis pensamientos.

-Hoy es la subasta de beneficio en las bodegas, espero que invitas a Marcos también.

Joder.

-¿Marcos? ¿Por qué invitarlo si ni siquiera somos amigos?

-Estoy segura de que él quiere más que ser tu amigo, hija.

No me importa lo que él quiere, a mí me importa más lo que yo quiero y deseo.

-Mi papá me está arruinando la vida, lo lleva haciendo desde hace años... desde que me dijo que debería ser novia de Polo toda mi vida.

-No hablas así de él...

-Es cierto, creí que he logrado ganarle el juego, pero ahora sigue controlándome.

Note que mi papá estaba detrás de mí al dar vuelta, es como un mafioso... joder.

-Así es y voy a seguir controlándote hasta que recapacitas.

Eso significa que aún sigue cada paso que hago, que sabe donde voy y con quien.

-No es necesario decir a lo que me refiero, acércate a Marcos esta noche y olvídate de Samuel.

-¿Samuel? - susurra mi mamá incrédula

-Así es, ese chico sigue cerca de tu hija.

-Papa no sabe lo que dice.

Mi papá se ríe, vi la mirada de mi mamá y creo que se le creyó todo.

-¿Qué estás haciendo con ese chico de nuevo?

-No te lo va a decir, Beatriz... estás gastando todas tus preguntas.

-No necesito responder estas preguntas absurdas.

Antes de poder ir mi mamá me toma por la mano, es primera vez que la veo así, tan fría y enojada.

-Hazle caso a tu padre.

-¿Qué?

-Lo que oíste...

Pensé que mi mamá estaba enojada con él, que igual existía fe de que mi madre podría cambiar y entenderlo todo.

Por la noche me fui a esa subasta de beneficio, pero decidi pedirle al chofer llevarme, no queria tener nada que ver con mis padres.

Vine de manera más provocativa, llevaba un vestido corto de color rojo y estaba ignorando a Marcos toda la noche. Lo que me sorprendió era ver a Samuel llegando, al menos no estaba cerca de Ari.

Odio toda la noche... la peor noche de mi vida, después de esa noche cuando casi morí después de consumir drogas y caer en piscina.

-Hola.

Oí voz de Samuel, estaba detrás de mí y no sabía que hacer.

Mi papá y mama nos estaban mirando, aunque más me daba miedo la mirada de mi padre.

-Soy yo - susurra

Di vuelta con coctel en mi mano, mirándole preocupada.

-Sabía que ibas a estar aquí - decía alegremente

-Bien, si eso es todo...

-¿Qué te sucede? ¿Por qué estás tan nerviosa?

-¿Nerviosa? ¿Yo?

-Estás diferente.

Joder, Samuel... no me hagas tantas preguntas, no ahora.

-Quiero divertirme y disfrutar la noche.

-¿Vámonos?

Me da su mano para tomarla, pero no pude hacerlo, no delante de mis padres.

-Quiero divertirme, pero no contigo - dije dolida

Camino hacia adelante, pero él me agarra por la cintura... de inmediato reaccioné, tirándole bebida en la cara.

-¡Joder!

-Deja de seguirme, ¿si?

Me alejé de él con gran dolor en mi pecho, me sentí mal, muy mal.

Dos siguientes horas pase mirándolo desde lejos, estaba muy enfadado conmigo, creí que lo perdí por completo.

-Vámonos a la casa, cariño - decía mi papá al acercarse a Marcos y a mi

-¿Ya?

-Nos vemos mañana en el colegio - decía Marcos al abrazarme

-Te esperamos afuera, no hagas que venga buscarte, por favor.

No le hice el caso, vi a Samuel caminar por pasillos dirigiéndose hacia abajo donde se encontraba el baño.

Lo seguí de inmediato, logre tomarlo por la mano, pero él sigue enojado.

-Espera, por favor.

-¿Para qué? ¿Vas a darme una cachetada, ya que toda la bebida gastaste en mi cara?

-Escúchame.

Él suelta mi mano, deja su espalda caer sobre esa pared, cruzando los brazos.

-No quiero escucharte, quiero irme a mi casa.

-Samuel, por favor... vas a echar todo perder por tu puto orgullo.

-Bien, ahora es culpa mía - decía señalando hacia sí mismo

Quede parada frente de él, nos estábamos mirando como si aun existía una gran barrera entre los dos.

-¿Por qué viniste hasta acá? ¿Lo hiciste por el evento?

-Tuve mis razones...

-Yo creo que viniste porque... - dije al acercarme a él - ... Porque quieres pasar una noche conmigo y no sabíamos como acercarte sino de manera directa.

Él se ríe.

Me acerqué a él, pongo ambas manos sobre sus espaldas, él quedaba quieto y mira mis labios.

-Ay, no tienes ni idea cuanto me pones cuando te haces el duro - susurro en su oído

Samuel mira por todos los lados, pero, por otro lado, no se resistía.

-Para, para...

-¿Qué?

-Es muy riesgoso - decía

-Vete si quieres irte.

Me alejé de él, él sigue mirándome de pies a cabeza, haciéndose el duro... pero de pronto se lanza sobre mí besándome en labios.

Le tomé por la mano y ambos entramos al primer baño, quitándonos la ropa, besándonos sin parar... mis padres me estaban esperando, pero no me importa.

En cuanto estaba en mi ropa interior, vi a Samuel dominar mi cuerpo por completo, besaba todo mi cuerpo desde mi cuello hacia abajo. Esto era más riesgoso que Teatro Barceló, mucho más... y alguien pudo haber entrado en cualquier momento.