Elite 5: Vuelve

-CAPITULO 4-

CARLA

Volver a Madrid ha sido un error, pero no puedo echarme para atrás ahora. Voy a tratar ser fuerte, solamente tratarlo por lo menos.

-Samuel no me interesa - dije a mi misma

¿A quién estoy engañando?

Creí encontrarme con un chico que sería capaz de entender las razones por las que me fui, pero este chico está diferente y ocupado.

-¿Hasta cuando voy a tener que seguir en Madrid? - pregunte a mi padre

-Apenas has llegado.

Si y ya quiero irme de aquí...

-¿Ha pasado algo? ¿No tendrá que ver con ese chico?

-Ya te dije que a mi Samuel no me interesa, no sé hasta cuando voy a seguir repitiéndolo.

-Hice un trato con Benjamín, aún no puedo decirle de lo que se trata, pero ya verás que tu futuro será más lujoso de lo que ya está - decía muy seguro de sus palabras

Otro típico día en las Encinas se fue yendo a la mierda, quería huir de mi misma, de todo lo que me rodea, ni siquiera él me quiere de cerca.

-Hola.

Di vuelta para encontrarme con Patrick, otro hijo de Benjamín.

-¿En qué te puedo ayudar? - dije

-Conozco esa mirada... la tuya.

Me sorprendí ante lo que me dijo, no tengo ninguna mirada.

-Quieres huir de problemas y no sabes como, o quizás lo sabes, pero no te atreves hacerlo de nuevo.

Joder.

-¿No es así? - decía

-Quiero desaparecer, ¿sabes?

-¿Por qué?

-Hago daño a todo lo que toco y al fin, no le importo a nadie.

Patrick saca algo de su bolsillo, al fin mostrándome cocaína.

-Si te pillan te sacan del colegio, aunque sea tu propio padre quien lo haga.

-Quiero resolver tu problema, pero veo que no estás preparada.

Vuelve ponerle en el bolsillo, casi caí en tentación de hacerlo de nuevo.

-Todos somos adictos a algo, ya sabes donde encontrarme si necesitas ayuda y algo me dice que vas a necesitar mucho de mi ayuda.

Lo ignore, camine hacia las duchas, no había nadie en duchas de chicos y yo necesitaba sentir un poco de alivio... ignorar esa voz que me dice que no valgo nada y que debería volver usar drogas.

De pronto oí alguien entrar, tome la toalla de inmediato, poniéndola sobre mi cuerpo y saliendo de ducha.

-Es la ducha de los chicos, pensé que ya lo sabías - susurra Samuel

Lo ignoré, no quería pelear con el cuándo estaba tratando buscar un poco de paz.

-Lo sabía, pero no me daba tiempo a ir a la de chicas, no tenía planeado encontrarme aquí contigo.

El sonríe como si no me hubiera creído.

-A mí me parece como si fue un plan tuyo, pero da igual...

Da vuelta sacando ropa para cambiarse después de tener clase de deporte, esta vez me enoje mucho, le tome por el brazo.

-¿Qué dijiste? - dije molesta

-Olvídalo, haz lo que estabas haciendo, yo voy a hacer lo mío y ya.

Igual debería cambiar de adicción, entre drogas y sexo con Samuel no tenía más adicciones, pero Samuel es ocupado y prohibido de todas maneras posibles.

-¿Por qué no estás con tu novia? - cuestione sonriéndome

-Es asunto mío.

Me reí a voz alta.

-Se apagó el fuego - comenté

Samuel quita su camiseta y al oír eso da vuelta mirándome muy molesto, como si hubiera dicho algo que no sea cierto.

-No sigues molestándome o si no... - dijo claramente al dar un paso hacia mi

-¿Qué vas a hacer? ¿Vas a alejarme de tu lado? - susurro en su oído

Samuel baja su mano sobre mi cuello, estaba muy enojado conmigo, pero si podría resistirse no estaría aquí.

-No sigues jugando conmigo.

-No estoy jugando, pero el que no puede alejarse de mí eres tú.

Estaba aún más molesto, esto me recordaba a nuestra primera vez.

Su mano va lentamente desde mi cuello hacia mi espalda mojada, no dejaba de respirar como si hubiera acabado con un maratón. Él abre la boca, mirándome sin moverse, sin cerrar los ojos... estaba pensando lo mismo que yo.

Junta sus labios con los míos, era como un inesperado accidente de coche, me tomaba por sorpresa... él estaba controlando toda la situación, metiendo lengua dentro de mi boca, joder.

Era Samuel, mi Samuel.

Pero ese Samuel también se apartaba de mí de una manera rápida.

¿Qué pasa ahora?