-CAPITULO 36-

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CARLA

Odiaba levantar todas las mañanas sabiendo que el hombre que está dormido a mi lado es Marcos y no Samuel, este tipo era capaz de cualquier cosa, supongo que es lo que sucede con la gente cuando quieren conseguir lo imposible.

Para Marcos yo era lo imposible.

-Espero verte por la noche, esta fiesta no puede seguir sin ti – decía antes de besar mi mejilla

Se ha ido y eso me hace sentir poco de alivio, pero tener que asistir esa fiesta es lo que me hace sentir agobiada.

Poco tiempo después de que él se haya ido, alguien tocaba las puertas y al abrirlas vi a Samuel, cruzado de brazos con ceño fruncido.

- ¿Qué estás haciendo aquí? ¿No te das cuenta de que Marcos podría volver en cualquier momento?

Estaba tan preocupada de que Marcos le decida hacer algo a Samuel, es una pesadilla.

- ¿Eso te da miedo?

-Por supuesto que sí, idiota.

Samuel entra adentro como si nada, no le importaba el riesgo.

Este no era momento para que haga el papel de héroe, ni mucho menos.

-Vámonos de aquí – decía

- ¿Qué?

-Vámonos, haz tu maleta y vámonos de esta ciudad donde siempre terminamos con putos problemas como si fuéramos personajes de más grande tragedia del mundo.

-Samuel, tú y yo si somos tragedia.

-Haz lo que te dije, tengo mi coche aquí y también mi pasaporte. ¿O acaso no me quieres lo suficiente para hacerlo? ¿Tienes miedo de terminar herida si me hagas el caso?

Es tonto.

-Yo ya estoy herida, no sé cómo no te diste cuenta de eso.

-Cambiemos esos, nos vamos y empezamos de cerco.

- ¿Y tu hijo? ¿Ari? ¿Marcos? ¿Qué pasa con eso?

-Joder, siempre estás buscando excusas.

-Yo no pienso huir y dejar problemas atrás, si tú quieres hacerlo es tu problema.

-Tú le tienes miedo a ese tipo, lo único que no se es la razón que le tienes tanto miedo que eres capaz de inventar cualquier cosa para alejarme de tu lado.

Joder, no puede hacerme esto, no ahora.

-Vete antes de que él llega.

- ¿Por qué?

-Hazme caso.

-Te voy a hacer caso, pero necesitas darme una razón válida, ¿no? ¿No es lo menos que merezco de ti después de todo?

-Yo te quiero y es posible que voy a seguir queriéndote toda mi vida, pero ahora tienes que irte.

Él negaba con cabeza.

-No me pienso mover de aquí y si tú no quieres que yo esté aquí entonces dímelo en la cara, pero el hecho es que no puedes hacerlo porque sigues enamorada de mí, me quieres y hace unos segundos me lo confirmaste.

Se acerca a mí, me hace sentir inmóvil, hipnotizada de nuevo.

-Es cierto que voy a ser padre, pero eso no significa que tenga que casarme con Ari... yo te quiero a ti.

Acariciaba mi mejilla y me miraba fijamente en los ojos.

-Te amo – susurra

Cierre los ojos y me dejaba llevar por lo que estaba a punto de pasar, de pronto sentía sus labios sobre los míos, sus manos recorrer mi cintura y no pensaba apartarme de él nunca más.

Elite 5: VuelveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora