Mi Destinado.

Capitulo treinta y siete

Narra Samantha.

-¡Ah!..¡Alek!- mis gemidos los hacia más ruidoso de los normal, no solo por el video que le enviaría a Mikey, sino porque enserio lo disfrutaba.

-Maldición- se quejó el pelinegro -Estoy cerca de venirme.

- ¡Hazlo! - Apretó con fuerza mi cintura para luego correrse, sentí su semen, sonrió para luego traerlo hacia mí para besarlo, él se acercó más, sus manos apretaron mis pechos haciéndome gemir.

-Creo que con eso es suficiente- El chico me miro, Aleksander, un chico que conocí anoche en el bar, le dije que me ayudara a grabar un video teniendo sexo, no se le vería la cara, él se negó, pero luego acepto.

El parecido que tenía con Aleksey, era asombroso- ¿Que harás con esto?

-Mi novio tiene un amante, más bien mi esposo, al parecer el amante no lo quiere dejar y le habla a mi esposo para que no lo deje y él no lo quiere dejar- El me miro- Así que si usaba este video en donde se ve que estoy teniendo sexo con mi esposo puede que él lo deje.

-Te ayudare en lo que quieras- él me sonrió- Ojalá puedas recuperar a tu esposo.

-Si, solo espero que la amante colabore- Con eso salí hacia donde me encontraría con Alek, el video seria para Mikey si Alek no aceptaba en quedarse conmigo u seguía con eso de despedirme.

Lo vi sentado en el pequeño restaurante que elegí para vernos- Hola- lo abracé por detrás pero el me hizo a un lado.

-Aléjate de mí, ¿para qué querías hablar?

-Se que tienes miedo que Mikey te deje y no veas a tu hijo, pero estoy dispuesta a estar contigo a escondidas, no me molesta ser la segunda-

-Para, Samantha, no sé qué clase de chico crees que soy, ¿enserio crees que dejare a Mikey por alguien pasajero como tú? - Sentí mi corazón doler- Ya te dije, no eres mi tipo.

-¿Y si lo fuera?, ¿lo dejarías?

-Tampoco- Apreté mi mano.

-Solo te estoy pidiendo un poco de tu tiempo para mí.

-Samantha, ya basta- él se levantó, me tiro unos papeles- Aquí esta tu título, puedes conseguir un trabajo en otro lugar, no molestes más.

-Puedo arruinar tu vida en un segundo, ¿sabes?

-Me gustaría verte intentándolo- Con eso salió del lugar, quería matarlo, quería matar al causante de que él no me mirara.

Mikey.

Agarre mi celular y le pase una dirección, le enseñaría el video, ellos pelearían, consolaría a Alek y ellos ya no estarían juntos.

Leo solo me mando un "Bueno, espérame ahí".

Narra Leo.

-Que molesta- Tiré mi celular, Alek se estaba tardando bastante, había salido de mañana y habían pasado tres horas, solté un pesado suspiro. 

Otro mensaje hizo que agarrara el celular "Vi a Alek", eso me hizo asustar, me mando una foto, él estaba en una tienda de ropa de niño, hablaba con una de las ayudantes ya que portaba uniforme.

"Sera un buen padre, que envidia, Toru se la pasa durmiendo", reí ante lo que dije, comenzamos a mensajearnos hasta que otro mensaje de Samantha diciéndome que ya estaba en lugar.

Me puse algo simple, un abrigo y salí, Alek aun no llegaba, pero ya sabía dónde estaba, me preocupaba, pero no mucho.

Sali en un taxi, fui hacia la cafetería en donde ella me había citado, me adentré a esta y la vi sentada, me hizo una seña cuando me vio.

Me senté frente a ella- Sera clara, deja a Alek.

- ¿Porque?- Pregunte.

-Llevamos un tiempo saliendo, antes de que te conociera comenzamos a salir, sin embargo, de la nada se fue y luego dijo que tenía un omega.

-Creí que eras la víctima, pero solo me llamaste para que deje a mi esposo, el cual no estuvo interesado en algún omega hasta que me vio- Ella volteo su mirada.

-Nos acostamos.

-Bien por ti.

-No, ahora, no tiene mucho, hace unas horas- Fruncí mis cejas, ella me entrego su celular, mire bien el video, tenía ganas de llorar, mi vientre dolió un poco.

¿Era el?, su cabello negro, su piel, la manera en cómo estaba, me recordaba a él.- No te creo- hable.

-Es el, no seas iluso, Alek solo quiere tener hijos por lo que dejara miles regado, tiene un buen rostro y cuerpo, más de eso es millonario y para hacerlo mejor es un alfa dominante, tiene todo lo que quieres, puede irse con miles de personas, a él no le importa.

Seguía observando el video, sin embargo, algo llamo mi atención, el alek del video no tenía un anillo, tampoco un reloj, el reloj podía sacárselo, pero el anillo solo se lo sacaba para dormir, tampoco tenía los arañazos de anoche, Samantha recién se los hacía.

-Entiendo. - Sonreí.

-Estorbas en esta relación.

-Tal vez- me levante, ya no quería escuchar nada de ella, mi vientre estaba doliendo al igual que mi corazón- Samantha, solo déjanos tranquilos.

-No, tu-

-¡NO!, ¡SE ACABO! - Me estaba estresando esta mujer- ¡YA DEJA DE METERTE CON MI MARIDO!, ¡ESTAMOS CASADO Y PRONTO SEREMOS PADRES!, ¡DEJA DE SER UN ROMPEHOGARES!, ¡UNA CUALQUIERA!, ¡UNA ARRASTRADA! - La gente alrededor nos miraba.

-Has silencio, me estás haciendo quedar mal.

-¡No me importa!, no me importa si miles de personas escuchan esto, estoy cansado de ti, Alek ni siquiera te mira, solo piensa en ti como su secretaria, incluso puede mirar a otras personas, pero a ti ni siquiera te podrá besar, eres alguien asquerosa y fea.

La palma de su mano se estrelló en mi cara y yo estrelle mi puño- Eres un mal agradecido, ¡te estoy abriendo los ojos.

- ¡Solo estas siendo irritante! - ella jalo mi cabello.

"¿Que sucede?, no sé, la amante le vino reclamar al esposo" "¿se están peleando por un hombre?".

Quería golpear a todo el mundo, levanté mi puño y lo volví a estrellar

-¡Manjiro!- La voz de Alek me hizo empujar a Samantha.- ¿Qué crees que haces?

Corrió hacia mí, Toru y Abi estaban a su lado, mire a Abi y esta me aparto la mirada- Te dije que no le dijeras donde estaba- Apunte a Abi.

-Publicaron una foto tuya peleando por las redes sociales- Mire a Toru- Sales..enojado- me enseño la foto, la gente nos miró.

-Alek- la voz de samantha hizo que todos la miráramos- Tu esposo es un idiota- Tenia sangre en la cara y al parecer la nariz dañada. - Mira lo que me hizo...

-Mikey, le partiste la cara- Abi sonreía, pero cuando Toru la miro dejo de reír.

-Samantha, anda a un hospital- ella se acercó a Alek pero lo abrace.

-Mi vientre me duele- susurre, no era mentira, si me dolía- Me duele demasiado- Abi nos miró, Alek rápidamente me agarro en sus brazos y salimos del lugar, la gente seguía mirando, pero era lo de menos.

Subí al carro, Abi a mi lado diciéndome que me tranquilizara, pero ella estaba más nerviosa que yo, Toru pidiéndole a Alek que fuera tranquilo pero rápido.

Estaba comenzando a tener sueño.