Extra: Alek como omega 2/2

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- ¿Ahora somos pareja? - Mikey me miró.

-Suéltame primero hijo de perra- Había pasado un mes desde que conocí a Mikey.

En todo este tiempo solo lo estuve molestando y utilizándolo para mi bien, Mikey decía que éramos novios, pero le decía que aun no.

Hermano de Shinichiro= posiblemente infidelidad también.

Y no me iba a dejar ver la cara de bobo dos veces.

Ahora me había invitado a cenar, todo estuvo bien, solo hasta que me llevó a una habitación y me amarro.

-No te soltare hasta que me digas que somos pareja.

-Solo estemos como si nada, no es necesario ser novios- Giré mis ojos y comencé a moverme intentando soltarme.

-No me gusta eso, quiero que seas mi pareja, si no, no te suelto.

Sabía que él también quería molestar a Shinichiro, el me lo dijo; "Te utilizare y le demostraré a mi hermano que no todo lo que él quiere lo tiene", le dije que no me importa y me fui, pero ahora quiere amarrarme a él.

- ¡Bien como quieras, somos pareja ahora suelta que me duelen las manos! - Mikey me tenía sin camisa y solo en bóxer, él estaba sin camisa, no tenía una erección justo ahora solo porque estaba enojado.

-Me alegra mucho que tomaras esa decisión, de lo contrario no sé qué haría.

Apreté mis labios, ¿Que se cree ese idiota?

Mikey se acercó a mí, se puso de rodillas frente a mí, con su dedo índice levanto mi rostro para que lo mirara, mi cuerpo quedó en medio de él, su miembro estaba frente a mi rostro, mis manos atadas levantadas y nuestros ojos mirándose.

Trague fuerte, esta posición de alguna manera me puso caliente y más por el hecho de que Mikey me miraba con un rostro serio, sus ojos rasgados lo hacían ver sexy.

Parecía un zorro.

Abrí mi boca para decir algo, pero las palabras no salían, Mikey metió de manera lenta su dedo pulgar, comenzó a estirar un poco mi boca, su dedo presiono mi lengua para luego moverla.

El contacto visual no se rompía, bajé mi mirada, lo primero que vi fue un bulto en sus pantalones- No quites tus ojos de mí.

Levante nuevamente la mirada, Mikey bajo su otra mano a su erección, se escuchó el ruido de la cremallera de su pantalón, sentí la punta de su miembro en mi barbilla, saque mi lengua y baje un poco más mi cabeza para poder meterlo en mi boca sin embargo Mikey jalo mi cabello.

-Aun no te he dado permiso de que hagas eso.

-No necesito tu permiso.

Ambos sonreímos, queríamos demostrar que dominábamos, sin embargo, solo uno podía hacerlo.

Mikey siguió moviendo su dedo en mi lengua para luego sacarlo y pasar la saliva que tenía este sobre la punta de su miembro, lo agarro con una mano y comenzó a mastúrbalo.

Sentí su punta en mis labios- abre la boca- La abrí y lo metí dentro de mí, comencé a mover se mi cabeza, necesitaba usar mis manos, pero este no me soltaría.

Me sentí tan sumiso acatando su orden.

Me gustaba, pero no me gustaba que me dieran órdenes.

Comencé a darle una oral a mi manera, aunque él quería guiar mis movimientos de cabeza no lo deje.

Escuchaba los jadeos y gemidos de Mikey, el echaba su cabeza hacia atrás cada vez que intentaba meterlo hasta el fondo, su mano tenía mi cabello, saque su miembro para poder reposar ya que mi garganta dolía sin embargo él no me dejaba, más de eso lo metió hasta lo profundo de mi garganta arrancándome un gemido y lágrimas.

Sentí su semen explotar en mi garganta él lo saco y yo empecé a toser-No seas animal.

-Creí que estabas acostumbrado a los penes grandes.

-Si, pero no he tenido uno en mucho tiempo- A Mikey se le borro la sonrisa.

Mikey soltó el agarre de mis manos, creí que estaba libre pero solo soltó la soga que levantaba mis brazos.

El rubio me tumbo boca abajo en la cama, golpeo mi trasero haciéndome gritar, me intente girar, pero él no me dejó.

-Cuando estés conmigo no recuerdes a nadie más.

-Tu preguntaste- Mikey levanto mis caderas para luego bajar el bóxer, se escuchó una risa.

- ¿Te mojaste con solo darme una mamada? - Sus feromonas empezaron a salir, mi cuerpo empezaba a sentirse más calientes.

Sus dedos se metieron en mi agujero con facilidad gracias a la lubricación que daba este. - Mis dedos entran con toda facilidad.

Uso su lengua haciéndome estremecer entre las sábanas, mis manos encima de mi cabeza y yo en ningún momento las baje.

Se levanto para luego abrir un poco mis piernas -Alek- Gire mi rostro-Verte de esta manera solo hace que se me ponga más dura.

Su miembro entró en mí, apenas tocó fondo empezó a moverse, solo disfrute de cómo me follaba, lo estaba disfrutando.
Su mano apretó mi miembro para luego masturbarlo, le dije que lo dejara, pero este no hizo caso y terminé viniéndome en su mano.

Él sonreía cada vez que hacía algo que le gustaba, llevo su mano a su boca para probar mi semen luego de eso me beso. - ¿Que tal sabe tu propio semen?

-Enfermo de mierda.

Su pelvis golpeo con fuerza mi trasero golpeando un punto exacto que hizo temblar todo mi cuerpo.

Dejo su miembro quieto, solo disfruto de los espasmos que daba mi agujero, lo escuchaba gemir y balbucear varias cosas sin sentidos.

Las marcas las dejo en zonas visibles evitando mi espalda sin embargo luego solo dejo marcas en cualquier zona que alguien pudiera ver.

-Alek, Alek...ah..joder, te sientes increíble- Gimió contra mi cuello.

El observaba como me dejaba; mi boca con algo de saliva por los pocos besos que me daba o cuando me metía sus dedos intentando hacer que mi cuerpo trabajara por completo para él y solo para él.

Mis ojos húmedos por las veces en las que golpeaba un punto que me hacía retorcer.

Mikey era un monstruo en la cama y lo peor de todo que me gustaba la manera en cómo me trataba.

Y el sabía que me gustaba.

- ¿Mi hermano no pudo darte todo esto? - Lo único que salían de mi boca eran gemidos, a él no le importaba que no hablara, con que gimiera le contentaba - Dime alek, ¿Te gusta? - Su mano apretó uno de mis pezones -Claro que si, por como estas y como tu agujero aprieta mi pene, dudo que esto no te esté gustando.

-Me voy a venir...- Mikey dejo un beso en mi cuello para luego venirse al par mío.

Salió de mí, soltó el agarre que tenía mi mano y me dejó en la cama, lleno de marcas y cansado. -Te ves hermoso, es una pena que Shinichiro no apreciara bien esto.

-Solo cállate y déjame dormir- Mikey  se acostó a mi lado, arropó mi cuerpo y me acerco a él.

Luego de ese día comenzamos a hacerlo más seguido, se enojaba y lo hacíamos, Shinichiro me hablaba cuando iba a su casa él se enojaba y lo hacíamos.

Mikey era alguien posesivo, no era Celoso, le daba igual que yo hable con chicos, sin embargo, se encargaba de marcar territorio cada que alguien pensaba tener oportunidad conmigo.

De alguna u otra manera me acostumbre a él.

Shinichiro quería intervenir, pero Mikey siempre le dejaba en claro que no tenía oportunidad, el disfrutaba humillándolo y recordándole su lugar.

Después de todo Mikey era un dominante.

-Te amo Alek- Susurro mientras me abrazaba.

Ya me había acostumbrado a el.

No solo acostumbrado, Mikey logró enamorarme, aunque se tardó demasiado.

-Yo también te amo, Mikey

Mi Destinado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora