Mi Destinado.

EXTRA; Muerte de Alek.

Los hospitales.

Son algo que nunca me gustaron.

En especial cuando se que alguien que quiero esta aquí.

-Toru- Grite cuando el ascensor se detuvo en el piso acordado, después de que el me dijeron que Alek estaba en el hospital solo salí corriendo sin que me importara nada.

-Mikey.- La madre de Alek estaba ahí, llorando, todo esto me estaba molestando.

¿Que hace ella aquí?.

Toru se levanto para ir hacia ella pero Abi lo detuvo - No hagas nada, esperemos al doctor.

Luego de lo que parecían ser horas la puerta de la sala en donde estaba Alek se abrió.

Deje de sentir mi corazón later, me dio un dolor demasiado fuerte.

Comencé a llorar y mis feromonas comenzaron a liberarse.

Muerto.

Sentí que algo dentro de mi se había ido, Abi me abrazo fuerte, yo la miré, quería hablarle pero no paraba de llorar.

-Lo sentimos mucho- Sentí una presión mayor en el pecho.- El...bueno...el falleció.

Toru se acercó a la madre de Alek y la golpeo, una y otra vez hasta que el doctor pudo separarlo.

-¡ES TU CULPA!, ¡TU MALDITA CULPA!, ¡TU LO MATASTE!, ¡MATASTE A MI MEJOR AMIGO!- Toru no paraba de llorar y yo sentía que me moriría en cualquier momento, me desplomaria.

La madre de Alek lloraba, Sofi estaba perdida, como si fuera mentira.

Y yo pensaba que era un sueño.

●○●○●.

Los llantos de las personas, en especial las de Takeda, miraba la tumba en donde Alek estaba.

Yo me encontraba desorientado.
La marca se esfumó, después de todo cuando el Alfa muere la marca se borra, o cuando el omega muere.

La madre de Alek fue arrestada, Toru no estaba aquí, Abi lo tenía en su casa ya que se había vuelto violento.

El entierro no duró mucho, después de eso me fui a la casa.

Una casa enorme en donde ahora viviría con Sofi, pero por estas semanas solo.

Al llegar solo llore, llore hasta que mis ojos dolieron, lo quería aquí.

Pasamos tan poco tiempo, pero fue hermoso, se que tuvimos esa pelea pero íbamos a tener una familia.

Íbamos hacer padres y todo se fue a la mierda.

Me dirigí hacia la habitación, al entrar jure verlo acostado, sonreí y me tire a su lado.

-¿Donde estabas?, te estaba esperando- Susurro mientras me abrazaba.

-Soñe que te habias muerto- Abrace su cuerpo.

-No fue un sueño, Mikey, desde ahora tendrás que se fuerte -Abrí mis ojos rápidamente, no abrazaba a Alek, abrazaba una cobija junto a una almohada.

-¿Porque me dejas?- Susurre mientras me hacia bolita- Juntos por siempre Alek...

Comencé a llorar hasta quedarme dormido.

Y la semana fue así.

Lo veía en la cocina o en algún lugar de la casa, incluso a mi lado, pero cada vez que lo tocaba desaparecía y yo lloraba.

Miraba el atardecer, el estaba a mi lado -¿Hermoso, no?, es igual a ti- Sonrei.

- El bebé nacerá en un mes, ¿Que nombre le ponemos?..

Sofi me miraba, sabía que estaba mal, su muerte me dolió tanto que comencé imaginarlo.

Solo quería aliviar mi dolor.

El no se habia ido, yo lo veía.

-Lyli.

Intente agarrar su mano para el desapareció.

Mis lágrimas salieron - ¿Porque cuando lo toco se va?.

-Joven Mikey, déjelo ir.

-El no se ha ido sofí, él está aquí- Ella me abrazo.

Yo no era el único que la estaba pasando mal.

Toru, dejo de comer, y si lo hacía solo era poco.

A mi me arrebataron al amor de mi vida, pero a él le habían arrebatado su otra mitad, su alma gemela.

Decía que veía a Alek y eso lo hacía feliz haciéndolo comer en ocasiones, pero luego solo dejaba de hacerlo.

Abi seguía con el pero sus padres iban a meterlo a un hospital.

-Debería verlo ahora- Susurre.

-Puedes verme siempre que quieras.

-Quiero tocarte.

-Sabes que no puedes, solo me permiten verte.

Me acurruque- Te amo Alek.

-Yo también, pero Leo- el se acerco a mi- Debes dejarme ir, no puedes tenerme aquí para siempre, necesito llegar hacia mi abuela.

-No quiero, no desaparezcas.

-Lo siento, pero necesito irme- Dejo un beso en mis labios y desapareció.

Después de eso solo lo vi en mis sueños.

Con Lyli nació su primera palabra fue "Papi".

Debía de ser "Mami" pero no.

No volví a comprometerme, solo cuide a mi hija y espere la vejez hasta que me tocara la hora de irme con el.

Porque aunque busque la manera de irme antes, el no me dejaba y no podía dejar a mi hija sola.