Just a silly crush {Jinkook}

Capítulo 2.

Kim Seokjin paso toda la mañana con la cabeza en las nubes, ese día no pudo concentrarse en lo más mínimo durante las clases, lo que no era nada común en él, quien, quizás no tenía notas perfectas como sabía deseaban sus padres, pero sus notas seguían siendo bastante buenas, después de todo tenía unas cuatro personas detrás de él, asegurándose de que entendiera todo lo que debía entender. En primer lugar estaba su hermana melliza, Kim Heeyeon, que siempre le ayudaba en las clases de literatura, aunque siendo sinceros en esas clases no necesitaba tanta ayuda, después estaba un hyung que ya se había ido a la universidad, Kim Junmyeon, que siempre que podía le daba tutorías de matemáticas, en tercer lugar, su mejor amigo Lee Junghwan era una especie de recordatorio general de tareas y quehaceres, pero sobre todo, lo mantenía en forma para seguir cumpliendo con su rol en el club de futbol, bien, a Seokjin no le encantaba dicho deporte, aun con eso se dejó arrastrar al club por su mejor amigo un año atrás, ahora ambos eran titulares del equipo de la escuela. Finalmente, la cuarta persona que se encargaba en definitiva que entendiera las clases de química, física o cualquier cosa de ciencia, era su hermano mayor: Kim Seokmin.

Ah, Seokmin, primogénito de la familia y el hijo perfecto, detrás de él, Seokjin y Heeyeon lo tenían difícil para impresionar a sus padres, por suerte para ellos, sus padres no estaban tan obsesionados con notas perfectas o logros seguidos de sus hijos, pero claro, ya que el mayor de los tres no siguió los pasos de ninguno de ellos, pues Kim Seokjung era un reconocido cirujano en el hospital general de la ciudad, y Kim Hee-sun era una excelente arquitecta, ambos padres se encontraban deseando que alguno de sus hijos siguiera sus pasos, y como Seokmin se desvió para seguir su verdadera vocación, sus esperanzas quedaron sobre los mellizos.

Heeyeon en realidad, si estaba interesada en convertirse en doctora en el futuro, quizás no en la misma rama que su padre, pero ya se encontraba estudiando temas de medicina para la universidad, de ahí que sus notas fueran casi perfectas. Seokjin por otro lado, él seguía fluyendo con la corriente, no demasiado interesado en que hacer más adelante.

A la mitad del tercer periodo del día, después de la clase de química con el profesor Park, los chicos del aula se prepararon para ir a sus actividades de club o taller; Junghwan se puso de pie tan pronto como el profesor salió, estirando los brazos y agradeciendo que el sufrimiento terminará, Seokjin por otro lado, guardo sus cosas en silencio, asegurándose de no dejarse nada, porque la última vez que tuvo tanta prisa para irse del aula, se olvidó la mitad de los cuadernos bajo el pupitre y tuvo que regresar después de cansarse al punto de desmayo de las practicas del club.

El par de amigos se encamino a los vestidores sin decir demasiado, cada quien, con distintos pensamientos en la mente, aunque siempre saludaban a sus conocidos por el pasillo, en especial a Seo Jeonghwa, la casi novia de Junghwan, o al menos era lo que decía Seokjin todo el tiempo, porque era obvio que ese par estaba coladito uno por el otro, pero no hacían nada para ser algo más. Tampoco iba a meterse en eso, no tenía ningún derecho de hacerlo.

—Oh, escuche por ahí que los chicos de secundaria van a tener que preparar un pequeño festival en la semana. —comentó Junghwan una vez que estaban cambiándose en los vestidores. Sus casitas estaban en lados opuestos, así que no se estaban viendo.

—¿Dónde escuchaste eso?, no es como que esos chicos se acerquen mucho a nuestras aulas. —Seokjin no tenía demasiada curiosidad por lo que los chicos menores pudieran preparar, pero si por donde escuchan esas cosas Junghwan y Jeonghwa, ese par siempre estaba enterado de todo lo que pasaba en la escuela.

—Jeonghwa-ssi me lo comentó, dice que lo escucho mientras iba a dejar unos cuadernos a la sala de profesores.

—Hm, bueno eso tiene bastante sentido, ¿ella es la encargada de su salón, no? —Seokjin no hablaba demasiado con chicos de cursos distintos, así que no conocía a tantas personas del primer año, o del tercero, aunque entre los chicos de su mismo curso no podía contar a sus conocidos con las manos.