30 Days of Baffy!

「🦆」Día 12 - Dando regalos.

¡El cumpleaños de Daffy era hoy!

Y por supuesto, Bugs tenía todo cubierto.

Una fiesta sorpresa; ¡Nada mejor que eso para festejar a su novio! ¿Verdad?

Le pidió de favor a Porky llevárselo a un parque de diversiones mientras terminaba de arreglar PizzaArriba, siendo ayudado por Speedy, Tina, Lola y Gossamer.

— Muchas gracias por ayudarme, chicos.— Dijo el conejo sobre una silla, colocando la pancarta que rezaba 'Feliz cumpleaños, Daffy'.— A él le encantará.

Speedy iba y venía, trayendo las pizzas y platos, mientras que Lola inflaba globos.

— Es un placer, Bugs.— Dijo Tina.— Estoy segura de que Daffy amará esto, le encantan las cosas que tienen su rostro.

Miraron a su alrededor; fotos del pato por todos lados y una pequeña estatua de hielo.

Bugs sonrió.
Su novio era un completo narcisista.
Pero así lo amaba.

— Señor Bugs, ¿A dónde fueron el señor Porky y el señor Daffy?— Preguntó Gossamer, pasándole un par de serpentinas.— Espero no se demoren mucho, la comida podría enfriarse y mi mamá no me dejó estar tan tarde.

El conejo negó con la cabeza y tomó la pieza decorativa.

— No deben tardar mucho, Gossamer, no te preocupes.

El mayor dio un par de golpecitos en su cabeza, haciendo sonreír al pequeño monstruo.

— Oye BonBon.— Se acercó Lola sujetando un globo.— ¿Qué hago con esto?
— Bueno, ¿Por qué no inflas otro?
— Otro... ¿Quieres que haga figuras con los globos?
— No es lo que...
— Bien, eso haré, soy muy buena con las manos, ¿Verdad, Tina?

La rubia se ruborizó, desviando la mirada.

— Eh, sí, es... Buena con las manualidades.
— ¡Sí, exacto!— Exclamó.— La otra vez hice una casa de jengibre y nos la comimos toda, ¿Cierto, amor?

Aliviada por su inocente respuesta, suspiró.

— Sí, exactamente, eso.
— Bueno, ¡Denme el paquete de globos!

El conejo tomó la bolsa, pasándoselo a la más baja.

— Gracias, BonBon.— Volvió a su lugar.— Hora de poner manos a la obra... ¿O a los globos?

Tina rió.

El teléfono de Bunny sonó, dejando de esparcir las serpentinas por el lugar para contestarlo.

— ¿Alóh?— Preguntó.— ¿Porky? ¿Ya vienen para acá? Entiendo, entiendo, muchas gracias.

Colgó, moviendo las manos para atraer la atención de los presentes.

— Chicos, están a nada de llegar, escóndanse y apaguen las luces.

Todos acataron la orden, Speedy apagó las luces y siendo Lola la única que tuvo que ser arrastrada por su esposa, pues se rehusaba a dejar de intentar formar un perro con los globos.

Escucharon la campanilla del local sonar.

— ¡Eres un avaro, Porky!— Exclamó el pato.— ¡Me muero de hambre! ¡¿Por qué no me dejaste comprar ese pretzel gigante?!

— Po-Po-Porque después no tendrías hambre, Da-Da-Daffy.

— ¡Ahora muero de hambre, y este sitio no parece abierto! ¿Por qué me trajiste aquí? ¡Exijo hablar con Speedy...!

— ¡SORPRESA!

Gritaron al unísono y salieron de sus escondites; el ratón encendió las luces y le arrojó conffeti en el rostro, riendo.

— ¿Una fiesta...? ¿Para mí...?

Daffy esparció la mirada, impresionado por la decoración, estaba justo como lo deseaba; con él en todas partes.

— No nos agradezcas a nosotros.— Habló Gossamer.— Fue idea del señor Bugs.

Duck dirigió su mirada a su novio, viéndolo sonreír.
Sin pensarlo dos veces, se acercó corriendo y lo abrazó con fuerza.

— Muchas gracias, Bugs.— Dijo.— Sí que sabes cómo sorprenderme.

El conejo negó y se separó, besando su pico.

— Eso no es todo, espera...

Caminó hasta la mesa donde la comida estaba puesta y, debajo de esta siendo cubierta por un mantel, sacó una caja de regalo, dándosela a su novio.

— Ábrelo.
— Eres tan... ¡Trae acá!

Con entusiasmo y desesperación, abrió la caja, alzando las cejas y gritando, emocionado.

— ¡No puede ser!— Dio un par de saltos, abrazando con fuerza a su pareja.— ¡Bugs, es un bolso Gucci color beige! ¡¿Cómo supiste que lo necesitaba?!
— Tú me lo pediste.— Rio.— Pero ábrelo, te gustará lo de adentro.
— ¿Hay más?

Asintió.
El emplumado se separó, abriendo el bolsillo principal, sacando una pequeña imagen, cubriéndose la boca, sintiendo cómo las lágrimas resbalaban de su cara.

— Bugs, esto...
— Se lo pedí a Sam.— Dijo.— Aunque no lo creas, tiene talento como artista.

El pato volvió a abrazar a su novio, besándolo de manera tierna.

— Te amo...

Ruborizado por los "owww's" de sus amigos, Bunny correspondió.

— Yo a ti.
— ¡Vivan los novios!— Exclamó Speedy.

Lola corrió hacia ellos, mostrándoles un globo que llevaba la forma de un gato.

— ¡Les dije, era buena con las manos! ¡Hice un perro!
— Cariño, ese es un gato.
— ¡Lo que sea, los dos tienen cuatro patas, Tina!

Rieron, mientras Daffy guardaba con cariño la imagen que retrataba algo hermoso;

Él y Bugs abrazados.
Y encima de ellos, su abuela abriendo sus brazos desde el cielo, sonriente.