Capitulo 29- Final

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Después de llorar toda la noche, a la mañana siguiente me levante y baje para tomar el desayuno. Al bajar las escaleras vi a mi padre pero solo le ignore y seguí hacia la cocina. Escuchar de la propia boca de mi padre que prefiere que perdiera a mi bebé fue lo peor que pudo haber dicho y yo me enterara. Me siento muy mal por todo esto, ni siquiera puedo mirar a los ojos a Kwangmin porque siento que lo ofendo. Mi propio padre me ha ofendido, me ha hecho sentir una basura por no cumplir sus expectativas. Kwangmin ha tratado de hablar conmigo toda la mañana pero solo respondía un poco distante. Cuando llegó la hora del medio día mi padre no vino almorzar a la casa, solo vino mi hermano. Jason notaba el ambiente raro y trato de preguntarme pero no quise responderle. Luego que Jason se fue de regreso al trabajo, salí a caminar por la calle sin rumbo. Mi madre me llamo varias veces al teléfono pero no quería responder. No quiero hablar con nadie, quiero estar sola donde nadie me moleste. Ya un poco cansada me regrese a la casa, subí y me encerré en la habitación. Kwangmin me siguió hasta la habitación, se acostó al lado mío y seco mis lagrimas que salían con facilidad.

Kwangmin: ¿Qué te pasa? —pregunto

Kristal: No es nada —respondí — solo estoy sentimental —alegue

Kwangmin: No es cierto —acertó —dime la verdad de porque estas tan triste desde anoche —pregunto

Kristal: Si hubiera abortado cuando Eun Yoon... —pregunte tras ser interrumpida por Kwangmin

Kwangmin: No hablemos de eso —dijo notablemente enojado

Kristal: Te necesito —dije

Kwangmin: Y yo a ti —respondió —pero dime qué te pasa —volvió a preguntar

Kristal: Prometo decirte cuando me sienta mejor — prometí

Kwangmin estaba preocupado y al ver que no respondía lo que preguntaba, reacciono un poco molesto. Se levanto y expreso su notable enojo después que salió de la habitación. Me quede en la habitación sola y llorando desconsoladamente, pero como le digo que mi padre deseo la muerte de nuestro bebé. No quiero que la relación entre mi padre y Kwangmin empeore, quiero decirle pero no sé cómo. Mis pensamientos iban y venían, en mi cabeza rebotaba una y otra vez las palabras de mi padre haciendo que llorara con más fuerza.

-NARRA KWANGMIN-

Cada vez que se pone así es porque se siente muy triste, pero porque no me dice que es lo que la tiene así. Camino dos pasos y la escucho llorar mientras me llamaba. Entro de regreso y la vi sentada en la cama llorando. Me acerco y me abraza con mucha fuerza.

Kristal: Escapemos y vivamos felices —expreso

Kwangmin: ¿De qué hablas? —pregunte

Kristal: Ya no me interesa registrar mi matrimonio — expreso

Hace unos meses si quería y ahora no quiere, para que entonces me hizo venir hasta acá y hacerme pasar malos ratos con su padre. Me empiezo a sentir irritado por su actitud, no quiero tratarla mal por lo que la deje acostada en la cama y salí a dar un paseo. Al regresar la madre de Kristal me ofreció comer con señas pero no quise. Subí y al entrar a la habitación se había quedado dormida. Se notaba muy triste incluso si está durmiendo.

-DIAS MÁS TARDE: NARRA KRISTAL-

Mi padre no ha pedido disculpas por su comentario y solo lleno un papel donde autorizaba mi matrimonio con Kwangmin. Mi relación con mi padre se rompió desde aquella noche, no puedo verle la cara y mucho menos dirigirle la palabra. Mi madre sufre por esto pero no puedo perdonar lo que dijo. Después que mi padre me entregó el papel firmado el se regreso al trabajo y yo procedí a buscar los papeles que necesitaba para poder registrar mi matrimonio. Salí en compañía de mi madre y durante el camino trato de convencerme que perdonara a mi padre pero en verdad no puedo. Ignore todo lo que mi madre me decía y las excusas que podía decir para defender a mi padre, pero ya no soy una niña que se cree todos los cuentos. La tarde avanzo y después de un largo día de buscar y solicitar papeles me regrese a la casa. Estaba muy cansada, Natalia había preparado la cena y luego se fue, luego nos sentamos a comer. Durante el tiempo que estuvimos allí no le dirigí la palabra ni tampoco mire a Kwangmin. Mi madre le hablaba de vez en cuando y sin remedio tenía que traducir lo que decía, pero adicional a eso no le decía nada. Subí a la habitación, me bañe y luego me acosté en la cama. Luego que Kwangmin se baño y se acostó en la cama dándome la espalda me acerque a él y le abrace tomándole por su pecho y apoyando mi frente sobre su espalda.

You are not a bad girlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora