Capitulo 2

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Al siguiente día seria el que vería nuevamente a Jeidy y Alexis. No quería ir a la universidad, así que pedí a mi madre que me acompañara al salón de belleza. Me hice un cambio de imagen, de mi larga y hermosa cabellera, lo corte corto con flequillos muy originales y distintos. Mi madre me noto extraña pero no me dijo nada aunque lo insinuaba con algunos comentarios. Yo simplemente no quería decir nada, me calle todo mi coraje y dolor que sentía, quizás me hacía daño yo misma por llenarme de odio, pero solo quería desquitarme todo. Una semana más tarde, regrese nuevamente a la universidad. Llegaba mas tarde de lo habitual a clase, me volví algo fría y distante. Todos me hablaban y me molestaba escuchar sus voces, no miraba a Jeidy ni Alexis, no sé como ellos tenían la valentía de mirarme y tratar de hablar conmigo, pero me callaba todo lo que pensaba y sentía. En la clase de creación teatral, donde haríamos la obra, el profesor llego y anuncio que se elegirían los actores principales.

Profesor: Hoy haremos la elección de los personajes — anuncio mientras yo alzaba la mano —Si, Kristal — respondió a mi interés por participar

Kristal: Profesor —le llame — Si no tienes en quién votar para los personajes, podemos votar por uno mismo —le pregunte muy seria y firme.

Profesor: Si — aclaro —Aquellos que no tengan  a alguien que recomendar se pueden recomendar así mismo —volvió a aclarar

Entonces el profesor prosiguió por repartir unos papeles para elegir a los personajes. Todos copiaban y se notaba un poco la ansiedad entre mis compañeros. El profesor recogió las hojas y dejo el salón con instrucciones que en la próxima clase dirá los resultados. Entonces me levante y me dirigí a la salida, cuando se me acerca Jeidy y me saluda como ella suele hacer, pero respondí indiferentemente. Seguí mi camino y sin decir nada me dirigí a mi próxima clase. Jeidy me siguió todo el camino, pero me dedique en rechazarla. En ese momento Jeidy se enoja, me toma de un brazo y me detiene.

Jeidy: ¿Qué te pasa? — me pregunto

Kristal: Nada —respondí con total indiferencia y seguí mi camino

No quería ver a esta falsa amiga, no sabía cómo actuar pero solo seguía lo que mi corazón decía. Me dirigí a mi próxima clase, entre al salón ya que no había nadie y llame a mi hermano.

Jason: Dime cabezona —me respondió

Kristal: Por favor, ven a buscarme — le dije un poco solloza

Jason: ¿Qué te pasa? — me pregunto con un tono preocupado

Kristal: Solo ven y búscame —le pedí insistentemente — no quiero ir a casa así, no quiero preocupar a mamá —le comente

Jason: Espérame ahí, no te vayas —me respondió — estaré ahí en unos diez minutos -culmino

Tome mi bulto, salí del salón, y entonces me encontré a Jeidy de frente a la salida del salón. Solo pude pedirle disculpa, y sin decir nada me marche hacia la salida de la universidad. Al rato de esperar, mi hermano vino a buscarme. Estuve callada en todo el camino, pero mi hermano sabía cómo hacerme hablar cuando no quería hablar con nadie.

Jason: ¿Has comido? —me pregunto en un tono simpático

Kristal: Desayune en casa —le respondí en un tono bajo y notablemente triste

Jason: Ya es casi medio día —me respondió — debes tener hambre, te llevare a comer —prosigue en responderme

Llegamos al restaurante, mi hermano estaciono el auto y nos bajamos. Entramos al restaurante y tomamos una mesa. Al rato nos atiende la mesera y nos da el folleto del menú para elegir el plato que comeríamos. Mi hermano me quita el menú y elije por mí una pechuga a la plancha acompañado con ensalada verde. Durante el tiempo que estuvimos comiendo no dije ni una sola palabra, y mi hermano trataba de crear conversación pero solo ignoraba lo que decía. Luego al terminar, me levante y sin decirle nada a mi hermano camine hacia el baño. Estaba tan enojada y frustrada que no sabía qué hacer con la situación ni con mi vida, que había resultado ser molesto todo lo que tenía. Me mire al espejo del baño y de mis ojos brotaron lagrimas, había tomado la decisión que para mi seria la correcta. Me seque las lagrimas y retoque mi maquillaje, salí y regrese a la mesa. Mi hermano me observo y luego que me siento, me toma de las manos.

You are not a bad girlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora