[🍊; La naranja]

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Las naranjas, un cítrico de lindo y vibrante color, una de las frutas con mayor aporte en vitamina C y A, fibra y potasio, ayuda con el estreñimiento y la anemia...¿pero a quién puede importarle eso? Las súper propiedades de aquella fruta solo eran importantes para Mingyu porque eran las favoritas de Jihoon.

Siempre que lo veía en los recesos o en el parque estaba comiendo una de esas y dejando un aura cítrico a -al menos- 3 metros, era impresionante como no se aburría de comerlas. Con solo pensar en pelarlas Mingyu ya sentía pereza y consideraba comer una manzana u otra cosa que no tuviera que estrictamente tener que quitarle la piel.

-Agh, odio esto—se quejó el castaño clavándole las uñas a una naranja.

-Huele a naranja—comentó Jihoon en cuanto entró al salón.

-¿La quieres? No puedo pelarla—el menor suspiró y en cuanto vio al pelinegro asentir con ganas le lanzó la naranja—Atrápala.

-Geniaaaal~ gracias Gyu~

Al darse cuenta que se había quedado sin comida se levantó para ir a comprar algo. Probablemente volvería con unas galletas o algo definitivamente no nutritivo.

~;✩‧₊˚

Se había quedado un rato de más en el patio de la escuela aprovechando que tendrían un receso largo, pero al volver a su salón para ver si podía dormir un poco ahí lo único que escuchó fue un "¡Jihoon hyung, atrape!" antes de que una naranja golpeara con fuerza sus partes nobles, haciéndolo botar todo el aire de sus pulmones, a la vez que sus galletitas caían al suelo junto con él hecho bolita.

-¡Vernon, te dije que no me la lanzaras!—Jihoon se acercó rápidamente al más alto—Ay Gyu...¿estás bien?

-No—respondió como pudo e intentando no llorar, se negaba a que lo vieran llorar—Es que me golpeó justo en la puntita.

-¿En la puntita?—el pelinegro se quedó pensando unos segundos y en cuanto captó pudo incluso sentir el dolor—OH, oh...uh...

-Mingyu hyung...—Vernon estaba claramente riendo—De verdad lo siento, no pensé que justo entraría usted...

-No te preocupes...estaré bien—finalmente el castaño se enderezó y se levantó, su dignidad estaba por el suelo, pero no le importaba ya—Iré al baño.

-Te acompaño...—Jihoon tomó del brazo al menor y ambos fueron al baño caminando a paso lento—Enserio lamento eso.

-No te preocupes...ya estaré mejor—le sonrió entre una mueca de dolor y entró a un cubículo.

Lo primero que hizo al estar solo en ese espacio fue gritar en silencio mientras apoyaba su cabeza en una de las paredes, todos esos "no te preocupes" estaban haciendo que el pene de Mingyu doliera aún más, pues claramente debían preocuparse de haberlo golpeado. ¿Qué pasaba si lo dejaban sin poder producir esperma? ¿Se quedaría sin sus futuros Mingyucitos? Él no quería quedarse sin sus Mingyucitos.

Aunque claro, siendo gay igualmente no podría, pero ese no era el tema.

-¿Estás gritando en mute?—al escuchar esto el castaño paró de inmediato.

-Eh...no, claro que no...

-Literalmente te vi gritando en mute—Mingyu quedó en blanco, ¿acaso podía ver a través de las paredes?—No tengo superpoderes...estoy aquí arriba, genio

«Wow, también puede leer mentes»

-¿Y se puede saber qué haces ahí? Pudiste haber visto mi Mingyucito por error.

-No te oí orinando así que supuse que te había pasado algo—Jihoon se alzó de hombros como si fuera normal subirte en el wc del baño de al lado porque no escuchaste orinar a tu amigo—Espera...¿pude haber visto tu qué?

-Mi nada, ya sal de ahí que quiero orinar—pero el pelinegro no se movía—Es enserio...

-Oh, lo siento—en cuanto se bajó Mingyu sacó a su amigo para poder orinar—Te quedó rojo...—pero el pipí no salió al escucharlo.

-¿¡QUÉ HACES AHÍ?! NO VEAS—como pudo intentó tapar a su Mingyucito.

-Quería asegurarme de que realmente estuvieras orinando y de paso, ver si te había quedado feo el pipí—nuevamente hablaba como si eso fuera muy normal.

-Bueno ya lo viste, ahora quiero orinar y no puedo si me miras...—habló un muy rojo Mingyu que intentaba no mirar al mayor.

-Bueno bueno, pero si me permites comentar...

Fue interrumpido—No, no te permito comentar.

-Uy, bueno señorita sensible—finalmente se bajó y el castaño pudo orinar tranquilo, pero mientras lo hacía escuchaba comentarios por parte de Jihoon.

«Si así suena el chorro cómo será la manguera»
«Joder nena, ¿estás haciendo pollo frito? Jaja es broma, pero enserio haces mucho ruido al mear, me gusta»
«Mi sonido favorito era la lluvia hasta que te escuché mear»

Y solo se calló cuando escuchó al menor terminar, lo que era un alivio para Mingyu. Pero cuando salió del cubículo otro comentario atacó.

-Es bastante grande—las neuronas del más alto demoraron un poco en conectarse, pero cuando lo hicieron, hasta sus orejas se pusieron rojas.

-Gracias Jihoon, lo tendré en cuenta—lavó sus manos—Cuando quieras puedes probarlo.

-Oh, ¿de verdad?

-...Supongo...eres raro—ambos se dirigieron al salón.

-¡JIHOON HYUNG, ATRAPE!—y nuevamente una naranja golpeó los genitales de Mingyu, haciéndolo caer otra vez al suelo en posición fetal.

-¡VERNON!—Jihoon se agachó a un lado de Mingyu—...¿Estás llorando?

-¿¡Y TÚ QUÉ CREES?!

-; ·˚ ༘♡ ·˚

Como siempre y cada vez que le sucedía una desgracia, Mingyu esperaba que solo fueran parte de sus fantasías.

Pero no.

Pues al entrar al salón efectivamente le llegó aquel proyectil naranja en la entrepierna y al contrario de en sus pensamientos, lloró...lloró bastante y apenas aquella fruta le tocó. Vernon definitivamente debía apuntarse al equipo de béisbol, porque esos lanzamientos no eran normales.

Incluso tuvo que retirarse a su casa pues apenas podía caminar.

Pero Mingyu intentaba verle el lado divertido al asunto, probablemente Jihoon se había comido una naranja que pasó por su pene...o al menos le había llegado en la cara a Vernon luego, pues el mayor se veía enfadado con él.

Todos los caminos [GyuZi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora