Todos los caminos [GyuZi]

[🌧; La Lluvia]

Jihoon amaba los días lluviosos, le encantaba poder quedarse en su casa disfrutando de un té calientito y una buena película. Y hoy pudo haber sido uno de esos hermosos días, de no ser porque la lluvia lo tomó por sorpresa cuando estaba comprando y en cuanto quiso entrar a su casa se dio cuenta que no había sacado sus llaves.

Por lo que rápidamente tuvo que pensar una solución, la cual fue tocar la puerta de su amigo con la casa más cercana, Mingyu.

Teniendo la suficiente esperanza de que el castaño estuviera despierto...o ya de plano que estuviera en su casa.

~;✩‧₊˚

Por su parte, Mingyu sí estaba y pensando que sería su padre quien tocaba -porque siempre se le perdían sus llaves y prefería salir sin ellas estando alguien en la casa- se levantó e importándole más bien poco estar sólo con ropa interior, abrió. Al fin y al cabo era su padre, ¿no? Lo ha visto sin la ropa interior de todas formas.

-Oh—al ver a Jihoon cayó en cuenta de su casi desnudez—Lamento abrir así pensé que eras...sabes qué, no importa, pasa que te mojas más.

Rápidamente Mingyu se puso una camiseta y le llevó un balde y una toalla a Jihoon.

-Quítate la ropa y déjala ahí...te traeré ropa mía y no te preocupes por mi hermana, no está en casa.

Jihoon asintió con la cabeza y en cuanto el más alto fue a su habitación comenzó a sacarse la ropa mojada, sintiendo bastante menos peso sobre su pequeño cuerpo, en cuanto se había sacado todo secó su cabello y cuerpo con la toalla y al final se la ató en la cintura para cubrir sus partes nobles.

-Aquí está la ropa auch—dijo Mingyu llegando con los ojos cerrados y chocando con un mueble.

-Gracias Gyu~—el mayor rió viéndolo chocar con más cosas y tomó la ropa, vistiéndose rápido—Ya estoy listo, puedes abrir los ojos.

-Vamos a mi habitación para que entres en calor, tengo un calefactor prendido—tomó la mano de Jihoon y el balde lleno de ropa llevándose todo a su habitación—Tienes las manitos realmente heladas...

Y con solo escuchar el "manitos" Jihoon sintió su cuerpo arder en fuego, le gustaban mucho aquellas actitudes del menor.

-Es que tuve que caminar bajo la lluvia desde el centro comercial—Mingyu se dio vuelta a verlo preocupado.

-Entonces es seguro que te resfriarás...—al llegar sentó a Jihoon sobre su cama y rápidamente sacó un secador para el cabello del mayor.

-Oh, no es necesario que lo hagas—el pelinegro sonrió, Mingyu solo hizo como que no lo escuchó y prosiguió a secarle el cabello.

-No quiero que te enfermes, solo es eso—estaba siendo tan delicado que el mayor casi se duerme ahí mismo.

-Te lo agradezco...de verdad—ambos se sonrieron.

Y como toda una ama de casa Mingyu tendió la ropa del mayor en sillas cerca del calefactor, así podría al menos llevársela seca.

-¿Y saliste sin tus llaves o qué?—preguntó el castaño estrujando con fuerza la ropa contraria, haciendo que sus brazos se vieran tonificados y en su cuello se marcaran sus venas.

-Eh...sí, las olvidé al salir—respondió desorientado por estarse fijando en los atributos del menor—Y mis padres no están...fueron donde mi abuela.

-Ya veo, mis padres también salieron, habían ido a comprar unas cosas de Hyunbin y menos mal no quise ir—soltó una pequeña risita y al haber terminado con la ropa se sentó a un lado de Jihoon—Sigues helado...—mencionó tocándole un brazo.

-¿Me abrazas?—el castaño se sonrojó ante la petición del menor y se puso detrás de él para rodearlo con sus brazos—Gracias~

-No es nada—susurró comenzando a hacerle pequeñas caricias por inercia.

-Gyu...

-Dime, Honnie—las mejillas del mayor se tiñeron de rojo ante el apodo.

-Me gusta tu compañía.

-Me alegro mucho de que te guste—una sonrisa inconsciente apareció en los labios de Mingyu—A mi me gusta también la tuya...aunque a veces me da nervios estar contigo.

-¿Nervios?

-Oh...pensé que sabías que me gustabas.

-¿Qué?

-Pensé que sería buena idea decírtelo así, lo siento.

-También me gustas, Gyu, de haberlo sabido antes ya seríamos novios—se quedaron mirando por un tiempo.

-Cheol lo sabía y como es muy cercano a Jeonghan y es tu amigo...bueno, no lo sé, solo pensé que ya lo sabías—Mingyu se alzó de hombros.

-Vaya...—Jihoon suspiró—¿Puedo pedirte otra cosa?

-Claro, lo que quieras—el castaño pensó que el tema ya había quedado zanjado y hablarían de cómo el mayor tenía frío o algo así.

-¿Me besas?—ambos se sonrojaron ante esto.

Mingyu no se la pensó mucho y tomando el rostro de Jihoon terminó uniendo sus labios, sincronizándose casi al instante.

******

Ya se habían acomodado en la cama, estaban acostados, aún abrazados besándose. Claramente ya ninguno tenía frío.

Pero por estar tan concentrados en sus cosas no escucharon que los padres y la hermana de Mingyu habían llegado, no hasta que la pequeña abrió la puerta buscando a su hermano.

-Mingyu, mamá pregunta si quieres ihhh—al verlos quedó perpleja, los chicos se separaron y la miraron asustados—¡MAMÁ, PAPÁ! MINGYU Y JIHOON SE ESTÁN BESANDO.

La niña salió corriendo hacia donde estaban sus padres, los chicos querían enterrarse vivos.

-; ·˚ ༘♡ ·˚

En realidad y para desgracia de Jihoon, Mingyu había aceptado salir con sus padres y su hermana, por lo que tuvo que caminar más para llegar a la casa de Jeonghan y refugiarse ahí. Teniendo que aguantar ser el violinista, pues el rubio estaba con Cheol.

Y se notaba que no pensaban separarse para hablar con él.

***

Terminó siendo como una fantasía de Jihoon y no de Mingyu, Loquísimo. 👀