Mi fuerza |Kyojuro Rengoku x lectora

Incertidumbre #2

Rengoku Kyojuro

Cómo cada atardecer lo pasaba en las montañas lejos de glicina, pues por allí es la entrada más sencilla al pueblo para los demonios, hace una semana del combate contra aquel demonio que logró infiltrarse, más que para mí no fue difícil pero la actitud de esa joven me intriga y a la vez me desconcierta, pues aunque no era necesaria una acción de gratitud lo que me golpeó fue su rechazo testarudo hacia mi. ¿Cómo es que sin siquiera haberla visto siento que me odia a muerte? ¿Que hice yo que causara esas riñas en contra de mi ayuda? ¿Acaso fue incorrecto el salvarla?. Negué para mi mismo al tener ese pensamiento, nunca es malo defender a un ciudadano de la muerte.

Mientras caminaba de regreso a casa el amanecer se hacía presente por el éste y con él el canto de la naturaleza mi cuerpo se relajaba, esperando que Senjuro no estuviese afligido por las actitudes de mi padre solo pensaba en que, ahora teniendo la idea de, la actitud de aquella chica era similar a la de mi padre.

-Kyojuro- volteando me encuentro con mitsuri ¿que hará ella por estos lados? -¿Como has estado?- Su cara sonrojada como siempre me enternecía y lograba quitar todo peso de mi.

-¡Muy bien mitsuri! ¿A que debo tu visita?- al llegar a la residencia Rengoku le ofrecí entrar más ella se negó sutilmente.

-El patrón me envió a buscarte, tiene una misión que quiere de la que te encargues personalmente- la mire pensando ¿ Y quien se quedará a cubrir mi lugar?- Yo te cubriré Kyojuro-sama- su respuesta me alivio pues puedo irme dejando el pueblo en buenas manos.

-¡Acepta quedarte en la residencia Rengoku! quédate todo lo que desees, informaré a Senjuro y a mi padre para que puedan acogerte de la mejor manera en tu estadía por el pueblo- su rostro se enrojeció tan fuerte que creo que está algo enferma -¿Te encuentras bien?- fue cuando aún más su cara se tiñó de un rojizo muy oscuro.

-E..ee si Kyo..juro sama- sonreí ante su acción de apartar su mirada y entrando platicamos sobre algunos detalles que la chica conocía sobre mi misión, una vez instalada  e informada de todos los detalles de protección al pueblo, informe a mi familia sobre todo y preparándome para ir a ver al patrón me encamine una vez más hacia el lugar al que se me fue encomendado.

......

T/n Agatsuma

-¿Como que tengo que ir donde un tal Patrón a aprender a matar demonios? ¡No es justo! ¿Porque tengo que hacer el trabajo de los que no hicieron el suyo?-

-T/N ¿culpas a los cazadores por no estar en el momento en el que a sabiendas de que no debías estar fuera de casa saliste aún sin el permiso de tus padres?- sus duras palabras me tocaron, pero no dejo de pensar el porque no hubo alguna ayuda para ese momento.

-Eso no explica el porqué nadie estaba para protegerlos- mi abuelo me miró molesto y suspiro.

-Hazme un favor y sigue los pasos de tu hermano, sabes muy bien lo miedoso que es y aún así es considerado uno de los más persistentes cazadores de bajo rango, y además él es tu hermano menor, Tú deberías ser su ejemplo-

-¡No es mi culpa que mamá me enviara con el tío Kyam a Europa cómo últimas palabras luego de lo qué pasó!-

-¿Podrías por favor complacer a tu querido abuelo? De verdad necesitas salir de aquí y defender lo que la familia Agatsuma ha guardado por tantas generaciones- asentí con molestia ¿Porque tenía que Zenitsu decidir irse? Si no hubiera sido por eso hubiésemos sido una familia normal como las demás. Entiendo lo que dice mi abuelo pero ¿porque tengo que ir si ya Zenitsu esta allá?. Fui a mi cuarto con pesar y luego de tomar mis cosas me despedí del abuelo, él dice que debo ayudar a mi hermano en la labor de la protección de las personas como lo hacia papá.

*Dos días de viaje después*

Por fin llegue a la hacienda en la que mi abuelo me dijo que me darían lo que necesitaba, al ver tan solo la entrada me asombre, es un lugar enorme y hermoso con mucha vegetación y sobre todo arboles de glicina. Realmente si Zenitsu vino aquí lo están cuidando bien por lo que me anime a mi misma a entrar al lugar del cual iba a tocar la puerta.

-¡Hola T/N San! Bienvenida a la hacienda del patrón, donde se reúnen los pilares de los elementos- incómoda di una falsa sonrisa y seguí a las 2 niñas con aspecto muy similar hacia donde sea que fuésemos, al estar en una especie de patio habían al menos 9 personas pero, no veía a Zenitsu y creí que podría encontrarlo aquí. Una vez allí las personas del lugar se posicionaron en una fila con reverencia a alguien que no lograba encontrar y allí fue cuando vi a ese señor, de extraño aspecto.

-Ven por aquí T/N sama- al ser mencionada fui a su lado sintiendo por alguna extraña razón un reconfortamiento y una paz en mi corazón. -Seguro te preguntarás porque fuiste elegida al igual que tu querido hermano-

-Asi es-

-No hables cuando el maestro no te lo diga- el chico que tenía una cicatriz en la frente y cara maniaca me asusto, su cabello blanco alborotado lo hace ver aún más aterrador.

-Tranquilo Sanemi, como te decía T/N tienes un don especial que tú abuelo nos ha compartido así como lo ha hecho el chico del rayo- su voz era tan cálida que me sentía completamente en paz. -Desde hoy, estarás siendo entrenada para que puedas formar parte de ese legado tan hermoso de cuidar a los demás, siendo la aprendiz del pilar de la flama, Rengoku Kyojuro- al verlos a todos uno en particular llamo mi atención y en ese instante lo reconocí.

-¿Enserio tú de nuevo?- al ver su distintivo cabello rubio con mechones rojos bufé incomoda ¿él será mi maestro?

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Hehehe que chulo