𝑺𝑬𝑽𝑬𝑵𝑻𝑬𝑬𝑵 [One Shots]

MITOLOGIC AU 2 🏛️

─¡MINJU! ─la voz de Jeonghan se escuchó hasta en el Olimpo.

Dionisio golpeó su frente con decepción mientras negaba con la cabeza varias veces, viendo como la pelirroja evitaba que una oz gigante cortara la cabeza del joven.

─Es un inútil ─se quejó Dionisio.

─¡Vamos hijo! ¡Aplastalos! ─exclamó Ares desde su silla─. Mi Mingyu es maravilloso.

El Dios de la Guerra observó cómo su hijo utilizaba una gran espada para cortar unas gruesas ramas con espinas que aparecieron del suelo.

─Chan no se queda atras ─Hermes aplaudió complacido viendo a su hijo correr velozmente para despistar a la máquina.

Los dioses observaban el entrenamiento grupal de los jovencitos, simplemente porque no tenían nada más que hacer. Los chicos estaban debatiéndose contra una extraña máquina de obstáculos y trampas, todo con el fin de poder desarrollar sus sentidos y coordinación en la batalla, era un entrenamiento cronometrado dónde debían tardarse lo menos posible en recolectar pequeñas dracmas de oro que salían disparadas.

Quién tuviera más dracmas ganaba un privilegio. Pero Jeonghan estaba realmente lejos de llegar a la meta.

─Por Zeus, voy a morir ─el rubio corrió lejos de las flechas en llamas que soltaba la máquina.

Estaba tan concentrado en huir de las otras fechas que no vio llegar unas cuantas por su lado izquierdo. Se cubrió la cabeza con ambos brazos esperando el impacto pero este nunca llegó, al contrario, las flechas quedaron clavadas en el escudo de Minghao. Jeonghan lo observó desde su posición, el hijo de Eros estaba sobre un pequeño bloque de concreto, llevaba su espada y escudo en mano.

Pero lo más sorprendente era que estaba intacto, sin una gota de sudor, peinado y su ropa impecable.

─Sólo procura no morir ─dijo mirando a Jeonghan enderezarse.

Eros desde el Olimpo no pudo evitar reír, su hijo no dejaba de sorprenderlo.

Hades se encontraba en el inframundo viendo a su hijo através de una pequeña bola de cristal, Seungcheol había estado todo el entrenamiento insistiendo en mantenerse cerca de Minju aunque ella no necesitara ayuda. Para él era muy gracioso el hecho de que la jovencita ignoraba al pelirrojo.

Akemi corrió entre las líneas de fuego utilizando un escudo para protegerse, odiaba sumamente aquellas trampas hechas por Hefesto.

─¡Aquí viene lo divertido! ─exclamó Poseidón emocionado.

Una gran ola de agua apareció de una pequeña represa que estaba ahí, era turno de Jihoon para lucirse. Tuvo que correr un poco y evitar caer en la red que estaba colocada casi sin ser vista.El bajito extendió su mano al frente para intentar regresar el agua a su lugar, solía costarle muchísimo hacer eso por lo cuál Poseidón no dejaba de lanzar aquella trampa.