Guerra de Capitanes (Editando)

"Baile de Primavera" Parte 1.

Narra Ash.

 

Flashback.

(...)

-Nada de "Ash..." —Hable- Ahora si Mora, "Perderás la cabeza" —Aquellas palabras fueron dirigidas al chico de ojos grises que hace minutos había herido mi corazón.

-Está bien, Perderás la cabeza, Jayden... firma Ashley Kaufman —Una sonrisa se formo en mi rostro y abracé a Mora.

Luego de salir de los vestuarios nos marchamos hacía el partido de los chicos que estaba por comenzar, una vez que encontramos a Emma tomamos lugar a su lado y le conté lo que había sucedido, sin evitar contarle que Mora, cuando estábamos viniendo, decidió saltar por una ventana del instituto, imitando su salto de escapatoria del Lucas Enamoradito, pero no le salió nuevamente, no, para nada, sino que cayó dándose la cabeza de lleno contra el césped, pero como su orgullo era tan enorme dijo que no le dolió tanto, y si lo hizo, porque la escuchaba gemir de dolor.

-Ashley, nunca he estado de acuerdo con la venganza, pero en este caso estas cien por ciento autorizada a vengarte... Mi hermano paso la línea —Hablo Emma y yo sonreí- Y tengo un momento perfecto para vengarte... -A mi lado Mora acerco su oído de metiche y junto a Emma reímos- Baile de Primavera.

Fin de Flashback.

Llevaba ya unas 2 horas mirándome fijamente al espejo, pero había algo que me llamaba la atención. Y no era el hecho de que estaba peinada, estaba segura que era el vestido. Cuando había recibido del correo una caja esperaba que fuera de mi madre enviando galletas feas y quemadas, pero no, era un correo de Megan, mi mejor amiga de Arizona, y no eran unas galletas horribles cocinadas por ella, porque si que tenían en común eso con mi madre, ninguna sabía cocinar... Sino que era un vestido, un vestido con una nota que decía:

"Arruínalo bb, QUE LE DUELA... Vamos que tu sabes, me has tenido a mí de maestra, haz tu magia pequeño saltamontes"

Y debía admitirlo, aunque odiaba usar vestidos este era bastante bonito. El mismo era al cuerpo, la tela, celeste, tenía un estilo superpuesto, como si el vestido estuviera cortado en lazos horizontales y luego estos hubiesen sido pegados en su lugar superponiéndose. Luego esté se mantenía en su lugar porque cuando terminaba la tela celeste arriba de mis pechos una tela transparente unía la parte superior del vestido con unas joyas fantasía que decoraban mi cuello como si fuera un collar. Se podría decir que lo de, al cuerpo, era bastante literal, ya que marcaba cada curva de mi cuerpo, y le agradecí al deporte por haberme ayudado a conseguir tener cuervas en los lugares correctos. Luego mi cabello caía con sus rizos naturales del lado derecho de mi cuerpo, dejando el izquierdo sin ningún mechón. Llevaba un maquillaje suave, que consistía en labios color ciruela, mis ojos llevaban un plateado suave que combinaba con las joyas celestes y plateadas del collar del vestido. Mis zapatos eran altos y plateados, y no dolían tanto, pero aún así para mí seguían siendo "Artefactos del dolor"

El sonido de que alguien había tocado mi puerta muy fuertemente llamo mi atención haciéndome sobresaltar. Mire la puerta con detenimiento, sentía mi pecho subir y bajar, pero me dije a mi misma que me concentre en mi objetivo. Camine hacía la puerta con mi bolso de mano y al abrirla aguante la respiración. Aquel seguramente era el sueño de toda chica, tener un novio que sea sexy y que para completarla se ponga ropa formal, simplemente sin palabras. Los pantalones eran negros, pero se podría notar si se veía con detenimiento que no eran de vestir, sino que eran unos jeans negros, que le quedaban perfectos, si se me permite agregar. En la parte de arriba llevaba una camisa blanca con tirantes... Si, tirantes. Y para completar una corbata negra. Y si, MUY SEXY.