-¡Suéltenme grupo de mesas parlantes! –Grité y todos rieron, yo solo gruñí- ¡Juro que cuando esto termine me las pagaran, Y LES DOLERA DEMASIADO! –Volví a gritar y obviamente ellos volvieron a reír.
Era muy raro porque yo era una chica fatalista, pero en ese momento, no tenía miedo. Es más, solo sentía un enorme deseo de que una bomba les explotara en la cara… Solo eso.
Llevaban ya 30 minutos cargándome y yo ya me estaba poniendo nerviosa, ya que no me gustaba estar de cabeza ni me gustaba no saber a dónde me dirigía. Súmenle a eso que un castaño mediocre te este diciendo todo lo que te harán en el oído… NADA AGRADABLE.
-…Entonces luego desaparecerá toda esa ropita que traes… -Continuó Jayden- ¿Me estas prestando atención?
Lo miré sonriente, aunque de cabeza no sé cómo se vería eso.- No –Contesté.
Jayden sonrío- Creo que alguien está enojada- Comentó burlón y yo rodee los ojos.
-Y yo creo que alguien es estúpido pero, sin embargo, prefiero no decírtelo para que no te ofendas –Comenté y volví a sonreír.
Note como su rostro cambiaba de expresión a creo que enojo… Claro que era eso o que se había tirado un gas y no le había gustado.
-Sabes que solo estas volviendo más feo tu castigo, ¿No? –Comentó y yo rodee los ojos, que estuviera con ellos ya era un enorme castigo.
El camino siguió hasta que escuche música entonces supe que seriamente ese castigo me dejaría traumada para el resto de mi vida, pero entonces escuche la pequeña conversación que mantenían Jayden y Chase.
-Esa música no es nuestra, ¿No? –Preguntó Chase
Jayden negó con la cabeza- No… Y no creo que fuera buena señal, le dijimos a los chicos que todo debía ser bien culto. –Comentó mirando preocupado para todos los lados.
En ese momento en donde todos se veían entre si yo distinguí entre los arboles una figura rosa, seguidamente sonreí.
-Yo creo que deberían estar preocupados -Comenté y el chico que me llevaba se detuvo- También si fuera ustedes me dejaría libre.
Segundos después sentí como mis pies volvían a tocar el pasto, mire a mí alrededor y justo enfrente mío estaba un enojado Jayden.
-No estamos preocupados porque pase lo que pase nosotros siempre ganamos –Comentó.
-Eso está por verse –Respondí y él me miró con el ceño fruncido.
Entonces de la nada un gran grupo de hojas cayeron sobre nosotros y todos se miraron preocupados- No sé por qué presiento que si llego a levantar mi cabeza lo que vea no me agradara –Comentó uno de los jugadores y lentamente levantaron la mirada.
-¡Córrete, Ash! –Gritó Mora y yo di un paso hacia atrás al tiempo en el que una red caía sobre los chicos
La felicidad que se adueño de mi cuerpo fue reemplazada por sorpresa al ser levantada del suelo y puesta en el hombro de alguien… Nuevamente. El propietario de ese cuerpo comenzó a correr y había que asumir que era rápido… Tan rápido como… ¡MIERDA!
-¡JAYDEN SUELTAME! –Grité y el susodicho rió - ¡Joder, imbécil, te he dicho que me sueltes! –Volví a gritar
Ignorándome siguió corriendo hasta que me deje de sentir en su hombro y fui elevada en el aire para luego caer sobre agua. Deje escapar un grito ahogado cuando salí a la superficie, lentamente abrí mis ojos al tiempo en el que sentía una sonora carcajada de parte del castaño. Levante mi mirada y lo vi riendo como si su vida dependiera de eso. Yo comencé a flotar ya que el lago estaba muy profundo.
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Guerra de Capitanes (Editando)
Teen Fiction-¿A qué te refieres con que quieres ser jugadora? Nena, te romperás las uñas -Oh, discúlpame bonito. A mi esas cosas no me interesan, solo quiero jugar -Perdóname, pero no. -¿Por qué? No digas algo como... Porque eres mujer -Lo siento, bonita. Es ex...