Guerra de Capitanes (Editando)

"Todo vale la pena"

PoV Jayden

Abracé a Emma y luego la subí a mi hombro, ella comenzó a chillar y yo a reír.

-¡Jayden, ya bájame!

-Di las palabras mágicas.

-¡Maldito seas, Jayden! –Grito y yo reí aún más- ¡Bájame, idiota!

-Esas no son las palabras mágicas –Hable- En realidad son muy malas palabras para una señorita. –Di un pequeño salto para esquivar una botella y ella grito aun más fuerte.

-¡Por favor, Jay! ¡Bájame! -Me detuve y ella comenzó a respirar normalmente.

-Mmm, no –Hable y comencé a correr, en el transcurso ella gritaba, luego de unos minutos me detuve. Ya habíamos llegado a su habitación- Aséate y vístete, iremos a festejar.

Ella se bajo de mi hombro y me miro confundida.

-¿Festejar? –Pregunto divertida- ¿Contigo? –Asentí sonriente, ella río- No gracias, iré con las chicas.

Abrí mi boca, claramente indignado, ella río aún más fuerte.

-¿Me dejaras? –Ella asintió- ¿Abandonado? –Volvió a asentir, yo sonreí- Cuídate mucho, y prométeme que mañana iras conmigo.

-Te lo prometo, Jay –Beso mi mejilla- Nos vemos mañana.

Me di la vuelta para salir, pero antes de hacerlo me volví y la abracé.

-Estoy muy orgulloso, Em. –Hable y ella se ruborizo- Hablamos mañana.

Sin contestarme me cerró la puerta en la cara, yo sonreí y negué con la cabeza.

-¡EM, EMMA, EMMITA, EMMA! –Los gritos retumbaron por todo el pasillo, al mirar a la derecha Ashley "Corría" hacia donde yo estaba, al verme se detuvo.- Tú no eres Emma. –La vi fruncir el ceño y negar con la cabeza- Lo siento, eso es obvio... Sólo no planeaba encontrarte.

-Adiós, Ashley –Salude, luego me voltee y camine hacia las escaleras.

-Aguarda, Jayden –Nuestras miradas se encontraron y con ello sentí un escalofrió- Sólo quería desearles suerte en el partido, es el último de ustedes... –Pareció pensar sus palabras- Bueno, si se gradúan.

Sonreí- Gracias, yo te deseo suerte con tu pierna, Ashley. -Ella pareció algo incomoda, pero se mantuvo callada hasta que se adentro en la habitación de Emma sin tocar.

PoV Ashley.

Creo que muchas se dan la idea de lo horrible que es cuando las cosas dejan de ser lo que eran, o algunas lo han vivido... Pues yo hoy había vivido algo común, pero que me apuñalo el corazón.

Ashley...

Pues, si, Ashley es mi nombre, y él antes me había llamado Ashley... Pero había sucedió lo que no quería, había sonado diferente.

Piénsenlo de este modo: Hay una persona especial, que te importa mucho y te gusta, y un día se te acerca y te llama por tu nombre, y sientes que cuando lo dijo sonó único, delicado, dulce, sientes que ese sonido estará guardado por años en tu mente como si nadie pudiera volver a repetirlo de ese modo, entonces de un momento para otro te vuelve a llamar por tu nombre, y entonces suena brusco, sin ningún sentimiento, sin todo eso que antes habías sentido, como si simplemente toda la dulzura se hubiera esfumado... Bueno, pues eso había sentido.

-Ash, ¿Vendrás con nosotras? –Me pregunto Emma mientras que se terminaba de perfumar.

-No, me siento algo mal.