La Empleada Dragón de la Tienda Oboro.

Capitulo 29. La cabaña y el lago.

Capítulo 29. La cabaña y el lago. (Sin percances esta vez, ¿chicos?)

En el denso y frondoso bosque se escuchaba entre tantos arboles el murmullo de un grupo de personas platicando, Kobayashi y compañía iban de camino a su destino guiados con ayuda de Shouta que iba al frente, la mayoría estaban ahí a excepción de Takiya y Fafnir, todas iban platicando para hacer la caminata más amena, curiosamente cada dragón llevaba a su humano acompañante, Tohru y Kobayashi, Kanna y Saikawa, Lucoa y Shouta, Elma y ¿la comida?, pero aún más extraño era Ilulu y una mujer de cabello castaño jamás antes vista, tenía el cabello desarreglado, figura delgada, pechos medianos y cadera pronunciada, estaba que se la tragaba la tierra.

- ¡RAYOS!, ¡no logro acostumbrarme! - exclamo la chica misteriosa.

- Ahre... ¿acaso no te gusta cómo te ves ahora? - se acercó Tohru a molestarla.

- ¡Claro que no!, ¡no digas tonterías!, ni siquiera reconozco el sonido de mi voz.

- Te ves bien - confeso Kanna.

- Tienes razón, Kanna-chan - agrego Lucoa.

- Eso significa que puedes pasar por una chica si te lo propones - dijo Elma.

- ¡Aun no puedo creer que lo transformaron!, ¡QUE LINDA TE VES! - Saikawa estaba incrédula y emocionada.

Se acercaron para observarla detenidamente, la estaban hostigando.

- ¡Déjenme en paz! - grito lo más fuerte que pudo, las chicas se alejaron de ella mofándose de su apariencia.

- Take...

- ¿Qué pasa, Ilulu?

- Perdóname, no quise hacerlo - se acercó Ilulu muy arrepentida.

Efectivamente, aquella mujer de cabello corto era Take, al parecer Ilulu había utilizado su hechizo de cambio de género en él por error.

- Hay que admitir que te ves muy bien, Take-san... o debería llamarte Take-chan, fufufufu - se burló Tohru.

- ¡No es gracioso! - dijo Take enojado, antes de que dijera otra palabra sintió en un instante la mirada amenazante de Kobayashi a la distancia, parecía que murmuraba a algo.

- ¿Cómo es posible que Take tenga mejores atributos que yo en su forma femenina? - sus ojos se veían increíblemente aterradores.

- Creo que es mejor que no te acerques a Kobayashi en estos momentos, Take - concluyo Shouta.

- Tienes razón...

Take se preguntaba cómo diablos llegaron las cosas a este punto... días antes en la tienda de dulces, Tsubaki se veía ligeramente preocupada platicando con sus dos trabajadores cerca de la caja registradora.

- ¿Dijiste piojos, abuela? - pregunto Take.

- Efectivamente chicos, revisando el cuarto de descanso, encontre una de esas desagradables criaturas en el pequeño almacén... esto es muy malo para el negocio.

- Take, ¿de dónde crees que pudieron haber sali...

Los dos se asustaron al mismo tiempo, dieron con la respuesta de inmediato, lo más probable es que fuera culpa del gato Tenshin, aterrados empezaron a sudar, no querían que Tsubaki se enterará.

- Espero que ninguno de mis niños se haya contagiado, hablando de eso...

Tsubaki de la nada roció a Take en la cara.

- ¡AHHHH!, ¡mis ojos!... ¡¿qué es esto, abuela?!

- Es un repelente de plagas, descuida es para uso humano.